Un juego de amor

Capítulo 7

Al principio iba despacio con la moto pero cuando llevabamos cinco minutos de camino, empezo a aclerar y no tube mas remedio que agarrarme a él ya que tenia la sensación de que me iba a caer. En cuanto le rodee con mis brazos pude escuchar como se reia.

- ¿Tienes algún problema con que me agarre a ti o no puedo?- le pregunte en modo sarcastico cuando nos paramos en un semáforo.

- No no, lo único que me hace gracia es que vayas de segura y en realidad no lo eres.- me dice.

- ¿Qué quieres que me caiga para átras y me mate?- le digo enfadada, en realidad sabía que el comentario lo había dicho para fastidiarme.

- Si estas más comoda así no hay ningún problema Brek.- en cuanto se pone el semáfoto en verde arranca todabia más rápido, parecía que quería que me agarrara mas fuerte a él. La verdad es que lo hice, ¿por que no lo iba a hacer? Me encanta tocar las abdominales de los chicos cuando tienen puestas las camiseta. No os vayais a pensar que soy una viciosilla. ¿A quién no le gusta tocar por esas siluetas de los chicos?

No sabía por donde me estaba llevando Lian, ya que cerre los ojos para disfrutar del momento. Cuando sentí que el motor paro, abrí los ojos de imediato y nos encontrabamos en el mirador de la cuidad. Nunca había estado en este sitio, me habían hablado muy bien de él pero nunca nos habíamos planteado ir mis amigas.

- Ya hemos llegado, bajate de la moto que le tengo que poner la patilla.- me dice.

- Vale- me bajo de la moto pero no me quito el casco. Aparca la moto y veo como tiene una sonrisa.

- Ya se que quieres que volvamos a repetir la escena de antes pero como bien me has pedido, no me puedo acercar a tí y en cuanto te quitara el casco no podría resistir la tentación de besarte. Por lo que quítatelo tú, aunque si no puedes te lo quitare yo.- me quede sorprendida con lo que me había dicho, que rápido habíamos cojido confianza para hablar de esas cosas.

- Vale no te preocupes puedo quitarmelo yo sola sin tu ayuda- y así lo hice. Le di el casco, lo cogio y sacó una bolsa de debajo del sillín. ¿Qué sería?

- Había pensado en traerme fresas con anta pero iba a ser demasiado para la primera cita.- me dice riéndose- por lo que me he traído unos sandwiches, patatas y unos refrescos.

- ¿De qué son los refrescos? Y ¿quién ha dicho que esto sea una cita?- le pregunto acercandome a él para abrir la bolsa.

- Pues una coca-cola normal y otra light. Eso ya lo veremos- me dice.

- Supongo que la light será para ti ¿no?- le digo riéndome, sabía perfectamente que la light era para mi, ya que casi todas las chicas la toman light porque no quieren engordar pero yo ya pasé mi etapa de caloría y ya había trabajado mucho para tomarme lo que quisiera.

- Si la light era para mi- dice convencido, aunque en realidad sabía que la había traído para mi.

- La habías traido para mi pero daigual, yo me quedo con la normal y tu con la light.- le digo riéndome y cojo la normal de la bolsa y la abro. Se ríe en cuanto le digo eso, sabía que me iba a quedar con la que yo quisiera.

- Supongo que lo que me guste a mi, no importa.- me dice con decepción.

- Yo soy la que mando y tú tienes que obedecerme.- le digo riéndome.

- No digas eso porque puedo hacer cosas para que cambies de opinión y mande yo en la situación- dice serio. Como subían las conversaciones de tono de un momento a otro. La verdad que la atracción sexual era evidente entre los dos. Tenía que cambiar el tema de la conversación ya que en este momento nos encontrabamos mirándonos fijamente y de un momento a otro nos podíamos comer a besos.- Bueno cuéntame más cosas sobre ti, que tú sabes mucho sobre de mi pero yo nada de ti.