Maldita manía de las cosas por terminarse, maldita estupidez la nuestra por no impedirlo.
Sí, a veces hay que dejar ir ciertas etapas, porque la vida sigue y su curso dictamina que pasemos página. Pero, ¿ qué pasa cuando los recuerdos son tan buenos, los lazos tan fuertes y las amistades tan esenciales, que no somos capaces de hacerlo ? Cuando nos despertamos un lunes por la mañana y queremos reiniciar esos ratos en los que no solo vivíamos, sino que nos sentíamos vivos gracias a la compañía que teníamos.
Yoli lo tiene muy claro. Solo hace falta una cena, una reserva y cuatro llamadas de teléfono a sus antiguos compañeros de locuras para quitarse esa espina clavada. Para que, al fin, ocho años más tarde tenga lugar el esperado reencuentro. Así lo planea y así lo realiza.
Ninguno de ellos se imagina que es el comienzo de algo muy bonito, de la recuperación de una de sus piezas básicas. Piensan que simplemente van a engullir una ración alta en calorías, beber mucho alcohol, y reír a borbotones mientras rememoran los mejores años de su vida.
En eso no se equivocan, pero Yoli tiene una sorpresa para todos. Algo en lo que ha trabajado durante mucho tiempo, solo porque esperaba poder disfrutarlo algún día con ellos.
Les tocará el alma, ella está segura. Podrán volver a unirse de nuevo, a ser una gran familia. Yoli lo sabe, lo siente.
El momento es ahora y no piensa desperdiciarlo.
Porque en cuanto a soltar, ella es de las que espera el último intento para separar las manos.
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Lo que hemos vivido
Fanfiction"Física o Química" es una de esas series que llega a tocar los sentimientos más profundos de quien lo ve, y por eso caben infinitas posibles historias que sirvan de continuación. En este caso os abro las puertas de mi mente, de como he conseguido v...