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El resto del tiempo que me quedé con la abuela de Xiaojun, le hablé un poco más de mí, de mis aspiraciones, planes en el futuro, etc. Todo marchó perfecto y estoy feliz por ello. De pronto, el fin de semana se sentía tan inminente y al igual que el examen de admisión a la universidad. Me enfoqué en estudiar durante esos días y el viernes solo di un repaso rápido, me acosté temprano ya que el examen sería a las 9:00 am, sin embargo, debo estar ahí mas o menos con una hora de antelación.

La alarma suena a la hora programada, hago mi rutina diaria y cuando veo el reloj en mi muñeca; ya era hora de irme. Me doy un último vistazo en el espejo, ya que quiero estar presentable y salgo de mi habitación. Tanto como mis padres y mi hermano irán a apoyarme. Durante el camino mi papá puso unos de mis tantos discos favoritos para tranquilizarme y no estar nerviosa. Afortunadamente no me siento así, me siento bien y con un objetivo claro; entrar a esa universidad.  Llegando al lugar, mi madre, mi hermano y yo nos bajamos del coche mientras que mi papá fue a estacionarlo. Caminamos hasta donde empieza la fila y de poco a poco comenzamos a entrar, cuando llega mi turno para entrar, justamente mi papá viene. Está todo agitado y trata de recuperar el aliento. Me abraza y me dice:

— Tú puedes, cariño. Confiamos plenamente en ti, Hye — me da un beso en la frente y me deja ir.

Les sonrío a los tres, muevo los labios diciendo "los amo" y entro al lugar. Estando en el salón, sentada y esperando a que den el examen, la mayoría de las personas presentes están golpeando el piso con su zapato, juegan con el lápiz y goma que traen consigo, algunos platican entre ellos o simplemente están cruzados de brazos como yo. Observo mi reloj por tercera vez en lo que llevo aquí, y este marca 8:55 am. En ese momento los encargados de aplicar el examen dan un libro delgado y la hoja de respuestas, ahora sólo queda esperar unos minutos.

— Pueden comenzar — anuncia una de las encargadas.

Y aquí vamos.

[❅]

Ya había terminado mi examen, pero me estoy asegurando de haber rellenado bien las respuestas. Decidida, me levanto de mi lugar y entrego mi examen. Al salir del salón suelto un gran suspiro y veo mi reloj; 11:58. Justo a tiempo. Sigo con mi camino hasta donde vi a mis padres por última vez, los busco entre la gente y no los veo en ninguna parte. Paso mi mirada por todas partes hasta que me topo con unos ojos cálidos, los de Xiaojun.

Me acerco a él confundida y a la vez feliz de verlo aquí. Me recibe con una bonita sonrisa y un abrazo, gustosamente acepto.

— ¿Qué tal te fue? ¿Cómo te sientes? — pregunta mi oído y se me eriza la piel.

— Bien y bien —respondo con una sonrisa en los labios.

— Me da mucho gusto escuchar eso — me separo un poco de él para poder mirarlo.

— ¿Puedo preguntar el por qué estás aquí? ¿No se supone que tu examen es mañana?

— Sí, pero vine a dejarlos — señala con su pulgar hacia un lugar, y ahí están Renjun y Kunhang — Y a recogerte.

— ¿Recogerme? — asiente con la cabeza.

— Hace unos días fui a buscar a tu padre para pedirle permiso para que te dejara salir conmigo, y a que dejara que te recogiera hoy. Primero recibí un rotundo "no", sin embargo tu madre llegó en ese momento y aceptó — con razón ese día mi papá estaba tan serio.

— ¡Hey, chicos! — manifiesta Renjun llegando a nuestro lado junto con Kunhang.

— ¿Listos para su examen? — pregunto. Renjun encoge sus hombros y Kunhang suelta una risita nerviosa.

— La verdad es que "nervioso" se queda corto ante lo que siento — responde Kunhang.

— Me siento tranquilo, pero espero que los nervios no aparezcan en medio del examen — le sigue Renjun y mira su reloj — Es hora de irnos, que tengan una bonita tarde — nos sonríe y alza sus dos pulgares.

Kunhang lo imita y se van rápidamente. Volteo a ver a Xiaojun y abre la puerta del copiloto, se lo agradezco y me meto. Cierra la puerta para luego rodear el coche y finalmente subirse. Lo primero que hicimos fue ir a comer, ya que me estaba muriendo de hambre. Él quería pagar todo lo que consumimos, por supuesto que no lo iba a dejar pero salió ganando. Así que acordamos que lo próximo que hagamos lo voy a pagar. El tiempo se pasó volando una vez que llegamos al centro de Seúl; paseando por la calles, entrando a una que otra tienda, salir con algo de esa tienda, comprando comida, reír, charlar y disfrutar de Xiaojun.

Cuando el reloj marca las 7:00 pm, Xiaojun toma mi mano con delicadeza y me mira:

— Ahora, toca nuestra última parada. ¿Lista? — asiento con la cabeza — Bien.

Me dejo guiar y al ver a dónde me está llevando, abro la boca por lo sorprendida que estoy. Vamos hacia la torre de Seúl. Llegando ahí, él paga por lo boletos y esperamos a que sea nuestro turno de subir. Me siento muy feliz por esto y más porque este momento lo compartiré con Xiaojun. Una vez arriba, como niña pequeña que vio a la muñeca más bonita, me acerco a ver el paisaje y es magnífico. Las luces de la ciudad, la luna, todo es bellísimo e impresionante. Luego miro al chico que está mi lado, sus facciones, sus gestos, el cómo sus ojos brillan por la luces, también me pongo a pensar en lo bien que me siento cuando estoy cerca de él, en esas mariposas, en mi corazón que late rápidamente por él, en todo. En ese momento lo supe, no me gusta Xiaojun...

Estoy enamorada de él.

— ¿Recuerdas primero de primaria? — la pregunta de Xiaojun me hace salir de mi trance, y murmuro un "sí" — Al principio, el estar ahí iba a ser un verdadero infierno, los niños se burlaban de un niño por no saber hablar coreano y si lo intentaba, se reían aún más de él. "El tontito Yun".

Frunzo ligeramente el ceño al escuchar ese apodo, hace mucho que lo dejé de oír. Apenas tengo recuerdos de aquel niño, ya que meses después me cambié de escuela.

— No obstante, no toda la escuela era así. Hubo alguien que trató de entenderlo y a ayudarlo. Eras tú — continúa y logro captar lo que me está diciendo, era él. ¿Por qué lo olvidé? — Hiciste que esos días para ese niño no fueran malos, sino, unos muy buenos. Luego un día dejaste de ir, primero se sintió muy triste y después trató de comprender — suspira y sonríe — Gracias, Hye. Por ser una maravillosa persona.

Se acerca más a mí y lleva sus manos a mis mejillas, sus ojos me hipnotizan. Sus bellos ojos.

— Desde ese entonces, siempre estuviste en mi cabeza; preguntándome el cómo estarías, si te estaba yendo bien y cuando Kunhang se mudó donde está ahora, y te vi junto con tus amigos; fue el día más feliz de mi vida. Después de seis años te había encontrado de nuevo, pareciera ser que el destino lo había planeado — cierra sus ojos un momento. Y repaso todo lo que me ha dicho; también pienso eso del destino y estoy preparada para lo que viene — Hye, ¿quisieras ser mi novia?

— Claro que sí — sin pensarlo respondo y finalmente pasa lo que hace tiempo deseaba... me besa.

Y puedo sentirlo; cuando dos personas se vuelven una.












Apenas hace unos días la historia cumplió un año, y me siento muy agradecida y feliz con todas/os ustedes por estar ahí desde el inicio. Sinceramente si no hubiera sido por todo su apoyo, está historia no estaría donde se encuentra ahora.

Con mucho amor.

- ten's so lovely

old times • xiaojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora