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I'm sorry mother, i'm sorry little tiger.

   Realmente nunca sintió un temor tan grande como ese, el ver a su hijo mayor llorando cargando al menor, el cual, se encontraba inconciente en los brazos de su hermano. Pero lo que más le aterró a la reina Nathalie era lo que murmuraba.

- Lo siento... lo siento...


-Lo siento. Lo siento. Lo siento...


- Viktor. ¿Pero qué has hecho? - Preguntó el hombre a su lado, corriendo a través del hielo hacia donde estaban los príncipes- ¡Se está saliendo de control!

- ¡Fue un accidente! Perdóname Yuri, yo te cuido.

  Erick cargó al niño y lo llevaba para adentro, el platinado tardónen seguirlo. Mientras que la rubia solo observaba, completamente estática la escena, por lo que su mente le jugaba una mala pasada, se sentía tan real esa pesadilla, pero ahora en carne y hueso, y el saber lo que pasará en el futuro, era de verdad mucho peor.

-Tu familia está condenada a lastimarse.

- Está helado...

   Viktor lloraba a cántaros, pues lo que pasó nunca lo previsto, no hubo una vez en la que su hermanito saliera lastimado por sus poderes, pero ahora lo hizo, lastimó a la persona que lo hacía ser solo un poco mas sociable y que le decía la realidad del mundo, a pesar de tener cinco años, era más maduro que él. Su único hermano estaba en estado crítico, y todo, por su culpa.

   La reina sabía que ésto no tenía que ver con el hechizo de sus sueños, pero a la vez si, ya que está condenado a pasar cuando sus hijos crezcan. El peor dolor de una madre, es ver a sus hijos lastimarse y sufrir entre ellos y peor, sin siquiera haberlo querido. Siguió a su familia al interior del castillo, para buscar, con la poca información que tenían, una manera de ver en que estado esta su pequeño retoño.

- ¿Majestades que sucedió?- Despertaron a la servidumbre y no podían evitar el curiosear la situación.

- Llama a Lilia y Yakov. ¡Que nos vean en la biblioteca ahora!

  Lilia Baranovskaya y Yakov Felstman eran una pareja de confianza, de los pocos que conocían el poder de Viktor, y por eso no solo eran sus instructores personales, eran como su familia

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  Lilia Baranovskaya y Yakov Felstman eran una pareja de confianza, de los pocos que conocían el poder de Viktor, y por eso no solo eran sus instructores personales, eran como su familia.

   Ellos provenían de familias hechiceras de reinos lejanos, por alguna razón no tenían poderes, y por otras razones que se negaban a hablar terminaron en el reino de los Plisetzky, y se casaron. Comprendían la magia y la estudiaban, a pesar de no poder manejarla, ya que esto solo podían hacerlo unos pocos. Si embargo eran muy estudiosos en dicho tema, y ayudaban a los reyes a investigar donde podrían estar las únicas criaturas que comprendían y utilizaban la magia elemental: Las hadas.

Once Upon A Winter... [Otayuri/Viktuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora