De Diferente ADN | Terminado | ✔

Capítulo 19.

Los golpes dados por la mujer de pelo rubio eran potentes, el príncipe de los saiyajin's lo detenía y lograba dar uno que otro golpe, pero no causaba ningún daño a la obra creada por el malévolo Doctor Maki Gero. Los puños de la chica se dirigían en el pecho de Vegeta y él se cubría esa area como si dependiera de ello, dentro de esa armadura se escondía el collar de Zafiro; Bulma Brief. No iba a permitir que uno de esos golpes destruya el collar que le había regalo a su amiga de la infancia, no iba a permitir que un androide gané esa batalla, no le importaba salvar a Son Goku e incluso Raditz, lo único que le importaba era Bulma, no dejaría que su viaje a la tierra sea en vano.

—Tenemos compañía... —dijo número 17 mirando el cielo, sus palabras no fueron escuchadas por Vegeta y su hermana. —Interesante... —balbuceo aún manteniendo su mirada arriba.

Naves pequeñas estaban a la par de una de gran tamaño, la mirada del androide fue bajando conforme las naves aterrizaron en tierra firme, cada una de ellas se fue abriendo seguidamente y adentró se encontraban hombres con armaduras similares a las de Vegeta, incluyendo las colas de mono que se encontraban enlazadas a sus cinturas, de la nave mas grande salió el Rey de los saiyajin's, y al ver que su hijo se encontraba en peligro no dudo en ayudarlo.

Vegeta se encontraba de rodillas sobre el suelo seco y quebrado, una gota de sangre caía por su mejilla derecha, dejando una linea roja sobre su piel, su armadura tenía rupturas. La androide solo sonreía al ver que tenia la batalla ganada.

—Fue divertido, pero no tanto, no pude utilizar todo mi poder como quería.

El príncipe de los saiyajin's se sentía enojado, número 18 estaba a punto de matarlo y encima lo humilló diciendo que era alguien débil, sus palabras golpeaban el orgullo de Vegeta, pero no lo suficiente.

—Esto aún no acaba... —dijo el peli-flama, se puso de pie y otra vez atacó a número 18. —¡Aún no muestro todo mi poder!.

Sacó a flote toda la energía que aún tenía, pero no fue lo suficiente, la chica de ojos azules esquivó uno de sus golpes y, a continuación le dio un gran golpe con su pierna en el brazo izquierdo de Vegeta, un crujido se escucho y con ello el grito de dolor del príncipe, su padre no podía hacer nada, número 17 impedía que él lo pueda ayudar, incluso los demas saiyajin's no servían de ayuda. El hermano de número 18 se las arreglaba para evitar que ayuden al hijo del Rey Vegeta.

—¡Solo fue un pequeño golpe!. —dijo número 18 riéndose ante la situación que Vegeta se encontraba, mientras ella reía, el príncipe aguantaba su grito de dolor, un grito que sentía que lo quemaba por dentro, no podía hacer ningún movimiento con su brazo izquierdo, evidentemente estaba quebrado, cada conviviendo que hacia era peor para si mismo.

—¡Número 17 y 18!. —gritó un anciano con barba blanca y de cabello largo. —Hay que irnos de aquí, les ordene que matarán a Son Goku y aún no lo han hecho, solo pierden el tiempo.

Los androides volaron hacia el anciano, dejando a Vegeta herido y algunos saiyajin's muertos.

—Acaben con él, de una vez por todas.—añadió el malévolo mayor.

Los dos hermanos caminaron hacia Goku; que se encontraba aún en el suelo junto a Raditz, cuando número 18 y 17 estaban listos para lanzar un ataque, Goku desapareció, había utilizado la teletransportación. Se fue de ahí junto a su hermano.

—¿Qué hacemos con ellos?. —preguntó número 18 mirando a Vegeta, el Doctor Maki Gero había dado la orden para irse, ya que Goku había escapado, y él era el único el cual le interesa.

—Maten a todos. —ordenó el anciano dándose la vuelta, dio bastantes saltos altos y desapareció de ahí.

—Yo me encargó. —dijo la chica caminando hacia Vegeta.

—No puede ser, ¿te interesa ese fenómeno?. —preguntó número 17 mirando a su hermana con burla.

Ella estaba por decir algo, pero fue interrumpida.

—Y no puedes negarlo.—siguió diciendo número 17. —Porque de no ser asi; ya lo hubieras matado.

—¡No digas tonterías!, ¡Sabes que pienso muy bien que el amor son puras estupidez!. —reclamó ella, elevó su mano había Vegeta, incluyendo a los demás saiyajin's que se encontraban heridos. —Y para que veas, yo mismo mataré a todos.

Y tal como lo dijo, ella lanzo varios ataques, pero ninguno de esas esferas de ki provocaría daño a Vegeta.

"¡Vámonos!" ordenó número 18 antes de que el polvo desaparecía y revelará que no destruyó a ningún saiyajin, por alguna razón no quería acabar con la vida del príncipe.

Pero aún asi, Vegeta se encontraba grave, tenía el brazo roto y había perdido mucha sangre, su padre trataba de ponerse en pie y ayudar a su hijo.

—No puedo morir... No ahora, debo estar con Bulma... —balbuceo Vegeta, su vista se hacia cada vez mas débil y borrosa. Una luz blanca apareció de la nada, provocando que sus ojos se cierren por completo...

Una pequeña nave aterrizó; eran Jaco y Bulma. Cuando la peli-azul bajo y vio a Vegeta tirado en el suelo, sintió un escalofrío recorrer su piel.

—¡V-Vegeta!. —gritó Bulma corriendo hacia él, pero sus pasos fueron detenidos por otros saiyajin's. —¡No, déjenme!. —insistió a punto de estallar en llanto.

—Vete de aquí. —dijo el Rey Vegeta acercándose a la científica Brief, los saiyajin's se alejaron de ella, dejando el caminó libre para su Rey. —Por tu culpa mi hijo vino a este planeta, por tu culpa... ¡Mi hijo esta muerto!.

—No... Si me dejan atenderlo yo puedo hacer algo, déjame ayudarlo... —dijo ella con melancolía, se negaba a aceptar que quizas Vegeta había muerto.

—¡No hay nada que hacer!, ¡Esta muerto!. —gritó el padre del príncipe, se dio la vuelta y camino hacia su nave, pero antes; tomó a su hijo en brazos para irse de ahí.

Bulma cubrió su boca para aguantar sus lágrimas, su llanto, camino unos pasos hacia adelante, y se arrodilló en el suelo aún cubriendo su boca, elevó su vista y vio como las naves se elevaban, para luego irse.

—Vegeta... —dijo Bulma, un recuerdo vino a ella, donde una niña de coletas rojas y pelo azul prometía ser la esposa de su amigo en un futuro, era la promesa que ella le había hecho años atras. —Que mal momento para recordar... Ahora, aunque quiera no podre cumplir mi promesa...

Su mentón comenzó a temblar ante la impotencia, por no haber sido valiente y correr hacia Vegeta cuando el Rey de los saiyajin's se lo impidió, no pudo aguantar más y estallo en llanto, llorando como una pequeña niña indefensa. Había perdido a su quizas... Amor verdadero.

¡Continuará...!

Nota: Que sad... ;-; les dije que quizas este capítulo les haría llorar, que conste que yo les advertí :')

Bien, sera mejor que se preparen porque el siguiente capítulo sera el último, y si, esta historia ya va a llegar a su fin, ¿Olvide advertirles que sería corto?; creo que si...

JAJA OK NO, aún falta para que terminé, no voy a permitir que tenga un final triste :')

Bien,  ahora que el veggis murió 7_7 💔 Bulma tendra que seguir adelante, al menos podra encontrar a su hijo, pero estará sola ya que su padre murió ;-; uh... Ni hablar de los androides que tienen que matar a Goku...