Capitulo 4. Pienso en ti

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Abrió la entrada, dejó sus cosas en su habitación y comenzó a preparar la cena mientras Draion hacía uso de su encanto felino para pedir la suya.
-Es un verdadero idiota, no entiendo a los hombres, siempre se la dan de rudos y fuertes y no les importa los demás- dijo en voz alta algo molesta.
El pequeño maulló hacia ella y esta se agachó junto a él acariciandole tras las orejas.
-No se siquiera por qué me molesto con él, no le culpo pero no tuvo que haberme hablado de esa forma- el felino comenzó a ronronear mientras levantaba su peso en dos patas y con una de las delanteras rozó el rostro de su dueña -Si tienes razón, debí abofetarlo en cuanto tuve la oportunidad... no, no hubiera resuelto nada pero es que se sentía tan cálido el toque de sus manos y su rostro tan cerca que..- otro maullido del animal hizo que volviera a poner los pies sobre la tierra- Si, claro para ti es fácil decirlo, tú no tienes problemas en esta vida más que dormir y comer.
Tomó un tazón con el nombre de su mascota en él llenándolo de comida y se lo ofreció.
-¿Tú nunca me harías algo así, verdad?
-Probablemente no- respondió.
La chica dió un enorme salto hacia atrás haciendo volar por los aires la sartén que chocó contra la hermosa araña de cristal en el centro de la cocina.
-Pu..puedes hablar- gritó alterada.
-Tranquila, no tiene que enterarse todo el recinto.
-Pero..¿cómo?
-Más bien tú puedes entenderme, yo solo soy un gato.
-Genial, primero desarrollo un interés súper raro por alguien que no conozco y ahora hablo con un gato.. sabia que tarde o temprano me volvería loca..¡Lo sabia!
-No te estas volviendo loca Karol, es solo un efecto.
-Si, de la locura, de que más sinó.
-Si me dejaras explicarte.
No le permitió continuar nada más, corrió hacia su habitación y se encerró allí aferrándose a la pared opuesta a la puerta.
-Ya sé, todo esto es un sueño, o una alucinación, si debe de ser eso, solo necesito relajarme y calmar mi mente.
Entró al baño con intención de aclarar su mente y lograr que quizás así lograr escuchar un maullido en vez de una conversación. Terminó su ducha, se vistió como estaba acostumbrada, como vivía sola no tenía necesidad de ponerle demasiada ropa así que solo conservaba una blusa de tirantes fina y unos shorts cortos de tela suave. Se dispuso a copiar en su portátil la tarea pero era algo difícil concentrarse en escribir si cada diez minutos tu estómago estaba indicándote que no le gustaban las huelgas de hambre. Concluyó el trabajo y apagó el portátil, salió callada de la habitación tratando de hacer el menos ruido posible, revisó la escalera, nada, luego la cocina y pudo ver como el animal comía tranquilamente en su plato.
-Muy bien, venga di algo- dijo hacia él, este la miró pero solo se escuchó su natural "meow", algo que hizo que se calmara enormemente- Dios, en serio me estoy volviendo loca.
Tomó su comida (o lo que quedaba de ella), comió tranquilamente estando segura de lo gracioso que hubiese sonado decir que su mascota podía hablar y lo cómodo que sería una habitación en el manicomio. Regresó arriba, apagó las luces y dejó que la almohada le aconsejara sobre cómo dormir sin contraer un dolor muscular.

Lejos de allí unas horas antes:
Bajó de su moto, molesto, no solo por el regañó sinó consigo mismo. Abrió la puerta de su casa bien decorada con muebles de seda y una gran mesa de porcelana pulida, las luces encendían con sensores de movimiento y las puertas eran semi automáticas, casi como una fortaleza en lugar de una vivienda, guardó su vehículo en el garaje, comió algo sacado del refrigerio acompañado de una cerveza. Encendió la tele buscando algo que le interesara <<nada>> pensó. Ingirió rápidamente la comida y de un trago bebió la cerveza. En el patio un enorme Rottweiler le saludaba con alegría, se acercó a él con un trozo de carne indicándole sentarse, el perro le obedeció sin siquiera mover un músculo, acariciaba su cuello y cabeza mientras ponía la carne sobre el comedero.
-Buena chica, Pandora- dijo mientras le permitía comer.
Entró en su habitación, la decoración era como la de un chico normal, posters, sus revistas favoritas y su portátil. Se quedó mirando fijamente el anillo.
-¿Donde te he visto antes?- dijo recordando a esa muchacha de ojos morados.
Abrió el portátil y escribió un mensaje:
<<Tengo que hablar contigo, es urgente >>
Se recostó sobre la cama de sabanas azules y negras, recordó haber sentido una enorme atracción hacia la chica desde que cruzaron miradas, sonrió al pensar en esa piel suave y cálida que tocaba cuando ponía su bufanda y lo cerca que estuvo de ella cuando la arrinconó en el instituto.
-Maldición, Felix sácate esos labios de la cabeza, ella es peligrosa y lo sabes, tienes otras cosas en mente así que concéntrate.
Un mensaje parpadeó en una esquina de la pantalla, se levantó de inmediato dando a entender que las abdominales estaban en su lista de tareas diarias, lo leyó detenidamente y tecleó una respuesta:
<<Necesito que recopiles información sobre alguien, lo más rápido que puedas >>
Otro estornudo asomó de imprevisto, no estaba acostumbrado a ello así que le irritó. De nuevo el párpadeo en la pantalla:
<<¿Sobre quién?>>- decía el mensaje
<<Una chica, te mandaré su nombre y apellido >>-respondió
<<¿Si sabes que esto es ilegal cierto?>>
<<Ya lo sé idiota>>
<<¿Para que quieres datos sobre una mujer, te gusta?>>
<<Deja de hablar tonterías y haz lo que te pedí>>
<<Esta bien pero esto te costará un poco más>>
<<¿Por qué?>>
<<Porque o la quieres matar o te la quieres ligar y luego yo no cargaré con la conciencia de que te sientas triste por su culpa>>
<<Si sigues hablando voy a ir a donde estas y te arrancaré las manos>>
<<Entendido, capté el mensaje, sabrás de mi en unos días>>
Cerró el portátil, se duchó dejando que el agua recorriera por su perfecto cuerpo dejándole un aroma imposible de ignorar luego de utilizar esos caros geles de baño, cepilló sus dientes y tras apagar las luces se recostó y después de un rato dormía profundamente.
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Holaa, este capítulo no es tan extenso como los demás pero les he dejado saber un poco sobre nuestro "chico misterioso", no me he olvidado de prometer hablarles sobre los anillos y nó, al que se haga la pregunta de que si ella se volvió loca pues no, el
Gato si hablaba pero no les diré por que jjjj . Espero que les haya gustado y sigan leyendo los próximos capítulos.

Única opción..¿Eres tú?Where stories live. Discover now