*Dejemos de soñar

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Estaba siendo raro.

Habíamos llegado al lugar y estaban todos los invitados.

Rápidamente Patty corrió hacia mi.

—¡Sony! ¡Viniste!—hablo contenta abrazándome.

—Si aquí estoy, toma.—dije entregándole el regalo que acababa de comprar.—le he comprado un regalo a tu hermano...por cierto, ¿donde está?

Ella sonrió.—Esta por allá, pero...descuida se lo pondré en la mesa, ahorita lo saludas, vente te presentaré a unos amigos.—hablo y luego miro a los chicos.—Oh, primos de Sony no los había visto...ustedes también vengan.

Nos llevo hasta el otro extremo y nos presento a casi toda su familia.

Mi intención realmente era felicitar al cumpleañero e irme pero, al parecer el cumpleañero estaba ocupadisimo poniéndose borracho así que no sería posible esa opción. Y Patty no dejaba que nos marcháramos.

Fue raro, ya habían pasado más de 40 minutos y solo estábamos sentados.

—¿Está medio aburrido verdad?—cuestionó ella mirándonos un poco decepcionada.

¿Medio? ¡Aburridisimo! Quise decir.

—Pues...

—¡Para mi no!—interrumpió Chris.—¡Siempre quise ir a una fiesta de personas normales sin mucho dinero...!—abrí los ojos ante su respuesta.

—¿Como?—preguntó mi amiga extrañada.

—¡Nada!—le corte.—El es así, es que como no es de aquí...se expresa mal.—trate de corregirlo.

—Ahh...—habló ella.

Al cabo de unos minutos seguimos hablando hasta que se le ocurrió la grandísima idea de jugar verdad o reto.

Fue entonces cuando llamó a todos invitándolos a jugar.

—No puede ser,hace mucho que no juego a esto...—susurre mientras estábamos todos incados o sentados en el suelo observando la botella.

—Yo jugué pocas veces.—dijo James.

—Yo nunca.—pronunció Adam con su misma seriedad.

Esperamos ansiosos a que girara y así fue hasta que apuntó a un chico y una chica.

—Mira, tú pones el reto porque la boquilla te apunto y tú lo cumples.—le dijo Patty a la chica.

—¿Que no es al revés?—hablo otra de la bola.

—Me da igual, háganlo como dije y ya.

Y así fue, el chico le puso un reto a la chica el cual consistía en lamber el piso que estaba todo lleno de polvo.

Todos pusimos cara de asco ante de eso, la chica sonrió y giro la botella.

—Mejor hagámoslo así, al que le toque la boquilla le pongo un reto, y luego al que le tocó gira la botella y le pone reto al que te tocó y así sucesivamente.—sugirió.

—¿Pues así es no?—pregunte.

—¡Hay ya como sea!—hablo Patty desesperada.

Luego la botella giró.

Estaba por detenerse en una chica cuando ésta se giró un poco más y se detuvo en:

Adam.

—¡Bien!—dijo ella sonriendo.—Te reto a qué...vayas con Emily al baño y se encierren por 5 minutos.

Emily era la otra chica del trabajo que siempre habíamos odiado Patty y yo pero que por desgracia su hermano estaba perdida y secretamente enamorado. Y es por eso que estaba aquí.

En el mundo de SonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora