|•Mi Amor Imposible•| |•남진•|

✴CAPÍTULO 37✴

•SeokJin•

Sentía que unos brazos rodeaban mi cintura, abrí mis ojos y literalmente los abrí más que en toda mi vida, NamJoon estaba ahí dormido al frente mío a tan solo unos centímetros, si era un sueño no quería despertar ¡Nunca!

Creo que me le quedé viendo por mucho rato, pero no podía evitar ver sus labios.

– Si solo me sigues mirando llegaremos tarde...

Me sobresalté al escucharlo, su voz ligeramente ronca y el saber que él estaba despierto y sabía que lo miraba.

– Perdón... –Reí nerviosamente y él abrió los ojos–.

– No quiero levantarme de la cama...

– Pero tenemos que ir al insti. –Dije mientras me sentaba–.

– Pero podemos faltar un día y seguir durmiendo.

– Tenemos que ir...

– Que aburrido... –Se escondió bajo la frazada y abrazo mis piernas–.

– Pues aburrido será el tener que ponernos al día en todos los cuadernos que por TU culpa nos vamos a atrasar si no vamos al insti.

–Se quitó la frazada de encima–. Tienes razón. –Se levantó y fue hasta la cómoda y tomó su celular–. Estamos a tiempo son seis y media.

– ¡¿Seis y media?! –Me levanté rápidamente, tomé una toalla y encerré en el baño–.

Me duché unos diez minutos y me amarré la toalla por la cintura, iba a salir pero recordé a NamJoon, rogué porque se haya ido abajo a comer, abrí la puerta y asomé la cabeza, no había nadie; ya había terminado de cambiarme así que agarré mi celular y eran seis y cuarenta y siete, salí rápidamente de mi cuarto y casi choco con alguien.

– ¿Hyung?

– Disculpa SeokJin... Me dio hambre... ¿Crees que puedo bajar para comer con ustedes?

– ¡Claro!

Me alegro mucho que SeokJoong empezara a salir más de su habitación, aunque sea a decir que tenía hambre y finalmente quería comer con nosotros.

Ambos bajamos y fuimos al comedor y ahí estaban mis padres y NamJoon comiendo.

– SeokJoong, ahorita te subo la comida. –Mi mamá se levantó de la silla–.

– En realidad... Quería comer con ustedes...

Pude notar la alegría de mis padres en ese momento y NamJoon que solo miraba sin entender, mi hermano y yo nos sentamos, me daba risa su carita de confusión.

– Te lo explico de camino al insti. –Le susurré al oído y él asintió–.

Comimos tranquilamente hasta que acabamos la comida, NamJoon y yo nos levantamos de la mesa.

– Yo los llevo chicos. –Mi padre se levantó también–.

– No es necesario appa.

Antes de que siguiera insistiendo fui a mi cuarto por mi mochila, luego bajé rápidamente, tomé la mano de NamJoon, abrí la puerta de la casa y grité.

– ¡Chau, ya me voy!

Salí de la casa con Nam y cerré la puerta.

– Ese era SeokJoong ¿No?

– Si.

Empezamos a caminar hacia el instituto, pasaron unos minutos hasta que alguien se puso a mi lado, volteé a ver quien era y era JiSoo.