𝒮𝑜𝓃𝓇í𝑒 ▪EᑌᑎᕼᗩE▪

16

De camino a casa, se detuvo en una farmacia para comprar un cubre bocas, los suyos, de trapo, estaban en casa, pero por ningún motivo su familia debía verlo así.

 -¿Crees que con eso lo vas a solucionar, chico? -Pregunto la dependienta entregándole el cambio -Deja de pelear si no quieres que tu madre vea eso.

 -Gracias 

Hyukjae debía quedarse a presentar examen de biología e historia, pero realmente no le apetecía esperarlo y el alto lo entendió. Porque cuando le dijo que iría a casa, no se opuso. Heechul le esperaba fuera de la farmacia, cuando le vio el moratón, que ahora era más notorio, decidió acompañarle a casa. 

 -Bueno, al menos fue menos grave esta vez. 

-Se contuvo -Susurro Hae colocándose el cubre bocas - hizo que le diera una mamada como cataxis menos violenta de sacar su irá. 

 -Cubre bien eso -Reprendió el mayor acomodándole el cubre bocas -No queremos otra pelea con mami por eso 

-Ni me lo recuerdes. -Ambos comenzaron a caminar de forma lenta - Se cree que puede controlar mi vida a su antojo. 

 -Bueno, quiere que termines con HyukJae, ¿No? Porque teme que te haga daño, y esta no es la primera vez que lo hace... ¿No has pensado en hacerle caso? 

-¿Estás loco? 

-Solo decía, no me hagas caso. 

Caminaron en silencio y mientras pensaba en una forma de explicarle a su familia porque traía cubierta la boca, llegaron. Fue sorprendente que sus pensamientos fueran tan profundos como para no darse cuenta de que en más de dos ocasiones, estuvo a punto de ser atropellado, de no ser por su acompañante. 

-Que bueno que me ofrecí a acompañarte 

-Gracias, eres genial 

-No te lo voy a negar, Hae. Pero debes saber y tener presente que no todo el tiempo voy a estar aquí. Me voy a cansar de estar cuidándolos de ustedes mismos.

 -Es que, lo amo tanto. 

-Lo sé, Hae. Y él te ama así de intenso. Es enfermizo, pero no tengo el derecho de juzgarles, solo apoyar en lo que más pueda. 

 -Enserio te mereces el cielo 

Entonces el de cabello largo comenzó a reír estruendosamente.

 -No, lo que merezco es una relajante tarde de Spa y vivir 120 años más. -Hae recibió un cálido abrazo y un lindo pico en la frente - No necesito el cielo, que aburrido estar sentado a la derecha del señor. 

 Los dos miraron hacia la casa de Hae, donde Hwa miraba desde la puerta a la espera de su hermano, Heechu sonrió y comenzó a caminar lejos. 

 -Ah, Hae -Exclamo llamando la atención del castaño que abría su cancel -Que te recuperes de ese extraño y peligroso sarpullido 

Hae rió entonces, al percibir las intensiones del chico. Tomo aire y entro en casa, caminando por el jardín hasta la puerta 

-¿Extraño y peligroso sarpullido? 

-Eso dijo la enfermera 

-A ver -Susurro Hwa, intentando quitarle el cubre bocas, pero Hae lo golpeo fuertemente en la mano traviesa -Ay 

-No, enserio Hwa. No estoy de humor. 

-Entiendo -Dijo el mayor dándole paso a su hermano hacia el interior -Mamá no esta en casa, fue al doctor. Papá le acompaño.