Curiosidad | Lucas Martínez Quarta x Gonzalo Montiel

once

Capítulo XI: "Feliz"

17 de Agosto, 2019

Vuelvo a mi casa después de dos semanas en lo del Cache, en lo de mi Cache. Vuelvo a mi casa, la casa que comparto con Agustina y vuelvo decidido a decirle la verdad, toda la verdad.

Ella volvió ayer a nuestra casa y me pidió que después del partido vaya para allá. Bautista y Mía se quedaron en lo de mi hermano mientras yo estaba concentrado o tenía partido.

Las dos mejores semanas de mi año, ver a mis hijos jugar con el amor de mi vida me llena completamente. Esas sonrisas indiscretas, miradas en doble sentido. Volvieron y voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que se queden para siempre. Lo necesito, sin él no soy yo y sí él está mal yo también.

Ya llegué a la puerta de casa, con Bauti en una mano y Mía en la otra, con más miedos y temores que seguridad. Pero sí hay algo que aprendí de Gallardo es hacer que el miedo sea tu garantía, que tenés que dar un salto al vacío a veces.

Y eso voy a hacer.

Con Gonzalo no pasó nada en sí, sólo abrazos, ningún beso, NADA. Pero desde que Agustina quedó embarazada de Bautista aprendí a conformarme con las cosas más mínimas que él podía darme y que yo le podía sar porque nosotros sabíamos que no podíamos estar juntos, pero sabíamos, o al menos yo, que nos seguiamos amando como aquellos últimos meses del 2014.

Dejo que Bautista toque el timbre y después de esperar al menos dos minutos, Guchi nos abre la puerta. Me miró a mí primero y tenía los ojos apagados, sin brillo, pero miró a sus hijos y volvió a sonreír. Y eso me hizo sentir ligeramente bien, saber que con toda la mierda que le hice a Gonzalo y a ella; sí hice algo bien y fueron mis hijos.

Ella se va a la cocina con Bautista y Mía, seguro para mostrarles algo que les compró o algo así. Me adentro en mi casa y cierro la puerta con la llave que Agustina dejó en la cerradura.

Le prometí que aunque estemos mal no nos íbamos a separar demasiado que sí yo me iba a Italia, o a dónde sea, la iba a llevar conmigo, pero no puedo. A la persona que yo quiero llevar a todos lados es al Cache, a Gonzalo.

¿Saben qué es lo peor? Que no quiero que sufra nadie, pero creo que ya sufrieron suficientes personas y que no es bueno para Bautista y Mía crecer con padres que no se aman. "No hagas una locura, Lucas, por favor. Y sí la vas a hacer no te pases" Me dijo Montiel antes de que me fuera de la cancha de Racing y yo le respondí "Soy amigo del Pity, alguna locura tengo que hacer". Sé que lo que voy a hacer en mi vida va a tener la misma dimensión de intensidad, ansiedad, nervios y felicidad que aquel penal en Brasil.