Crazy in Love [Terminada]

Capitulo 16

Juliana no quiso tomar ni bus ni taxi, salió caminando desde la casa de la ojiazul, caminar le servía para aclarar todo en su cabeza, en específico lo que había pasado hace minutos atrás en casa de Valentina, solo quería verla, solo ver esos hermosos ojos y saber como se encontraba, pero nunca imagino lo que iba a pasar. De solo recordar su corazón comenzó a latir muy rápido.

Se tocó el labio y recordó los suaves que eran los de la ojiazul, un beso tímido y suave, encajaban perfecto con los suyos, recordó como la castaña movía sus labios lentamente sobre los de ella. Nunca pensó que eso pasaría y menos que la castaña lo iniciaría.

Hubo un momento que se sintió mal en dejar así a la castaña, irse sin hablar ¿Porque la había besado? ¿Qué sentía por ella? Pero al final siguió con su camino.

Llegó por fin a su casa, entró y se lanzó al sillón soltando un gran suspiro.

—¿Donde estabas? —preguntó Mateo de repente, la morena se asusto y vio que salía de la cocina.

—¿Dónde crees?

—Sabes muy bien que aún no te recuperas del todo —le reclamo.

—Lo sé, pero ya estaba aburrida de estar encerrada en estas cuatro paredes, además tenía ganas de ver a Val —dijo rosandose los labios y sonreír.

—Esta bien que salgas, pero avisa cuando lo hagas —dijo —Cuando llegue y no te vi, me asuste mucho —la miró preocupado.

—Lo siento, la próxima vez te avisaré —le prometió.

—Bueno, volveré al trabajo —dijo, camino hacia la salida —Nos vemos.

Cuando su hermano se fue y cerró la puerta, la morena se levantó y se fue directo a darse una ducha, sudaba, camino mucho desde la casa de la castaña y el sol pegaba fuerte.

*      *      *

La castaña estaba sentada frente a la alberca, se sentía abrumada y con tristeza, pensó que había arruinado todo al besar a Juliana, sentía que debia ir a buscarla y pedirle disculpa por lo que hizo, pero otra parte suya le decía que no y le recordó que la morena le había respondido el beso de la misma manera, si no sentía nada se habría apartado de ella y le hubiera reclamado, ¿no? O tal vez le respondió por responder, ¿Pero por que solo se fue y no le dijo nada?, tenía demaciados enredos en su cabeza, de alguna manera tenía que hablar con ella y arreglar las cosas, no podía perder su amistad.

Metida en sus pensamientos no se dio cuenta que su hermana había entrado, se acercó y le toco el hombro suavemente, la castaña la miró y le mostró una sonrisa, esta se sentó al lado de su hermana.

—Pensé que la alberca era para bañarse, ¿o te gusta contemplarla?

—No sólo vengo aquí a bañarme, también me gusta venir a pensar —respondió.

—¿En qué piensas? O ¿en quién? —preguntó con una sonrisa pícara.

—Hoy vino, Juls.

—Que bien. ¿Y como está?

—Se veía mejor —respondió con tono triste.

—Por tu cara no fue una visita muy bu...—la castaña le interrumpió.

—La bese —lo soltó.

—¿Que? —sorprendida.

—Eso, la bese y ella me correspondió —repitió.

—Pero eso es genial, ella debe sentir lo mismo por ti —pero al ver la cara triste de su hermana decía otra cosa —O tal vez no.

—Creo que cometí un error al hacerlo, luego de eso ella se fue sin decirme nada —agachó la mirada.