•|| Ya Somos Una Familia ||•

Capitulo 7

-¿¡Aki?! -Sus piernas tiemblan, se sentia débil, alfrente de el estaba Aki, tomando la mano de Kirishima.- ¡Aki!

No lo escuchaba, gritaba, gritaba pero no lo escuchaba, podía ver como Aki se iba con Kirishima sin decirle nada. Y de nuevo todo se volvió negro. Cerró los ojos con fuerza, intentando de convencerse de que no era real.

Sólo es una pesadilla, sólo es una pesadilla, ¡Sólo es una puta pesadilla!.

Al abrir los ojos estaba en otro lado, estaba parado, fijo su mirada en dos figuras alfrente de el, no se veían bien, sólo podía ver sus figuras. Escuchaba la voz de un señor mayor pero no podia ver.

-Acepto... - Dijo un chico, su voz se le hacia muy conocida, cuando menos se dio cuenta, la figura se hizo cada vez más clara. Kirishima. Estaba sonriendo, con el cabello hacia abajo, con un traje negro, una rosa en un lado de su pecho, sosteniendo las manos de otra figura, que poco a poco dejó ver a una mujer borrosa.

-¿Y usted? ¿Acepta a Kirishima como su esposo? -Pregunto el pastor mirando a la prometida.

Cerró los ojos de nuevo. ¡Esto no es real! ¡Sólo es mi mente jodiendo con migo! ¡Despierta! ¡Despierta!.

-¿Papá?

Se escuchaba la voz de un niño, lo reconoció a un instante, Aki. Abrió los ojos mirando alrededor, ahora estaba en una calle, todo estaba destrozado, miro sus manos, tenía sus granadas, tenía su traje de héroe. Miro alrededor hasta ver un charco de sangre, miro y miro pero no encontro a nadie. Camino donde estaba ese charco, rojo carmesín, atrás había una roca gigante, la rodeó encontrándose con una escena horrible. Kirishima estaba en el suelo, sus ojos no mostraban ninguna señal de vida, tenía un gran agujero en su espalda y a su lado estaba Aki, llorando, con algunos raspasos en su rostro.

-¿Papá...? Papá...despierta - Dijo el pequeño, pidiendo al cadáver que estaba alfrente de el que despertará como si fuera a despertar- Papá...¡L-lo siento! ¡Despierta! ¡Esto no es gracioso ya papá! ¡PAPÁ! ¡NO TE VALLAS AHORA QUE ESTAS A MI LADO! - El niño gritaba, lloraba, rogaba que el pelirojo despertará, esa escena hacia que el corazón se le estrujara. Sin darse cuenta el también empezó a llorar con todas sus fuerzas, quería que está pesadilla parará.

La persona que amo y amaba aún estaba tirada en el suelo, sin ninguna señal de vida, muerto. Su hijo estaba llorando rogando que despertará pero el ya no estaba. De nuevo, todo se volvió negro, hasta un momento que los abrió al escuchar la voz suave y calmada de su Alfa.

-Bakugou...abre los ojos -Negó con la cabeza, no sabia que podía pasar Si abría los ojos.- Bakugou...Blasty, abre los ojos, estoy bien...

Los abrió.

Estaba con Kirishima en el sofá de su casa, todo se veia tranquilo, muy tranquilo para ser verdad. Al ver a Kirishima su rostro cambio, ahora se le veía triste, apagado, serio. No, no le gustaba para nada esa expresión en su cara.