The Town Of Secrets | Jughead Jones

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15 de Junio

—Vamos Betty, estas vacaciones han sido aburridísimas. ¿No hay ninguna posibilidad de que tú mamá te deje salir?—Traté de convencer a mi mejor amiga mientras la veía por la ventana de mi cuarto. Nuestras casas siempre habían estado la una de la otra.

—Cero posibilidades. Mi mamá ha estado un poco, por no decir mucho, paranoica con la relación de Polly con Jason. Pelean todos los días, no quiero que lo haga conmigo también.

—Bueno, está bien. Te entiendo. ¿Y cómo es la relación entre ellos? Digo, ¿por qué tú mamá está tan en contra de ellos?—Pregunté curiosa.

—La verdad, ni yo lo sé. Supongo que su relación es un poco tóxica, siempre pelean o eso parece. Jason es un poco distante con ella, aunque Polly no se da cuenta de eso, mamá si lo hace y eso es la causa de todas las peleas.—Gritos se empezaron a escuchar en la llamada, supongo que provenientes de Polly y su madre haciendo que Betty mirara detrás de ella.—Sip, aquí van de nuevo.

Hubo un silencio en la llamada en donde solo nos concentrábamos en escuchar lo que decían, hasta que la mamá de Betty entró en la habitación regañándole por estar tanto tiempo en el celular. Cuando vió que estaba hablando conmigo, una rabia se apoderó de ella. La mamá de las Cooper siempre habían tenido un odio inexplicable hacia nuestra familia, no querían que nos juntáramos con Betty porque según ella la haríamos sufrir.
Sin embargo, desde niña la rubia siempre la desobedeció y eso ya se había vuelto costumbre.

—Lo siento por eso, Ally. Ya sabes como es mi mamá..

—No te preocupes, Betts. Lo entiendo.

—Tengo que colgarte, hablamos más tarde. Y lo siento de nuevo por no poder ir..—Desde mi ventana le hice un gesto de que todo estaba bien y colgamos la llamada.

Le envié un mensaje a Jughead para saber si el quizás podía ir, pero recibí una respuesta negativa diciendo que tenía que trabajar en el autocinema.
Archie estaba en la construcción, por lo que tampoco podía contar con el. Cansada de buscar a alguien, salí de la casa por mi cuenta y fui a Pop's a comprar una malteada sola.

Sinceramente, estas vacaciones habían sido una de las más aburridas. Arch estaba en la construcción, Jug en el autocinema y Betty encerrada. No tenía nadie con quien salir.

—Hey, Pop's. Quiero una malteada de fresa, por favor.—Dije cuando noté que venía el dueño/mesero a pedir mi orden a penas me senté. Cuando lo anotó y se fue, la característica campanilla sonó avisando que alguien había llegado. Jason Blossom se pronunciaba en la entrada, buscando a alguien con la mirada.
En lugar de la persona que estuviera buscando, me encontró a mi. Cuando me miró, algo en su mirada cambió. Algo que no pude descifrar.

Pop's se acercó con mi malteada y la dejó encima de mi mesa, moví mi cabeza en forma de agradecimiento y pronuncié un "Gracias" con mis labios.

—La pequeña de los Andrews. ¿Qué haces sola por aquí?—Preguntó el mayor de los Blossom sentándose al frente mío sin que yo se lo permitiera.

—Umm, no es de tu incumbencia.—Contraataqué. No quería ser descortés, pero Jason y yo nunca habíamos hablado, casi ni cruzado miradas. Siempre he sido amable debido a las enseñanzas de mi papá, pero también me enseñaron a ser desconfiada. Y debido a que mi hermano era parte de los Bulldogs, sabía de sobra que con las personas que tenía que ser desconfiada era con las de ese equipo.

—¿Día de malas?—Curioseó formando una sonrisa perfecta que mostraba sus dientes. Algo que derretiría a cualquier chica, menos a mi.

—Lo siento, Jason, ¿verdad?—Hice como que no me sabía su nombre cosa que lo sorprendió y asintió aturdido.—Es un poco raro que una persona que a penas conoces se siente en tú mesa sin ningún pretexto.

—Mis disculpas, Allison.—Pronunció, diría que con un poco de gracia. La situación le causaba risa, algo que me hacía enojar.—Solo estaba buscando a Polly. ¿No la has visto?

—¿Polly? No, está en su casa.—Recordé como peleaba con su mamá debido al chico que estaba frente a mi.

—Rayos, su madre es tan molesta.—Confesó. Fruncí mi ceño debido a su repentina confesión ya que no llevábamos ni diez minutos hablando.

—Si, lo que digas.. creo que me voy a mi casa.—Respondí extrañada, parándome de la mesa con el propósito de ir a la caja a pagar mi malteada.

—No, espera.—Agarró mi mano. Pensé que su agarre sería suave, pero no fue así. Comenzó a hacerlo fuerte, al punto de sentir que sus dedos quedarían marcados en mi piel por mucho tiempo.

—¿Qué te pasa, imbecil?—Levanté un poco mi tono de voz intentando sacar mi mano.

—¿Está todo bien, Allison?—Interrumpió Pop's, conociendo mi nombre debido a que venía seguido por aquí.

—Si, señor. No se preocupe, ella está bien.—Respondió Jason por mi soltando mi mano con una mirada de furia inexplicable. Al soltar mi mano la dirigí hacia mí tocando la zona afectada, blanca por la fuerza que había ejercido.

Aún con una mirada de asombro, salí de Pop's casi corriendo intentando olvidar lo que había pasado. Quizás era un arranque de rabia debido a lo descortés que había sido con el, aunque no había justificación.
Mi personalidad se caracteriza por siempre buscarle el lado positivo a la situación, o a la persona. Siempre buscando una razón al comportamiento que tiene la persona, siempre buscando el porqué de sus acciones. O como dice el dicho, siempre buscándole la quinta pata al gato.

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