Después de presenciar la muerte de mis padres, mi tía Genevieve me llevó a vivir con ella a L.A.
Tres años después, regresé a Vancouver, dispuesta a enfrentar todo, pero lo que no sabía era que las cosas iban a tornarse más tensas....
● Esta histori...
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-Mallory, ¿estás segura de lo que estás diciendo? -preguntó impresionada- entiendo, pero estás diciendo que tu novio es un asesino, y de tus padres, lo más importante para ti.-tomó mi mano.
-No lo sé -dije insegura- cuando golpee mi cabeza contra el pavimento ese momento vino a mi mente, volví a revivirlo, el dolor físico, el emocional, la impotencia, y entonces todo se aclaró en mi mente, y vi a Finn en el lado del conductor del auto, no lo sé...-mis ojos se llenaron de lágrimas, y abracé a Becca, ella sobó mi cabeza con paciencia y tranquilidad.
¿Y si estoy confundida? ¿Y si tal vez las cosas no pasaron cómo mi mente me lo mostró?
¿Finn intentó matarme? ¿a mi? Eso era lo que más me perturbaba, porque el objetivo era yo, no ellos.
-¿Crees que haya tenido un motivo?-lo pensé.
-Ese día habíamos discutido...
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*Flashback*
-¿¡Qué!? -gritó Finn- ¿¡Te irás así sin más!?
-¡No me voy a quedar a discutir contigo Finn!
-¡O sea que si lo prefieres a él!-me tomó del brazo, yo traté de soltarme pero simplemente no podía, las lágrimas salían de mis ojos, estaba tan molesta y triste.
-¿¡Te gusta!? ¡sólo falta que te lo tires ahí mismo para terminar de actuar como una cualquiera! -abrí mis ojos cómpletamente, él cubrió su boca- Mallory, no quise decir...-lo interrumpí, mis lágrimas caían sin parar, mi corazón se estrujo.
-¡Sueltame Wolfhard! ¡Y no me busques más! ¡No quiero saber nada de ti!- me solté con todas mis fuerzas y corrí tan lejos cómo pude.
Ese día llegué a casa llorando y con el corazón roto, mamá para distraerme decidió llevarme a casa de Lucy para verla. Y de regresó fué cuando sucedió todo...
*fin flashback*
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-¿Crees que eso haya sido un motivo?-me preguntó Becca, sorprendida, mi mente se volvió un acertijo en ese momento.
-No lo sé Becca...-lo pensé un poco- tendré que averiguarlo después...-ella asintió.
Mi mente estaba hecha un desastre, trataba de buscar una explicación lógica a mi tan desafortunado recuerdo, estaba tratando de unir los puntos de todo esto pero eso sólo hacía que mi cabeza doliera, traté de descansar un poco.
-¡Mallory!-Finn entró rápidamente a la habitación de hospital, era seguido por Boris y los chicos, entraron todos juntos- ¿estás bien? ¿todo está bien? -Finn tomó mi mano, totalmente preocupado, algo muy dentro de mi se revolvió, era un sentimiento de amor pero ahora...
Combinado con incomodidad.
-Estoy bien -sonreí- sólo es mi pierna -di un vistazo- creí que tenía yeso, pero al parecer es sólo una ferula, es un milagro que no me haya roto nada.-él me besó completamente feliz.
-Me alegro tanto amor.-beso mi frente y mi mano, y por primera vez me sentía tan confundida y sin saber cómo sentirme a su lado, pero no dije nada.
-A ver Mallory, levantate y compitamos a ver quien llega más rápido a la puerta.-Boris recibió un golpecito por parte de Finn, reí.
-Mañana, ahora estoy muy cansada.-sonreí.
-A ver tu pierna.-Jaeden me miró picaramente.
-Oye, yo estoy aquí, respeta.-Finn rodó los ojos, reímos.
Tengo miedo.
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A los cuatro días había salido del hospital, me encontraba recostada en mi habitación, la pierna me seguía doliendo, seguía con aquella férula puesta y no me la quitarían hasta dentro de dos semanas, insistí al doctor para que me la quitarán, ya que yo sentía que ya podía caminar bien, pero el doctor insitió en que me la dejara un poco más para que mi pierna descansara y pudiera sanarse.
La fiesta que estábamos organizando se había cancelado por mi accidente, se pospondría para una semana después de que me quitarán la férula, esto me estaba desesperando. Quería salir, caminar y correr, pero estaba aquí.
-Mira que conseguí -Finn entró corriendo cómo niño pequeño, lo miré, aún sentía esa presión de incomodidad en mi pecho cuando lo miraba, pero trataba de disimularlo hasta que pudiera tomar el valor y enfrentarlo para preguntarle la verdad sobre aquel día- traje una pizza, tu helado favorito, y la trilogía de Narnia.-dijo mientras sacaba las cosas mencionadas de una bolsa, dejó todo en una mesa a mi lado y se apresuró a colocar el disco de la primera película de Narnia en mi consola.- ¿necesitas algo más? -me preguntó, debido a que mi mirada estaba fija en él.
-No -negué y sonreí- recuestate conmigo por favor.-palmeé un poco el lugar a mi lado en la cama, él se apresuró a quitarse los tenis y se acostó a mi lado, cóloco su brazo debajo de su cabeza, y con la mano libre se apresuró a tomar mi mano.
La película comenzó y no podía dejar de pensar en otra cosa que no fuera aquel jodido recuerdo, estaba cansada de que mi mente repitiera una y otra vez aquel momento dónde lo vi dentro del carro mirandome con odio, estaba cansada de ese momento....justo ahora quería olvidarme de ello.
Aunque estaba la posibilidad de que fuera Boris, no lo creía tan posible, Boris y yo no nos conocíamos hasta ese día en la fiesta, así que él no tendría motivos para hacer algo cómo eso, éramos desconocidos hasta que Finn nos presento.... Tendría que enfrentar a Boris primero.
El único problema es que yo recordaba a Finn ese día, usaba la pulsera, y tenía el cabello corto.
Miré a Finn, totalmente dormido, su pecho subía lentamente de arriba hacia abajo, sus pestañas largas, sus ojos bonitos cerrados por completo, sus bonitas pecas, sus labios juntos.. Mierda, ¿y si estaba enamorada del asesino de mis padres?
-Por favor que no seas tú.-Besé su frente mientras las lágrimas corrian por mi mejilla.
