Están llenos de preocupaciones, de cabos sueltos que quedan por averiguar, de mil y un cosas en las que pensar. Y por ello, necesitan un pequeño descanso, aunque éste sea tan corto que ni lo aprecien. Aún durando cinco minutos les sabría a eterna gloria, tanto a uno como a otro. Así pues, después de cenar salen a la terraza cubierta con un vino tinto que Yoli guardaba para una ocasión especial. Y la verdad es que no se puede imaginar un momento mejor que éste, en el que están apunto de recuperar a su mejor amigo, en el que se encuentra a solas con Cabano después de todo, y en el que le entran unas ganas tremendas de arrancarle la camisa y matar todos los miedos sobre la encimera.
En cuanto se sientan en el sofá de exterior, Cabano anuncia que está buscando piso y que ya no le tendrá que aguantar a todas horas. Realmente es mentira, ni ha buscado ni tiene en mente hacerlo. Lo que pretende con esa piadosa sugerencia es saber la opinión de ella, si está a gusto con él invadiéndole la casa o no. Por supuesto, en el segundo caso sí que empezaría a buscarse la vida, tampoco quiere molestar. Sin embargo, su respuesta hace que él sonría y tira a la basura todas las ideas de mudanzas precipitadas. Ella piensa que está bien los dos ahí, no hace falta que se vaya. A ella, desde luego, no le molesta.
Charlan, brindan con las copas y ríen abiertamente, hacia mucho que no disfrutaban tanto de la compañía del otro. Demasiado. Él saca un cigarro y le ofrece otro a Yoli, a lo que ella rehúsa. Algo un tanto extraño conociéndola. Decidió no fumar para que no le afecte al embrión que guarda dentro de la tripa, por lo menos hasta que decida qué hacer. Hasta que lo decidan. Entonces se forma un incómodo silencio entre ellos, ninguno sabe qué decir y tan solo se escuchan las gotas golpeando la ventana. Cabano se muere de ganas de estar con ella, de formar una familia a su lado y ser felices. Sin embargo, no encuentra las palabras apropiadas y tampoco quiere presionarla, por lo que calla. Yoli, por su parte, si llega a ser capaz de meterse en los pensamientos de él, tendría muy clara la decisión.
Cayendo en el error de no abrirse, Cabano prefiere preguntar primero acerca de su opinión. Y como si una partida de tenis se tratase, ella con lo único que le contesta es con una pregunta que guarda la misma intención.
– ¿ Y tú ?
– Lo que tú quieras, para algo es tu cuerpo.
Fallo, fallo muy grande no decirle lo que verdaderamente piensa. Algo tendrá que opinar él también. Echa la mirada para otro lado, sin saber cómo actuar. Y eso que siempre ha sido una persona con las ideas claras, nunca ha titubeado ante nada. Pero es que esto es distinto, no es ninguna broma ni ningún juego de niños, están hablando de tener un hijo. Además de que, por encima de todo, lo que no quiere es fallarle a ella, puesto que a día de hoy posiblemente es la persona que más le importa en el mundo. Ella le observa y le pide que diga algo, sin mirarle directamente a los ojos porque él tiene la vista clavada al otro lado. Entonces ella le coge la cabeza y, sutilmente, se la gira hasta que sus miradas se cruzan fijamente. Se lo está pidiendo por favor, por lo que él traga saliva y suspira.
Tras un rato sin decir nada ninguno de los dos, tan solo mirándose, Cabano termina por estallar en lágrimas. Para él, formar una familia con Yoli es un regalo, es algo que mucha gente busca y que ellos se han visto afortunados de poder tenerlo sin preverlo.
– Estoy harto.
¿ Que está harto de qué ? Ella no entiende, pero entenderá. Está harto de muchas cosas. Harto de este juego de críos pequeños, y más aún cuando sabe, o cree saber, que ha sido por su culpa, por hacer las cosas mal con Ruth. Harto de saludarla por las mañanas con un beso en la mejilla, cuando lo que quiere es darle los buenos días entre las sábanas. Harto de sentir a cada segundo que se está enamorando más y más de ella, pero no poder estar juntos por el maldito orgullo que les domina a ambos dos. Y, sobre todo, harto de no ser capaz de decir abiertamente y sin rodeos lo que siente de verdad.
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Lo que hemos vivido
Fanfiction"Física o Química" es una de esas series que llega a tocar los sentimientos más profundos de quien lo ve, y por eso caben infinitas posibles historias que sirvan de continuación. En este caso os abro las puertas de mi mente, de como he conseguido v...