Tourette [Choi Yeonjun]

4-

Los dos chicos quedaron un poco apartados después de lo que ocurrió minutos atrás. Al joven de cabellos azules le seguía doliendo su cabeza por el jalazón que le hizo la chica.
Ella seguía disculpándose por lo sucedido.

- De verdad, lo l-lamento.

- No te preocupes, ahora que sé de tu condición, sé que es algo que pasará a menudo. - dijo sonriendole.

La chica se sonrojo, no es porque le gustase el chico, es simplemente porque el comprendía lo que pasaba con ella y es algo que nadie a excepción de su mamá entendía.

Se quedaron en un silencio sentados esperando aún para entrar a su salón.

La chica sólo miraba al joven, este al darse cuenta la miró.

- ¿Qué pasa?

- Nada. - la chica jamás apartó la mirada.

- Sabes, usualmente cuando alguien descubre a otra persona viéndola, siempre apartan la mirada, pero tú incluso te enfocas más en mirar a la persona. - dijo el chico confundido.

- Mhm, sí. Pero n-no me gusta mirar a las p-personas.

- Entonces. ¿Por qué me miras?

- Yo... no sé.

- Ah...

El chico no dijo nada más, no quería incomodar a la chica y simplemente decidio callar. Transcurrieron los minutos y por fin dio el toque para cambio de clase.

- Hum, deberíamos volver.

- Sí.

El chico se levantó del suelo y extendió su mano para ayudar a la chica. Esta la tomó dudosa, no quería que le diése un tic y golpeara al chico, de nuevo. Al final cedió y comenzaron a caminar.

En el recorrido a su aula, la joven comenzó a tener espasmos y a gruñir. El chico la detuvo ante eso.

-¿Te encuentras bien? Deberías ir a la enfermería.

-No, estoy b-bien.

-¿Segura? ¿No quieres que te lleve?

- Estoy bien... v-vamos al salón....

-Bien, pero si necesitas algo, dime.

La joven solo asintió, entraron al salón., Muchas chicas y uno que otro chico chillaron embobadas por la hermosura del joven Choi, y otros veían confundidos a Moari por llegar con aquel chico. Se puso nerviosa al sentir malas miradas, una de ellas siendo de su hermana.

Yeonjun no le tomó importancia y se fue a sentar a su lugar. Moari al verlo hizo lo mismo.

Pasaron las clases rápidamente, haciéndose notar el timbre que anunciaba la hora de descanso. Yeonjun guardaba tranquilamente sus cosas, mientras que una BaeRim se acercaba a él.

--Oye, disculpa si te incomode hace rato, te recompensare almorzando contigo. - hablo la joven con una sonrisa tímida.

- Mejor no te acerques a mi, sería la mejor recompensa. - Yeonjun habló sonriente.

La chica salió enojada de ahí junto a sus amigas. Moari seguía guardando sus cosas. Al momento de querer guardar su libro le llegó un tic y aquel peliazul resultó nuevamente herido.

La chica exaltada por eso corrió hacia él.

-- Disculpame. - miró preocupaba como le comenzaba a salir sangre de la nariz al joven.

-Auch... Descuida...

La chica fue rápido a su mochila, se estaba alertaron y no quería golpear más a Yeonjun. Suspiro, y comenzó a relajarse. Fue nuevamente con el chico y le extendió papel.

-T-toma.

El chico la tomó y apretó su nariz para que el sangrado parará.

-Gra...cias. - habló con un poco de dificultad al tener presionada su nariz.

-En serio...¿E-estas bien?

-Por supuesto. Mira, ya dejó de sangrar. - le mostró a la chica su nariz.

La chica sonrió un poco.

- Por cierto. ¿Qué dan hoy en la cafetería?

-Humm...creo que e-ensaladas...

- Oh, ¿no dan otra cosa?

-No...P-pero yo traigo mi d-desayuno. Tal vez lo q-quieras. - dijo tímidamente.

-Pero...¿Y tú que comerás?

-Mmm comprare una e-ensalada.

-Bueno, entonces vamos.

La chica asintió para ir por su mochila y salir junto al peliazul.

-¿Ya no te d-duele?

-No mucho. - le sonrió.

No tardaron para llegar a la cafetería. Fueron a una mesa desocupada, en una esquina.

- Iré a comprar tu ensalada.

- Oh, espera, el d-dinero.

- Tranquila, pagaré yo, tú me darás tu almuerzo, ¿no? Sería algo equilibrado.

- Bien...

Mientras el chico iba por la ensalada de la joven, esta sacó con cuidado su almuerzo de la mochila, tratando de que no lo diése algún tic en ese momento y lo tirará. En cambio, el joven Yeonjun compraba la ensalada, mientras esperaba ser atendido. BaeRim apareció.

- Oh, Yeonjun-ah, así te llamas, ¿no?

El chico la ignoró por completo, pidiéndole a la encargada de cafetería su orden, ella quiso seguir con un tema de conversación.

-Veo que te gustan las ensaladas, tenemos algo en común. - la joven sonrió.

- No es para mí. - dijo cortante.

Este le dio las gracias a la señora que le atendió y fue hacía Moari. BaeRim, los vio un tanto furiosa.

- Toma.

- Gracias por traerlo. T-ten. - le extendió su almuerzo.

- No hay de qué. - sonrió. - y gracias por darme tu almuerzo.

Los dos chicos comenzaron a comer tranquilos, chicas que pasaban casualmente chillaban de emoción por ver al peliazul.

En unas mesas más adelante, estaba BaeRim, observándolos. Le atraía Yeonjun, y ver que su hermana estaba con él la ponía demasiado molesta.

- ¿Cómo es posible que este con esa loca? ¿Le gusta ser golpeado? Soy muy bonita a lado de Moari.

- Es que él aún no ve lo hermosa que eres amiga. Deberías acercarte más a él. - sugirio Yuna, una de sus amigas.

- ¿Debería?

- Por supuesto, estoy segura de que él está con ella por lástima. - habló esta vez Yujin.

- Debe ser eso. - hablo BaeRim aún viéndolos, ver como Moari se ruborizaba o soltaba pequeñas sonrisas, le entraba la curiosidad de que le estaria diciendo el peliazul.

Editado: 02/08/2022