Heme aquí, sigo solo, sentado junto a la droga que me sigue manteniendo vivo, pero al mismo tiempo, me está consumiendo. Si, estoy hablando de ella, "la soledad", aquella que desde pequeño me visitaba por las noches para que nos escapáramos juntos al techo de mi propio infierno, a ver las estrellas que iluminaban cada espacio de aquel paisaje oscuro y solitario, más me preguntaba, ¿por qué si iluminaba una oscuridad desconocida, por qué no querer alumbrar mis propias penumbras?, ¿por qué pasarme por desapercibido e ignorarme?...la respuesta estaba más iluminada que aquellos puntos que decoraban ese cielo, era porque yo era un vacío que no debería de existir...
Suena rudo, suena de golpe como cuando te enteras de una noticia que no hubieras deseado escuchar y, provoca en ti que te quedes en estado de "shock". En ese instante lo supe, y una vez que tomé un momento para hacerlo, mis manos se enfriaron, la sangre que corría por mis venas de un segundo a otro se paralizó, mi corazón se congeló haciendo que cada latido que me golpeaba levemente el pecho se detuviera, mis ojos perdieron su rumbo y después, todo se volvió negro...
Había caído en la cruda verdad, como si esto no hubiera estado echo para mi, más siempre supe que siempre fue así, nunca nada estaba echo para mi y aquí me encontraba, todavía paralizado porque ni siquiera mis más pequeños músculos querían proceder a seguir desarrollando su proceso...
Una vez que se reacomodaron en su sitio, me fui, me fui de aquel lugar en donde ni para mi propia alma había lugar, me fui para volver al infierno que me quemaba desde dentro, hacía afuera.
Ahora, aquí estoy, de frente hacia esa pared blanca, suave pero dura, pero tan solo mi mano quiere sentir que es lo que significa la frialdad en un objeto, en ese momento donde te pierdes y no sabes que hacer, y fue así, estaba aburrido, tente la pared que estaba frente a mi, pero sinceramente no sé el por que lo hice, tal vez quería despejarme, vaciar el dolor pero, ahora solo me despediré.
Así como pienso despedirme de "ella" y darle paso a "él"
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𝑃𝑎𝑟𝑡𝑒 𝑑𝑒 𝑜𝑡𝑟𝑎 𝑝𝑖𝑒𝑙
RandomMe veía al espejo, no era yo, era un intruso que se había colado en mi reflejo, haciéndome sentir inseguro y pequeño al lado de él, en donde más crecía, mi corazón se encogía, preguntándome si el que veía a través de ese espejo era yo o tan solo mi...
