Única opción..¿Eres tú?

Capitulo 6. En tu interior

El jaleo había pasado, llegó a casa bajo el manto de la noche, había salido con sus amigos a dar una vuelta, estaban fuera de una pizzería cuando la vió entrar en la biblioteca, se hacía la misma pregunta una y otra vez <<¿Quién Eres y por qué se que tengo que mantenerte lejos de mí?>> se repetía continuamente. Cuando la vió salir de la biblioteca con un libro en sus manos quedó intrigado.
¿Qué podría interesarle a una chica como ella de los viejos libros de ese lugar?- pensó él.
Había visitado esa biblioteca un centenar de veces mientras vivía allí, siempre en busca de algo...pero nunca había visto ese libro y la biblioteca recibía libros solo una vez por año y ya se había cerciorado de los que habían llegado. Necesitaba saber qué escondían esas páginas y lo iba a averiguar a como diera lugar. Se despidió de sus amigos y subió en su vehículo, comenzó a seguirla procurando mantener una distancia prudente para que ella no lo viera, cuando la vió entrar a su casa se preguntó cómo podría entrar a por el libro, no lo iba a robar claro estaba pero le urgía saber que decía. Aparcó cerca de un gran árbol por detrás de la vivienda sin hacer ruido, estaba por entrar por la ventana cuando vió a los hermanos llamar a la puerta <<fastidiosos >> pensó mientras se escondía sigiloso. Podría ser bastante llamativo pero tenía la agilidad y persuasión de un pícaro con años de entrenamiento. Se mantuvo allí hasta que se fueron, casi había logrado entrar cuando escuchó a la chica llorando, la escuchaba hablar consigo misma, no podía... hacerle eso... no ahora, <<tal vez, el libro pueda esperar hasta mañana>>, de repente sintió una fuerte punzada en el pecho, no sabía el porqué, venía acompañada de un sentimiento de dolor, depresión y tristeza pero no eran suyos, esos sentimientos no emanaban de él, se percató que eran los sentimientos de quien estaba al otro lado de la pared pero..¿por qué podia percibirlos con tanta claridad?- pensó mientras iba entendiendo ese extraño vínculo que ahora compartían, el metal en su mano chispeaba apacible pero no lo suficiente como para pasar desapercibido. Sus pensamientos lo alejaron de allí, aquella chica lo había logrado persuadir sin tan siquiera imaginarlo y él sabía que ella sería una bomba detonante pero..¿para qué, que detonaría en su vida?
Comió algo, alimentó a Pandora y después de un baño revisó el portátil por si ya habían respondido su mensaje, nada aún, tenía la mirada con algunos vástagos de naturaleza ajena a sí mismo pero ahora solo se sentía un pequeño hormigueo en sus dedos.
-Está más calmada, eso es bueno- cerró los ojos y sintió su ritmo cardiaco, el de su cuerpo era constante y tranquilo pero este otro era irregular y acelerado, poco a poco notó cómo disminuía hasta quedar completamente calmado- imagino...que ahora estarás dormida.
Estaba hablando en voz alta sin darse cuenta, ahora sentía paz en su mente, tenía que concentrarse en averiguar qué pasaba con ellos dos, al día siguiente comenzaría un juego de dos que nunca se les ocurriría que existiera.