De Diferente ADN | Terminado | ✔

Capítulo 21.

—Tenemos tres de las siete esferas —se dijo Bulma asi misma mientras miraba el radar—. Tengo que juntar las siete, y cuando Goku halla derrotado a los androides; traeremos a la vida a mi padre, a todos, incluso a ti; Vegeta.

La peli-azul se encontraba en una pequeña isla donde una esfera aguardaba ser encontrada por ella, su amigo Goku había iniciado un entrenamiento junto a su hermano y sus amigos, que se hacían llamar: "Guerreros Z", un equipo formado por; Krilin, Ten Shi Han, Picoro, incluso Yamcha fue parte de ese equipo, pero lo dejo para irse con Bulma.

—Uh, el radar dice que una esfera esta en la cima de esta montaña —dijo la científica, guardo el objeto rastreador y de ese pequeño bolso que colgaba en su hombro; sacó una capsula—. Bien, sera más fácil si utilizó mi nave.

Arrojó con poca fuerza ese pequeño frasco, y de inmediato apareció una nave blanca y el símbolo de la Corporación Capsula (CC) en un costado; cuya empresa es perteneciente de su madre, que fue abandonada durante tiempo, pero Tights se hizo cargo de ello cuando tuvo la mayoría de edad.

Bulma encendió la nave, y desde lo más alto pudo ver que arriba de la montaña había un gran edificio, nuevamente miró el radar para confirmar si no estaba mal, pero no fue asi, dentro de aquel edificó tenebroso y abandonado se encontraba un esfera del dragon.

—Esta en ruinas —dijo la peli-azul aterrizando su nave, bastante lejos del edificio—. Tendre que tener cuidado.

Ella avanzó, y quedo boquiabierta al ver que tenía una máxima seguridad, la puerta de entrada estaba en un estado perfecto, pero protegida; para ingresar se necesitaba el código de acceso. Claro, con unas herramientas pudo abrirla, aunque eso le llevo tiempo.

—Nada puede detenerme —se dijo entre pequeñas risas, la tristeza se había esfumado cuando supo que podría revivir a sus seres queridos.

Avanzó con lentitud, observando todo a su alrededor al mismo tiempo que miraba el radar, sus pasos fueron detenidos cuando encontró su objetivo; una esfera de cinco estrellas estaba sobre una mesa grande, junto a otros papeles.

Bulma tomo las esfera. —Perfec... —no pudo terminar de hablar, toda su atención se la llevo esos papeles, más bien diseños dibujados, tomo uno y se llevo una gran sorpresa—. ¡Esto es del Doctor Maki Gero!. —dijo con fuerza, rápidamente se cubrió la boca, su gritó había hecho eco por toda la habitación. Se encontraba en el segundo piso del edificio.

—¡Son un par de inútiles! —gritó alguien desde abajo del lugar, eso alertó a Bulma.

—Oh, maldición. Esa voz debe ser del Doctor Maki Gero. —caminó con lentitud hacia la puerta, para tratar de escapar, desde una ventana pudo ver su nave; no se encontraba lejos, si era rápida y cautelosa podría escapar sin ser vista.

Su mano derecha sostenía la esfera, asi que la deslizó hacia su bolso, pero por el miedo; sus manos temblaron y aquel esférico se le cayo, emitiendo un ruido fuerte, y para colmó rodo hacia las escaleras, rebotando hacía el último piso de abajo, donde se encontraba el enemigo.

—No, no, no —repetía Bulma, tenía las manos apoyadas en el suelo; había intentado atrapar la esfera.

—¡¿Quién anda ahí?! —gritó el anciano, tomó la esfera y miro arriba; donde las escaleras—. ¡Eres un idiota si querías robarme! ¡no saldrás vivo o viva de aquí!.

El cuerpo de Bulma temblaba conforme los pasos se hacían cada vez más fuertes, tragó grueso y salió corriendo del lado contrario para escapar, pero chocó contra alguien y cayo al suelo, cuando abrió sus ojos; vio a un chico de cabello negro (corto) y ojos azules, mirándola con una mirada de asesino, aquel joven era el androide número diecisiete.

[Planeta Vegita]

—Su hijo ya esta listo —dijo un sirviente del Rey Vegeta—. Tal como usted lo ordenó; he alterado la mente del príncipe, borré todo rastro de la tierra, incluso de aquella humana. Incluidos los recuerdos del pasado, tanto como el presenté.

—Esto es lo mejor, no quiero que mi hijo tenga algo con una simple humana, hubiera mezclado nuestra raza con algo insignificante. —dijo el Rey manteniendo una mirada firme.

—¡Rey Vegeta! —gritó un saiyajin entrando al laboratorio—. Me enteré que fueron a la tierra, ¿dónde esta mi hijo?.

—No sabemos, Bardock. Eso no me interesa, Raditz ya es alguien mayor para cuidarse sólo. —respondió el padre se Vegeta.

—Su hijo también es alguien mayor, y de igual forma usted lo fue a buscar.—exclamó Bardock con seriedad, suspiró y retrocedió dos pasos—. Con su permiso, iré a la tierra.

—No, desde ahora esta prohibido la mención de ese planeta, y también esta prohibido ir ahí. —espetó el Rey Vegeta con autoridad.

El padre de Kakaroto negó con su cabeza y salió corriendo, el Rey no impidió que se vaya, le importaba poco si aquel saiyajin de clase baja había tomado la decisión de ir a al tierrra.

—Mi rey, ya es momento para que su hijo despierte —dijo el mismo sirviente.

—De acuerdo —exclamó el Rey sonriendo—. Es momento que mi hijo vuelva a ser el mismo que antes, incluso mucho mejor.

La máquina donde Vegeta se encontraba fue apagada; tenía un aparato colocado por su boca y nariz, ya que aquella curación requería en estar dentro de ello, en base sería estar bajo agua. El líquido descendió, y en instantes; el príncipe Vegeta abrió los ojos, pero ya no sería el mismo, sino uno nuevo, sin recuerdos de Bulma Brief, y quizas, alguien despiadado, tal como su padre desea.

¡Continuará!.

Nota: ¡Corre Bulma, corre! :v jaja o sino te matarán XD

Bueno, ahora nuestro príncipe sera otro, les juro que no quería que esto pase, no tuve opción

Ah, tenemos portada nueva :3

sinceramente me gusto como quedo, ya que hace referencia a la historia. En fin, nos leeremos mucho tiempo despues, estoy deseando hacer un maratón, asi que tardare un poco, pero valdrá la pena ;3