~La verdadera leyenda~

~Ionisa~

Adora: ¿¡Eres la mujer que vi en la reunión!? 

Ionisa: Algo así, lo que viste fue una ilusión, yo las creo. De hecho os he estado proporcionando visiones a ti y a Catra desde hace un tiempo.

Adora: Mierda, Catra, debería avisarle...

Ionisa: No, espera, yo no estoy realmente aquí, soy otra visión- la miro confusa, sigo sin entender bien su objetivo con todo esto- No os puedo contar todo ahora, pero cuando sea seguro os lo explicaré a las dos, por el momento necesito que nadie sepa de mi existencia. Nadie- pongo una pequeña mueca al recordar la mención que le hice a Hordak sobre la mujer, ya que en ese momento solo quería demostrar que sabíamos más cosas de las que pensaba.

Adora: ¿Y qué debemos hacer? ¿Cómo paramos a los clones? 

Ionisa: Tenéis que permanecer juntas, esa es la leyenda. Y puede que no te guste esto, pero solo podéis confiar la una en la otra, es muy arriesgado contarle algo de esto a alguien- espero que Entrapta no cuente como alguien, porque ella sabe perfectamente lo que nos ocurre.

Adora: Entonces... ¿realmente tenemos oportunidad de acabar con los clones?

Ionisa: Sí, eso esperamos, sois la última oportunidad para hacerlo. Nunca los hemos conseguido parar, pero vosotras lo lograréis. 

Una luz aparece de repente y noto a alguien tocando mi hombro.

Catra: ¿Estás bien?- la felina me gira buscando mi rostro.

Adora: ¿Qué haces aquí?

Catra: Tardabas mucho y decidí salir para ver si todo iba bien- se encoge de hombros. Me quedo mirando su gesto un buen rato. Creo que hasta el momento no he sido realmente consciente de la evolución que ha tenido la chica. Gracias a un pasado horroroso y un abandono de la persona que más le importaba  se transformó en alguien que no era, protegiéndose con un escudo de frialdad y maldad. Consiguió conectar con personas como Scorpia y Entrapta y llegar a apreciarlas, y ahora, después de todos los errores por parte de las dos, ha conseguido redimirse y, en cuestión de días, hemos llegado a este punto: ella en la Rebelión, luchando con nosotros y siendo de gran ayuda. Ha mostrado tantas veces su lado bueno estos últimos días que parece un sueño- Es divertido ver cuando te empanas, pero últimamente lo haces muy a menudo y eso comienza a asustarme.

Adora: ¿Eh?- agito la cabeza, quitándome ciertas ideas del medio.

Catra: ¿Estás bien o no?

Adora: Sí, si, estoy bien- me mira como si estuviera perdiendo la cabeza, pero luego sonríe.

Catra: Definitivamente tu micro cerebro necesita dormir- se gira para volver al castillo, pero yo la detengo.

No sé exactamente porqué lo he hecho, solo necesito que nos quedemos aquí un rato. Entrar en el castillo significa volver a la realidad, volver a enfrentarse a todos los miedos y al estrés.

Algo dentro de mi hace clic, consiguiendo unir en una sola emoción todo lo que me ha estado pasando hasta ahora, dándome cuenta al fin de algo que debería haber sabido desde hace tiempo.

Adora: Catra, creo que no he sido honesta- me mira confundida unos segundos. Tiro de ella para acercarla a mí y su rostro se oscurece de repente- Ni contigo ni conmigo misma. No te puedes ni imaginar lo mucho que te aprecio, y siento no habértelo dicho antes- estas son las palabras que debería de haberle soltado hace ya tiempo, cuando estábamos en la Horda, las mismas que me atreví a decir en la ilusión de Ionisa. La felina abre la boca para continuar pero yo la freno- No, espera, esas palabras provienen de la Adora del pasado que debería haberte tratado diferente, la Adora del presente tiene algo más que enseñarte.