🐺 Alfa 🐺 Namkook - Kooknam [Bts]

48.

Siempre había confiado en sus instintos y aquella vez no fue diferente, ese día se suponía debía hacer doble turno, pues uno de sus compañeros de trabajo no había podido asistir pero no se quedó. No pudo, no porque había un sentimiento amargo que lo perseguía desde horas atrás, salió apresurado hacia donde trabajaba Yoongi y se desesperó al no encontrarlo. Nadie pudo dar razón de él causando que se desesperará más y maldijera a cualquiera que se atravesará en su camino ¿Dónde estaba? ¿Por qué no había vuelto después de llevar la basura? Eso había sido lo único que había logrado sacar de información.

Rápidamente se dirigió al callejón donde solía ir el mayor para botar la basura y lo buscó, ahí estaba, justo al lado del contenedor lleno de golpes y prácticamente irreconocible. No fue capaz de hablar o llamarlo, solo pudo llorar mientras se dirigía a él y caía de rodillas a su lado ¿Por qué le harían algo tan horrible? ¿Quién era tan desalmado para hacerle eso a un adolescente? Ese día no estaba precisamente claro en su memoria pero recordaba el sabor de su sangre y como había clavado sus colmillos en el hombro de Yoongi ¿Qué lo llevó a hacer algo así? ¿Qué pensaba justamente en ese momento? No podía responder, no porque no quisiera, sino porque simplemente no podría dar una respuesta.

Jimin recordaba esa época como algo lejano y borroso, ese día estaba en su memoria como una marca permanente pero a la vez sin sentido, miró de reojo a Yoongi que no dejaba de ver a Jungkook con preocupación. Sonrió con nostalgia, el alfa había estado exactamente igual cuando él llegó cargando a un inconsciente Yoongi a su pobre casa, eran iguales en ese sentido. Habían llegado a una especie de refugio ubicado en la parte baja de la montaña del este, Jin dejó al alfa inconsciente en el suelo con cuidado y salió del lugar para vigilar, era claro que esperaba con ansias la llegada de sus hermanos menores. No mostraba signos de preocupación alguna por sus padres, solo esperaba que sus hermanos estuvieran bien.

—Jimin, ayúdame— pidió Yoongi.

El omega rápidamente se dirigió junto al delta llevando la mochila de Jungkook consigo, debían vestirlo aprovechando el momento de calma, fue sencillo entre los dos pero Jimin no podía concentrarse realmente. Tenía un mal presentimiento. Sentían como el olor del sándalo se acrecentaba, no marcaba territorio ni les advertía de peligro, solo buscaba dar a conocer su ubicación para que fuera fácil de hallar. Jin se encontraba en la entrada del refugio con la vista perdida en el horizonte y los brazos cruzados, mordía constantemente su labio inferior y suspiraba con desespero, sintió dos olores que le resultaron familiares acercándose. Eran Jaebum y Jinyoung, quienes al percatarse de quien era se asustaron.

—No... No-nosotros no...— el omega comenzó a tartamudear.

—¿Vieron a Namjoon?— preguntó rápido e ignorando su situación.

—Nosotros... Salimos apenas llegaron los vampiros y...— Jaebum comenzó a excusarse.

—¿¡Vieron a alguno de mis hermanos, o no!?— perdió la paciencia.

La pareja se encogió ante su tono molesto y negó de inmediato, Jin maldijo e ignoró sus acciones mientras se concentraba en ver nuevamente el camino hacia el pueblo, Jaebum y Jinyoung se marcharon en silencio sin atreverse a preguntar por lo que sucedía. Jimin fue abrazado por Yoongi, ambos manteniéndose junto a Jungkook pero prestando atención al exterior, obviamente también estaban preocupados por los otros lobos que en algún momento se habían ganado su afecto. Los minutos pasaban, lentos y eternos, los aullidos a la lejanía y el olor a sangre siendo traído por el viento aumentaban sus ganas por volver pero cada vez que el mero pensamiento surgía, un horrible dolor lo recorría.

"Mantenlos a salvo y no vuelvas, sin importar qué, no permitas que nadie vuelva".

¿Por qué Namjoon tenía que darle esa orden? Gruñó, su preocupación aumentaba y al ver aparecer a Hoseok (en su forna de lobo) cargando a su hermano menor inconsciente, casi entró en pánico. Se apresuró en ayudar a bajarlo con cuidado y darle una revisión rápida, el beta volvió a su forma humana y se acercó a él con una expresión culpable, pues no había podido hacer nada. Jin estuvo por preguntar por su hermano faltante pero no lo creyó necesario, solo bastaba ver que no estaba ahí para saber que no volvería pronto, una sonrisa sin gracia apareció ¿Qué estupidez estaría haciendo?

—Ven, adentro hay algo de ropa— mencionó.

—Está bien— accedió sin poder hacer más.

Por supuesto, Yoongi y Jimin querían preguntar por muchas cosas al verlos pero el silencio fue su mejor opción, no valía la pena comenzar un interrogatorio sabiendo que no obtendrían las respuestas que tanto deseaban. Jin rebuscó entre las provisiones del refugio encontrando algo de ropa, no eran más que camisetas simples y shorts de tela pero eso fue suficiente, vistió a Taehyung mientras Hoseok se vestía mirando sus movimientos de reojo. La incertidumbre los mantenía en alerta y ansiosos, cualquier sonido proveniente del exterior los hacía ponerse en guardia o sobresaltarse, hace algunos minutos todo se había quedado en silencio indicando que todo había acabado.

—¡AH!

Ese grito, ese dolor imposible de confundir, su olor transmitiendo lo que él mismo había sentido. Su corazón siendo arrancado y destrozado. Jungkook se retorcía en el suelo aún inconsciente, su expresión demostraba el sufrimiento que atravesaba mientras una de sus manos estrujaba la tela que cubría su pecho, la marca en su brazo comenzó a perder los hermosos colores quedando traslúcida y sin brillo. Eso... Todos sabían lo que eso significaba. Jimin comenzó a llorar en silencio mientras Yoongi lo abrazaba reconfortandolo y evitando a toda costa que sus lágrimas lo delataran, aunque no funcionó por completo.

—¿Qué...?— Taehyung había despertado —¿Qué sucede? ¿Hoseok?— miró a su pareja.

El beta lloraba desconsolado arrodillado a su lado y no se atrevía a mirarlo, frunció el ceño aún sin entender lo que sucedía mientras veía alrededor, Jin estaba arrodillado en la entrada del refugio mientras les daba la espalda. Temblaba llorando y culpandose, el dolor (de intentar volver y desobedecer la última orden de su hermano) lo había hecho caer pero eso no se comparaba a lo que sentía, lo que se sentía perder a un ser querido y tan importante como lo era Namjoon. Taehyung miró al otro omega y al delta llorando a unos pasos de ellos, su vista viajó a Jungkook que se había calmado pero las lágrimas secas en sus ojos y la marca... Miró a su pareja horrorizado.

—¿Dónde está Nam?— su voz baja y desesperada —Hoseok— llamó, negándose a aceptarlo —¡Respóndeme!— ya estaba llorando.

—Tae...— lo miró, su rostro destrozado por la tristeza.

—No... No...— se levantó, tambaleante —Díganme que no es cierto— rogó, mirándolos a todos.

No obtuvo la respuesta que con desesperación deseaba, gritó lleno de dolor y pena, salió del refugio corriendo y dispuesto a volver al pueblo para buscar a su hermano pero no pudo llegar lejos. Jin lo detuvo sin importar que él deseará lo mismo, lo abrazo con fuerza y permitió que se desahogará en su pecho, Hoseok los veía desde la entrada junto a Yoongi y Jimin. Ellos estaban sufriendo pero ¿Qué haría Jungkook al despertar?