El verdadero peligro / True Blood

Capitulo 18

Una vez superados sus recelos iniciales, Sookie pareció olvidarse de sus remilgos y empezó a chupar y a lamer cómo si le fuera la vida en ello. Su boca se deslizaba arriba y abajo reprimiendo las náuseas, trabajando sobre el miembro y tragando todo lo que podía, que, no era mucho, la verdad, dadas las dimensiones de Eric...

Pero, pese a su torpeza de principiante, el Vampiro se lo estaba pasando en grande. Le encantaba ver los labios sensuales de la joven formando una "O" y haciendo un círculo perfecto alrededor de su pene mientras lo miraba con sus inocentes ojos pardos. Había soñado infinidad de veces con esa escena.

- Buena chica- le dijo- Ahora, vuelve a la punta y lubrícala bien. Así, así. Muy bien Sookie. Aprendes muy rápido.

Al cabo de un rato le dio un ligero tirón de pelo y le echó la cabeza hacia atrás. Sookie tenía los ojos llenos de lágrimas, aunque estaba sufriendo más por la falta de aire, que por otra cosa. Sin embargo, no le quedaría más remedio que acostumbrarse, ya que a Eric le encantaba el sexo oral.

- Ahora, quiero que deslices tu lengua por todo el tronco del pene, muy, muy despacio, y después, quiero que me chupes los testículos y que te los metas en la boca.

Ésta vez, Sookie no se lo pensó. No le habría servido de nada negarse, y los gemidos de placer que salían de la garganta del Vikingo, empezaban a gustarle. Si él estaba disfrutando tanto, aquello no podía ser tan malo ¿no?

Así que hizo exactamente lo que le había ordenado, y se dedicó a recorrer la longitud con la lengua, chupando y lamiendo muy lentamente todo el miembro, y escuchando una gran variedad de sonidos guturales que surgían de él, y que le dieron una oscura sensación de poder.

Después, le lamió las bolas con mucho cuidado. Eric tenía un vello púbico muy fino y muy rubio, así que aquella zona estaba muy limpia y apenas tenía pelo. Además, Eric olía muy bien y eso a Sookie le encantaba. Empezó a disfrutar de su sabor y se esmeró en chupar más a fondo aquella parte tan delicada de su anatomía. Cuando por fin introdujo los testículos en la boca, Eric gritó y volvió a tirarle del pelo.

- Vuelve a meterte la polla en la boca, ¡rápido!¡rápido!- le dijo él de repente.

Ella se apresuró a obedecerle, al notar la urgencia de su petición. Abrió la boca y el pene de Eric volvió a entrar en su garganta, ésta vez con mayor facilidad y más a fondo, ya que estaba completamente lubricado con su saliva.

- ¡Oooohhhh!- dijo Eric moviendo las caderas convulsivamente mientras se derramaba en la boca de la chica. Seguía con las manos enredadas en su pelo, así que a Sookie no le quedó más remedio que tragárselo todo para no ahogarse. Su paladar se llenó con el sabor salado del esperma, y ésta nueva experiencia, al final no le resultó tan repugnante cómo había pensado.

Cuando Eric terminó, se derrumbó en el sofá con los ojos cerrados cómo si hubiera recibido la verdadera muerte. Al cabo de unos instantes, resopló, abrió los ojos y sonrió a Sookie, que seguía arrodillada entre sus piernas mirándole un poco asustada.

- ¿Estás bien?- le preguntó ella. Su cara y su barbilla estaban limpias. No había dejado escapar ni una sola gota de semen.

- Claro cariño- respondió él alegremente guiñándole un ojo. Parecía un niño que se hubiera comido una tarta de chocolate entera- Has estado magnífica, y sólo era la primera vez- Se inclinó sobre ella, la ayudó a levantarse y después la sentó en sus rodillas. Sookie estaba un poco avergonzada de su conducta, así que escondió la cara en el hueco del cuello de Eric. Él sonrió y le acarició la espalda suavemente, disfrutando de su cándida timidez- Has sido muy, muy buena, y eso me gusta.

Gotas de sudor resbalaban por la frente de Sookie dejando rastros brillantes en sus sienes. Eric elevó su rostro hacia el suyo tomándola de la barbilla, sacó la lengua y le lamió la piel. Estaba muy satisfecho, aunque no entendía cómo pudo ser tan idiota durante la amnesia cómo para no intentar practicar el sexo oral con la encantadora señorita Stackhouse.

Con un poco de entrenamiento, ella sería una fiera.

Acarició los largos mechones rubios de Sookie y le apartó la melena hacia atrás para despejar sus hermosas facciones. Después le hizo la pregunta que rondaba por su mente desde hacía tiempo.

- ¿Tengo que suponer que Compton tampoco te lo hizo a tí?

-¡Oh no!- dijo Sookie- Yo nunca se lo permití.

Eric le dedicó una dulce sonrisa llena de colmillos. Volvía a estar excitado.

- Bueno, yo no te pediré permiso. Te voy a comer ese delicioso coño tuyo hasta que me canse, y después te haré otras cosas que ni siquiera te imaginas. Y no me detendré por mucho que me supliques que pare.

dato de la autora

¿Qué sabemos de Eric? Sabemos que es, un guerrero vikingo, así que, por narices tiene que tener una personalidad dominante, no sólo en el campo de batalla, sino también con sus subordinados, con su familia, y desde luego, con su pareja. También es un vampiro muy viejo. Lleva 1000 años (que se dice pronto) sin sentir nada por nadie, excepto por Godric y Pam. Cazando, matando y follando. Él puede amar a Sookie, pero la violencia y la sed de sangre siguen estando ahí. Por narices su relación y el sexo ha de ser violento.

Yo disfruto cómo cualquiera con una buena historia romántica, pero me parece imposible que un viejo vampiro de 1000 años se convierta, de la noche a la mañana en un Príncipe Azul. No sé si me entendeis.

Además, fijaros en cómo lo ha tratado Sookie en ésta temporada. (Momento-Albornoz) Él todavía está enojado con ella, aunque la quiera. Y además, en su mundo, Sookie debe de ser protegida, y la única forma es consiguiendo que lo obedezca. Por eso la trata así.

Dicho eso, debo deciros que en el próximo capítulo, no le va a hacer daño exactamente, ni va a violarla, pero sí se va a pasar bastante y va a llevar las cosas bastante lejos. Así que, los espíritus sensibles están avisados por si no quieren leerlo. Repito, no se trata de humillar ni de degradar, pero yo es que pienso que si los vampiros existieran serían así. Edward Cullen ha hecho mucho daño a la psique colectiva...Desde luego Eric, siendo vikingo y milenario, no sería una hermanita de la caridad precisamente.

Otra cosa. Ya veis que las escenas de sexo son muy explícitas. No se trata de erotismo, sino de pornografía. ¿Os gusta eso, o preferís que no escriba las cosas con tanto detalle? A mí me es indiferente. Lo describo así para que nos sea más fácil imaginar la escena, pero si os resulta desagradable, puedo dejarlo y a otra cosa.