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Capítulo 46

-no creo Cami, me tengo que ir- 

-alcance a escuchar que no tenías un lugar donde quedarte, mi papá está rentando unos departamentos cerca de mi casa, tal vez puedas quedarte unos días ahí- 

-no Camila yo solo traigo problemas y tus papás pueden ir con los míos a decirles donde estoy, yo solo quiero dejar de dar problemas a mi familia-

-vamos Ash, no quiero que nada te pase, acepta el lugar que dice Camila al menos sabremos que estas segura- dijo Joy abrazando a Ash de la cintura pues Ashley era más alta

-está bien pero no le digan a nadie por favor- las tres se abrazaron –Emm hay un problema, no tengo ropa-

-le diré a Jesse que vaya a comprar ropa interior y nosotras podemos ir a la plaza a buscarte ropa- dijo Joy 

-está bien iré con ustedes pero que sea en la tarde, mis padres todavía deben estar buscándome-

-no te preocupes será mejor que nosotras vayamos, no son malos consejos solo que no me parece justo lo que quiere hacer tu mamá- dijo Joy

-bueno me iré, ustedes deben estar en el salón- 

-de hecho, no tenemos clases, Ulises crees que podamos ir por nuestra mochila y retirarnos-

-si señorita- Ulises era el jefe de seguridad de la escuela – aunque pensándolo bien necesitaran un permiso de su coordinadora para poder salir-

-mmmm podrías llamar tu a coordinación y pedirlo- dijo Camila 

-está bien pero que sea la última vez señoritas y Ashley alcance a escuchar lo que sucedía, por lo menos piénselo dos veces antes de alejarse de su familia- dijo Ulises como concejo a Ash

-si Ulises lo pensaré, gracias-

Después de unos minutos las chicas junto con Jesse se fueron en Uber a la plaza a comprar la ropa para Ash y después al departamento, Camila ya había hablado con su papá Alejandro.

Mientras tanto en la mansión de los Pérez Mosa…

-ves lo que provocas Mathilda con tus arranques, tu hija ni siquiera pudo tener un desayuno y lo único que se llevo fue que su madre la lastimara en todos los sentidos, como puede ser posible que una madre no quiera por igual a sus hijos y peor aún, que prefiera su trabajo antes que su familia.

Los chicos salían muy felices de la plaza comercial, pero Ashley iba sumergida en sus pensamientos y recordando que su madre la había tratado de lo peor…

-Ashley cuidado- fue lo último que se escuchó en el estacionamiento de la plaza