Once meses atrás.
Lena Luthor se encontraba en su oficina, leyendo el artículo de la reportera Kara Danvers.
Momentos después, dicha reportera se adentró en la habitación.
La CEO cerró la revista y miró en dirección a la mujer.
—Pero si es la nueva figura del periodismo de National City —Lena se levantó de su asiento, mientras Kara se acercaba al escritorio—. Estaba leyendo tu artículo.
—Es por eso que vine —La rubia habló con una sonrisa—. Tengo que agradecerte por ayudarme a encontrar ese club de lucha. Solo llevas un mes en la ciudad y ya has salvado mi trabajo, una cantidad vergonzosa de veces.
—Seguro que me devolverás el favor cuando llegue el momento —La pelinegra dijo y se sentó en su sillón ejecutivo.
—Hablando de eso, también quería darte esto —La rubia le tendió un pendrive a la otra mujer, quien lo agarró con curiosidad—. Alguien hackeó los correos electrónicos de L-Corp y los envió a CatCo de forma anónima. Pude enganchar la información y hay algunas cosas muy vergonzosas que en gran parte no son noticia —La CEO escuchaba atenta, en silencio—. Recuerdo que dijiste que quieres hacerte un nombre fuera de tu familia y no me gustaría que algún idiota lo arruine.
—Sabía que se produjo una violación en el sistema, pero creí que ya lo habíamos descubierto. Gracias, Kara —La mujer sonrió de lado, mirando al suelo.
—¿Sabes cómo podrías agradecerme? —Lena clavó sus ojos en la reportera, expectante—. Tenemos un juego nocturno que mi hermana y yo dominamos y necesitamos con urgencia un adversario digno.
—Lo siento, Kara. Cuando dije que quería que tuviéramos una relación positiva, fue porque pensé que podíamos ayudarnos mutuamente. Pero, déjame ser clara, me refería a una relación laboral —La rubia sintió un pinchazo en el pecho, dolida—. No me gustaría que me dieras estos emails por algún sentido erróneo de amistad —La CEO dejó el pendrive sobre el escritorio—. No vine aquí para ser amigos.
Kara suspiró. Estaba dolida, sí. Pero, por otro lado, no quería rendirse. Después de todo, la esperanza siempre fue su fuerte.
En dichos emails Kara había podido leer algo del pasado de la mujer: Había sido traicionada por su ex amiga Andrea Rojas, su familia en un sinfín de ocasiones le dio la espaldas y el apellido Luthor acarreó varias desgracias en la vida de la pelinegra.
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Pink Kryptonite - Supercorp
FanfictionKara Danvers y Lena Luthor se habían conocido doce meses atrás. En ese tiempo, las mujeres habían formado una bonita amistad, convirtiéndose en mejores amigas. A su vez, Luthor y Supergirl eran socias y compañeras, combatían el mal extraordinariamen...