Peter Lanzani- Nada Martina, qué va a Me cae mal y listo, lo que pasa es que vos no te acordas quién te hizo sufrir tanto y quién estuvo para vos cuando sufrías. No pensas en esas cosas. Te vas con el y te va a volver a hacer lo mismo.
Tini Stoessel- Uh, mejor ni te hablo, sí ni me apoyas, está bien que hayas estado pero yo te necesito, todo el tiempo te necesito, vos te fuiste y el tiempo no se paro ahí, pasaron cosas.
Peter Lanzani- Me necesitas? No se nota.
Tini Stoessel- No te hagas el dificil, te lo dije muchísimas veces pero parece que ni te importa.
Peter Lanzani- Como que no me importa? Te pienso todo el día, las 24 horas, pero nunca te vas a fijar en mi, estoy siempre para vos, esperando que un día pienses en mi, pero no, lo unico que podes hacer es pensar en vos y sí no estoy te enojas, estoy siempre Martina, s i e m p r e, y para que veas que es verdad, pensas tanto en vos que ni te das cuenta de lo que me pasa.
Tini Stoessel- Y que te pasa?
Peter Lanzani- Te amo Martina, te amo.
Martina se desconectó, Peter nunca se había sentido mal, le había dicho que la amaba, ¿y que hacía ella? Ignorarlo.
A los 15 minutos, tocaron timbre, era ella, el ni la queria mirar, pero era tan fuerte el amor que le tenía que no podía pedirle que se vaya.
Ella se quedó mirandolo, justo en ese momento, se dio cuenta de lo perfecto que era y que no quería perderlo.
Peter: ¿Qué haces acá?
Martina: Me dijiste que me amabas, ¿qué iba a hacer? ¿quedarme en mi casa sin resolver nada?
Peter: Y sí, ya sé que no sentis lo mismo que yo, y no hace falta que me lo digas. Perdón si esto te hace sentir culpable o incomoda, yo tampoco quería decirlo.
Martina: ¿Quién dijo que no siento lo mismo? Eso crees vos, la verdad que la única que se tiene que sentir culpable acá soy yo, no me di cuenta de que tenía al hombre más perfecto a mi lado, y me fui con una basura de persona. Perdón por no haberme dado cuenta antes, y espero que me puedas perdonar.
Ah, y, si pensabas que por el beso del otro día no senti nada, quiero decirte que ese beso me dio vuelta el mundo.
Peter: ¿Te vas a ir?
Martina: Sí, no puedo hacer nada más que irme y encerrarme a llorar por todo esto, es mucho. Me voy a sentir mal por el resto de mi vida, no puedo ser tan estúpida y tan lenta para darme cuenta de las cosas. Vos pensalo y espero que quieras seguir hablandome.
Peter la besó.
-No puedo dejar que te vayas.
-Después de ese beso no quiero irme.
-Espero que hayan muchos más.
-Van a haber muchos más si me dejas ser parte de tu vida.
