Headcones BokuAkaKuroTsukki

70) Especial: Idols(?

La nueva agrupación de la empresa Haikyuu había llegado pisando fuerte en ventas y especulaciónes, su disco debut se acabó en la pre-venta y su primer MV recibió millones de vistas en los primeros días.

En otras palabras, fueron un verdadero éxito.

La agrupación se llamaba Double K, o DK abreviandolo, y hacia referencia a los nombres de sus miembros, Kei y Keiji, dos adolescentes de 17 y 18 años. Los chicos poseían una gran destreza vocal y física, y sus raps no decepcionaban en absoluto, además, y esto era innegable, ambos eran preciosos.

El único problema que tenían era su casi nulas capacidad de interacción, y es que a ninguno le interesaba demasiado interactuar con sus fans, apenas lo hacían entre ellos. Pero como idols que eran debían poder interesarse por las demás personas, así que su mánager decidió darles clases de carisma, pero no él, lo harían las personas más carismáticas de la farándula.

–¿Y ellos quienes son?

–Kei, Keiji, les presentó a sus nuevos mánagers, Kuro Tetsuro y Bokuto Kotaro, son antiguos idols que actualmente trabajan como actores y modelos, pero decidieron tomar un descanso de las cámaras y ayudarlos con sus capacidades para relacionarse.

Tsukishima alzó una ceja incrédulo, ambos hombres parecían haber salido de una portada de revista farándulera promedio, no podría negar que eran bastante atractivos, pero no parecían muy carismáticos que digamos. Akaashi en ningún momento despegó la vista de su celular.

–Bueno, dejaré que se conozcan, por favor llevense bien porque de ahora en más trabajarán juntos.

El rubio volvió a su lugar en el sofá al lado de su compañero, ignorando las palabras del mayor, el cual solo aguanto un suspiro y salió de ahí, deseándole suerte en voz baja a los mayores.

–Bueno chicos, creo que ya se cual es su problema– dijo de repente el de pelo gris sentándose en medio de los idols.

–Kotaro espacio personal– dijo al mismo tiempo el otro sentándose en su regazo–. Vas asustar a los niños.

Y tenían razón, en menos de unos segundos ambos adolescentes habían corrido hacia el otro sillón.

–A ustedes no les interesa la gente.

–¿Y cuál es el problema?

–Chicos ustedes son idols, tienen que conectar con sus fans, cuanto más cercanos a ellos se muestren más fácil será que consigan buena prensa.

El pelinegro menor alzó su vista por primera vez del celular para darle una mirada cansada al de pelo gris.

–Disculpe por esto Bokuto-san, pero poco me interesa la prensa, yo canto, rapeo y bailó, somos un dúo extraordinario, nadie puede ser bueno en todo, nosotros no somos buenos siendo simpáticos.

–Si les cuesta mostrarse cercanos a los fans intentenlo primero entre ustedes, porque da la impresión de que cuando bajan del escenario son dos desconocidos.

La risa de Tsukishima brotó desde el fondo de su garganta, Akaashi también aguanto una carcajada.

–Si esa es la impresión que damos lo estamos haciendo bien– dijo el rubio–. Nos pidieron que nos alejemos un poco para no levantar sospechas.

–¿Sospechas?

Ambos menores se miraron sonrientes y de un momento al otro Keiji ya estaba en el regazo de su compañero compartiendo un tierno beso con él.

–Kei y yo solo pareja– dijo entonces el menor con una sonrisa.

–Ja, yo también puedo hacer eso– dijo el pelinegro subiendo al regazo del otro mayor para compartir un beso tambien–. Pero le enseñaremos a usar su secreto como un arma.

...

–Kei-chan podrías sujetar mis manos– dijo emocionada la chica frente a él, el rubio solo le dio una sonrisa, pero antes de que sus manos la tocarán fueron secuestradas por las manos de Keiji.

–Las manos de Kei-tan son solo mías– dijo el pelinegro, causando una ola de gritos por parte de sus fans.

El hecho era que desde que habían descubierto el fanservice todo había sido más fácil, las fans no tardaron en tenerlos como otp suprema de la industria, y aunque si habían mejorado la calidad de sus relaciones con las fans la verdad tenían una relación más bien distante con ellas, para que el otro no se pusiera "celoso".

Gracias a esto su popularidad había aumentado y no dejaban de recibir nuevas ofertas de trabajo, además de que sus nuevos mánagers también eran geniales trabajando.

Por suerte todo iría bien.