"Pudiste contra todo, pudiste contra los tiempos difíciles y el dolor. Pudiste contra todas esas veces en las que todo lo que querías era rendirte... así que déjame decirte que estoy orgullosa de ti Alexandria"
"Portada echa por _stellacadenti"
Está...
Sus besos me hacían sentir en la gloria, en menos de lo que pensaba, ambas estábamos desnudas y en la cama, Lexa se posicionó encima de mi, una de sus manos fue a mi cintura y la otra la coloco al lado de mi cabeza como apoyo, nuestros labios se separaron por unos segundos para tomar aire y volver a besarnos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lexa mordió mi labio inferior, mientras mis manos fueron a su espalda, acariciándola con amor, Lexa desvío sus labios a mi cuello y yo subí mi mano derecha a su cabellera, solté un gemido al sentir una de sus manos en mi pecho, jugando con mi pezón.
-Lexa-. Gemí su nombre con respiración agitada.
Ella no dijo nada, solo siguió besando mi cuello hasta bajar hasta mis pechos, una de sus manos jugaba con uno de mis pezones y tomaba entre sus labios el otro, apreté fuertemente su cabellera, soltando pequeños gemidos.
-Lexa... Lexa, por favor-. Gemí al sentir como sus labios bajaban a mi abdomen mientras sus manos seguían jugando con mis pezones, torturandome.
-Tranquila Clarke, voy adorar tu cuerpo como es debido-. Dijo Lexa y yo bajé la vista para ver qué me miraba directamente a los ojos.
Lexa sonrió y volvió sus labios a mi abdomen, siguió besándome con lentitud, tomando completamente su tiempo mientras la excitación se acumulaba cada vez más dentro de mi.
Lexa siguió besando mis caderas, mis piernas pero saltándose la parte donde más la necesitaba, ella empujó mis piernas, abriendolas más y sentí sus labios en mi sexo, haciendo arquearme en la cama, sus manos fueron a mis pechos mientras que mis manos apretaban más su caballo, acercándola a mi.
Sus labios y lengua estaban haciendo estragos en mi cuerpo, comencé a mover un poco mis caderas, sentí como una de sus manos se alejaba de mi pecho y comenzaba acariciar mi sexo, mis labios se separaron un poco mientras gemía cada vez más.
-¡Lexa!-. Grité cuando adentro dos dedos en mi.
Lexa no hablo, simplemente siguió en su tarea, la sensación era única, sus labios y sus dedos eran una maravilla, comencé a mover más mis caderas, siguiendo sus movimientos, Lexa aceleró el movimiento con sus dedos, comencé arquearme en la cama, era demasiado y cada vez me acercaba más al orgasmo.
Lexa sabía utilizar muy bien su boca y manos, mi pecho subía y bajaba rápidamente, subí mi mano derecha para apretar uno de mis pechos mientras mi otra mano seguía en la cabellera de Lexa.
-Lexa, si... Si... Oh dios-. Gemí mientras cerraba mis ojos.
Lexa no paro si no que aceleró el movimiento de sus dedos y yo sentía que me acercaba con rapidez, estuvo unos segundos así hasta que ya no pude más, grité su nombre cuando llegue al orgasmo, sintiendo los espasmos en mi cuerpo, yo me había arqueado en ese momento.
Lexa siguió acariciando mi sexo mientras yo me recostaba en la cama, mis labios estaban entre abiertos, me sentía en las estrellas, sentí los labios de Lexa besar mi abdomen para seguir subiendo hasta que sus labios besaron mi mejilla.
