La Chica De Los Ojos Verdes II

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Lauren

* *

Los primeros días antes de entrar a la universidad y mientras nos acostumbrabamos a nuestras nuevas vidas que se basaban en besarnos mucho, incluso mucho sexo, tanto que podría jurar que bajé de peso. Sexo en las mañanas, a veces en las tardes también y en las noches jamás faltaba.

- Ally va a venir a visitarnos, ¿recuerdas? - le dije a Camila desde la cama, de la cual no me ha dejado salir desde hace horas.

Sí me dijiste -.

Camila estaba haciéndose una coleta, traía puesta sólo una camisa mía color verde que era algo grande y aún así dejaba ver un poco de sus pechos nada más.

- ¿Qué hora es? -.

Medio día -.

- Es tarde, deberíamos levantarnos ya -.

No, un rato más, ¿si? - dijo mientras me daba pequeños besos en el cuello.

- Sabes que no te puedo decir que no si haces esto -.

Por mí mejor -.

Camila se montó en mí nuevamente y volvimos a hacer el amor quizá unas dos veces más.

7:00 pm

- Pasa -.

Gracias -.

¡Ally! -.

Camila Cabello, hola -.

¿Cómo estuvo tu vuelo? -.

Bastante bien en realidad -.

Me alegra saberlo -.

Ally había llegado a San Diego y yo había ido por ella al aeropuerto, se veía radiante como siempre.

Y ¿qué tal, cómo les ha ido? -.

Pues, bien, ¿no Lauren? -.

- Bastante bien, la siguiente semana estaremos en la universidad, estamos algo nerviosas -.

Ah, seguro les irá muy bien -.

Esperemos que sí -.

Le mostramos nuestro departamento a Ally, Camila ya le había preparado una habitación aunque en realidad sólo estaría aquí esta noche pues iría a Los Angeles con sus papás el resto de la semana, ellos se habían mudado desde la navidad anterior.

Scripps Mercy Hospital San Diego
Hospital general en San Diego, California

12:06 am.

Tranquila, linda, no te duermas, aquí estoy, no cierres los ojos, mírame -.

Señorita -.

- Por favor ayúdeme, está sangrando demasiado -.

Lauren, no puedo verte -.

- Aquí estoy, linda -.

La acosté en la camilla como me indicó el doctor y entonces llegaron de inmediato algunos enfermeros.

Lauren llama a mi mamá por favor -.

- Lo haré, lo haré, tranquila, aquí estoy, no te duermas -.

Señorita usted no puede pasar, tiene que quedarse en la sala de espera -.

- Por favor, ayudela...

Cuando ya íbamos a dormirnos, Camila y yo escuchamos un gran ruido en la habitación donde se quedaría Ally, gritó fuerte y rápidamente fui a ver lo que pasaba. Ally tenía la mano sobre su cabeza casi en la frente y cuando la quitó y se miró tenía mucha sangre saliendo, inmediatamente Camila y yo la llevamos al hospital más cercano en donde rápido le atendieron.

- Camz, me siento horrible -.

Lauren, no fue tu culpa -.

- Sí fue, fue mi culpa, yo no coloqué bien ese cuadro -.

Va a estar bien, tranquila -.

- Y ¿si pierde la memoria cómo tú?

No, no, no digas eso, eso no le va a pasar, sólo le harán dos puntos para cerrar su herida y listo -.

No podía dejar de sentirme mal por ella, había sido mi culpa.

8:30 am

Gracias por todo, Lauren, pero no tienes que hacer todo esto -.

- Yo quiero, Ally -.

Gracias, Jauregui -.

¿Ya te sientes mejor, Ally? - preguntó Camila.

Me duele un poquito la cabeza todavía pero casi nada - dijo mientras me tomaba de la mano y me sonreía.

Lauren se siente culpable porque dice que colocó mal los cuadros -.

Fue un accidente, Jauregui, calma-.

- Me asusté -.

Tantos accidentes en menos de un año me tenían traumada.

Ally insistió en irse esa noche pero obvio que no la dejé irse en esa condición, quería que descansara mejor.

§§§§§§§

¿Qué lees? -.

- Tu diario -.

¿En serio?-.

- No, ¿tienes un diario? - dije sin poder evitar una sonrisa malvada.

Tenía -.

- Lo buscaré -.

Camila un gesto de disgusto.

Camila me quitó el libro y lo cerró.

- Te estás haciendo adicta a esto, ¿cierto? - dije burlonamente.

Ninfomanía le llaman -.

Apagué la luz.

Diciembre 2019.