"Pudiste contra todo, pudiste contra los tiempos difíciles y el dolor. Pudiste contra todas esas veces en las que todo lo que querías era rendirte... así que déjame decirte que estoy orgullosa de ti Alexandria"
"Portada echa por _stellacadenti"
Está...
Gire en la cama hasta estar boca abajo, sonreí al sentir la mano de Lexa en mi espalda, gire mi rostro para verla y ella me miraba directamente al rostro.
-¿Qué haces mirándome a si?-. Le dije divertida mirando su perfecto rostro.
-Nada, solo veo a la mujer hermosa enfrente de mi-. Dijo Lexa y yo sonreí.
-Aja... Pues yo también veo a una mujer hermosa que está enfrente de mi y es toda mía-. Dije con una sonrisa de oreja a oreja acercándome un poco a ella.
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-Te amo Clarke-. Dijo Lexa y yo sonreí para después besar sus labios castamente.
-Yo también te amo mucho-. Le dije mientras subía mi mano para acariciar su rostro, pegue mi frente con la de ella mientras sentía su mano acariciar mi espalda.
-Por más que quiera estar así contigo, tenemos un lugar a donde ir-. Dijo Lexa alejándose de mi.
-¡Nooo! Vuelve por favor-. Dije estirando mi mano, tratando de alcanzarla.
-Vamos Clarke, te encantará... Ahora ¿Dónde estas mis botas?-. Dijo cuando se sentó al borde de la cama, mientras tomaba su camisa para ponérsela.
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-Estan del lado de mi cama-. Dije señalando mi lado mientras me acurrucaba más en la cama.
-Vamos Clarke, levántate y no estés de floja-. Dijo Lexa y yo rodé los ojos.
-Ya voy señora gruñona-. Dije agitando mi mano para después arrastrarme en la cama y pararme.
Lexa río mientras se terminaba de poner sus botas y mientras por mi parte gruñia, no se por que Lexa quería levantarse de la cama tan temprano, era tan cómoda pero no... Lexa tenía que decir que me llevaría a un lado, muy bien Clarke, cálmate, la cama puede esperar.
-Te espero cerca del elevador-. Dijo Lexa agitando su mano con mochila en la espalda para después salir de la habitación mientras masticaba una hoja de yerbabuena.
-Y así la ingrata se va, sin decirme más detalles de donde me lleva-. Gruñí aunque después me reí de mi misma.
Termine de cambiarme y acomode la cama, según Lexa ayer me había dicho que sería mi turno, así que aquí estoy, acomodando la cama para después tomar una hoja de yerbabuena para después acomodar mi cabello y tomar la mochila que Lexa me había preparado y salí de la habitación, saludando algunas personas en mi camino.
