Eternally Heartbroken | vkook

·Capítulo 5·

Narra Taehyung
Después de comer me sentía tan mal que llamé al trabajo y dije que no volveré. De hecho, ni siquiera acabé la comida. Pagamos y salimos. Me subí al coche mientras Jimin se alejó un poco diciendo que tenía que hacer una llamada. No estaba en condiciones de conducir, así que Jimin se puso al volante.
-Antes de llevarte a casa tengo que pasar a un sitio-me dice Jimin.
No contesté. Tenía la mirada perdida pensando en todo lo que había pasado. ¿Cómo podía ser tan feliz mientras yo sufría?¿De verdad no le afectó nada la ruptura? ¿Alguna vez le importé de verdad? ¿Viví un año de mi vida en una mentira? La respiración se me entrecortada, el corazón iba a mil y los ojos se me estaban llenando de lágrimas.
-Tae...
¿ Cómo pude haberle creído? ¿Cómo ha podido él olvidar todo tan rápido? En el fondo quiero perdonarle, quiero volver con él, volver a besarle, a dormir abrazados... Nunca volveré a amar a nadie que no sea él... En ese momento siento una punzada de dolor en el pecho. Nunca nada volverá a ser como antes. Él no me quiere... Ya hay una persona a su lado, y no soy yo...
-Tae.
¿Por qué después de tanto tiempo sin verle aparece otra vez? ¿Por qué? Tengo tantas preguntas a las que no tengo respuesta...¿¡POR QUÉ!? Escondo la cara en las manos y me tiro del pelo.
-Tae, para. Vas a hacerte daño-dice Jimin.
No me importa. Nada me importa. Nada podrá hacerme más daño que sus palabras. Quiero llorar, gritar... Empiezo a llorar más fuerte. Jimin de repente para el coche. Ha aparcado. Me quita las manos de la cara y me coge la cara con las dos manos haciendo que le mire. Me limpia las lágrimas.
-Tranquilo. Todo va a estar bien,¿vale? Tienes que ser fuerte, principalmente por ti. No puedes dejar que el pasado esté atormentándote toda la vida. Yo estaré contigo, no dejaré que te pase nada malo-me dice.
Me suelta la cara y me abraza. Siento una calidez que hace que me calme, que me olvidé de todo por un momento.
-He llamado a tus padres, están de viaje, llegarán en una semana. Me han dicho que vaya a por tus pastillas por si acaso.
No quiero volver a tomar las pastillas, hacen que prácticamente olvide quién soy y no piense en nada. Pero aún así, es la única forma de no pensar en él a cada rato.
Jimin abre la puerta y se baja del coche. En ese momento vuelvo a estallar en llanto. No sé qué mierda pasa conmigo, solo tengo ganas de llorar. En ese momento, saco el móvil y me pongo a ver fotos mías con él. Me es imposible borrar todos esos recuerdos. ¿Y el por qué de ponerme a ver sus fotos? No tengo ni idea.
Echo la cabeza atrás y simplemente dejo que las lágrimas caigan. Paso unos minutos así hasta que llega Jimin.
-Ya estoy aquí-dice sentándose.-He pensado en qué podemos hacer esta tarde, ya que el psicólogo recomendó que hagas cosas que te distraigan para no pensar en lo mismo todo el tiempo. Tarararara-dice golpeando el volante como si fuese un tambor-¡Tarde de películas y muchas, MUCHAS golosinas!
Me doy cuenta de que ha comprado dos bolsas llenas de diferentes bolsas de chuches. Esbozó una sonrisa sincera y me seco las lágrimas. No sé cómo podría pasar por todo esto sin su ayuda.
Llegamos a mi piso, nos bajamos y subimos las escaleras. Pasamos y Jimin va directo a la cocina a colocar cada bolsa en un bol. Yo me siento en el sofá. Al cabo de unos minutos llega con dos latas de cola y muchos bols, los deja en la mesa y vuelve a por otros. Mientras, me levanto para coger dos mantas del armario, y bajar las persianas. Cuando vuelve todo está listo.
-¿Qué película vamos a ver?-le pregunto.
-Toy Story 4-dice sonriendo.- He pensado en una película infantil, ya que son más divertidas. Aparte, tengo muchas ganas de ver esta película.
-Jumm... Me agrada la idea, sí.
-Además, mañana es domingo y no tienes que ir a trabajar. Esta noche me quedaré contigo para hacerte compañía-dice.
Yo le sonrío y no añado nada más, aunque estoy profundamente agradecido. Empezamos a ver la película y al acabarla ya eran las 8 de la tarde.
-Oye,¿te apetece jugar videojuegos?-pregunto de repente.
Se le iluminan los ojos.
-¡Siiiii!-dice contento, como un niño pequeño.
El resto de la tarde la pasamos jugando. Tengo que admitir que en toda la tarde no volví a pensar en Jungkook. A las 11, cenamos y nos preparamos para ir a dormir.
-Tae,¿te has tomado las pastillas?-pregunta Jimin.
-¿Eh? Ah, si-miento.
No quiero tomarme nada, quiero superar esto por mí mismo, no con unas pastillas que hacen que olvide todo.
Nos vamos a dormir los dos juntos, ya que somos mejores amigos y ya hemos hecho esto, además dormir con alguien hace que esté más tranquilo. Nos dormimos en seguida.