Historias Corta

Del amor al odio y del odio al amor

Parte 1

Un chico de pelo platino se dirigía a la mansión que compartía con el multimillonario y jefe de la mafia en las sombras Asami Ryuchi. 

Cuando el joven entro en el departamento su corazón se rompió en mil pedazos cuando descubrió a su amante teniendo relaciones íntimas con una mujer en el sofá. Lágrimas silenciosas empezaron a caer como ríos de sus ojos, Asami alzó la mirada encontrándose con Akihito llorando. En cuanto sus miradas conectaron el menor salió corriendo del departamento, solo volvió a él cuando se aseguró de que Asami no se encontraba en el, fue a su habitación y recogió algo de ropa. Pensaba irse y no volver.

Al salir del departamento unos hombres corpulentos lo cogieron y lo subieron a un coche, este le llevó a la oficina de Asami quien lo esperaba en  sentado en su escritorio.

- Te daré el dinero suficiente para que puedas mantenerte hasta que puedas hacerlo por ti mismo, además ya te he conseguido un apartamento para ti, aquí tienes las llaves.

Akihito no podía creer lo que estaba escuchando, Asami, su gran amor, lo estaba echando de casa aunque él ya había tomado esa iniciativa. Pero necesitaba saber por qué.

- Solo quiero saber por qué, no necesito nada más de ti.

- Ya he jugado contigo lo suficiente como para aburrirme, además tengo una novia que vendrá a vivir conmigo.
- Te vas a arrepentir y cuando eso suceda yo ya no estaré contigo, jeje, a ver cuánto duras con ella.

El rubio salió de la oficina dando un gran portazo, le habían destrozado el corazón y habían jugado con él. Se sentía humillado y utilizado. De su bolsillo saco su teléfono y marcó un número.

-¿Diga?
- Fei Long. -su voz sonó quebrada-.
-¿Akihito?
- Si.
-¿Que ocurre?
-Asami me ha echado, ¿Puedo ir contigo?
- Claro que puedes, mandaré a alguien para que te busque y te traiga a China. Aguanta.
-Gracias.

Paso un par de horas cuando un coche negro se estacionó frente a él, un hombre con traje le abrió la puerta indicándole que entrara en el coche y así lo hizo. Su próxima parada, China.

Un apuesto hombre de pelo largo estaba sentado en su escritorio revisando papeles de sus múltiples negocios cuando Akihito entro en su despacho. El hombre al ver quién era se apresuró en acudir a su lado y darle un abrazo reconfortante que tanto necesitaba, con calma le pregunto que había pasado y el reunió todo el coraje que pudo para contarle todo, eso enfureció al hombre que lo sostenía en sus brazos.

-Quiero cambiar, quiero hacerle daño. Feilong por favor ayúdame.
- Haré todo lo que pueda y necesites. Pero primero ve a descansar un poco, más tarde hablamos.

Feilong vio esto como una oportunidad para tener a Akihito a su lado como su amante porque desde que lo tuvo secuestrado no pudo dejar de pensar en él. Ahora tenía la oportunidad y no la iba a desaprovechar.

A la mañana siguiente Akihito se levantó deprimido pero decidido sobre lo que había pensado buena y otra vez durante toda la noche. En el comedor se encontraba Feilong tomando su desayuno, se sentó a su lado y empezó a comer.

- Quiero cambiar - dijo de repente haciendo que su acompañante lo mirara raro.
-¿Cambiar?¿En qué sentido?
-En todo, quiero un cambio de sexo. Seré otra persona.
- Si eso es lo que quieres, así será.

El Akihito que todos conocían ha muerto en su lugar otra persona surgirá.