Capítulo 4 : La ladrona

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Un par de semanas después de lo ocurrido con el encapuchado de negro, Blake se recupera de las graves heridas que le provocó esa pelea, Arianna no ha hecho otra cosa más que centrarse en su trabajo, Elvis cuando puede va a la casa de su amigo a ver cómo está, Mary se centra en seguir estudiando medicina, Marva y Enma algo despreocupadas, se centran en preparar la fiesta del 18 cumpleaños de esta última.

- A ver, tampoco te flipes, que mi casa es grande pero tampoco es una mansión, ni tampoco quiero que acabe ardiendo. - Dijo Enma, calmando los ánimos de Marva.

- ¿ Tú quieres que mole verdad ? - Le insistió Marva.

- Si, pero no quiero imitar la casa de Project X. -

- No te preocupes, esas cosas solo pasan en las pelis. - Le volvió a insistir.

- Miedo me da, pero me fiaré de ti. - Dijo Enma, cediendo ante su amiga.

- Olé, esa es mi chica. - Expresando Marva, con mucha felicidad.

- Por cierto, Marc va a venir. - Dijo Enma con alegría, pero a la vez cierta preocupación.

- Pues ya sabes, aprovecha y lígatelo. -
La incitó Marva.

- Bueno, bueno, con calma, que está buenísimo, pero a saber lo que pasa. -

- Te digo lo que va a pasar, tú eres la chica más impresionante del instituto, y el es el tío más bueno y cachas del instituto, así que, ambos os vais a liar y quién sabe si algo más. - Dijo Marva en un tono chistoso.

- Bueno, si dices que Marc está cachas, es que no has visto los músculos de mi hermano. - Refiriéndose a Blake.

- Si, la verdad es que en esa isla, no perdió el tiempo. -

- Anda, ayúdame, ¿ me pongo escote o no ?

- Obviamente si, a Marc le va a encantar . -

- Pues listo, esta noche se lia. - Manifestando su emoción.

Mientras tanto, Blake entrena en su almacén, subiendo la escalera salmón ( por si alguien no sabe que es esto, es una barra de dominadas, la cual se trata de subir y encajar la barra en el hueco de más arriba, haciendo fuerza con tu propio peso ) y haciendo flexiones colgado de unos hierros del techo, sujetándose solo por sus manos, de espaldas al suelo con el cuerpo paralelo a los hierros. Suena el móvil de Blake, para cogerlo se agarra con los pies al hierro y contesta la llamada.

- Dime Ari. - Contestó algo sorprendido, ya que pensaba que estaría trabajando.

- Necesito tu ayuda. - Por su voz, se la notaba algo inquieta.

- ¿ Como mi ayuda ? - Preguntó Blake extrañado, aunque imaginándose su posible propuesta.

- Necesito tu ayuda... Extraoficialmente. - Respondió pensativa y con un poco de duda.

- Vaya, ¿ Y que es eso que te tiene tan desesperada, como para pedir mi ayuda ilegal ? - Le dijo en tono de broma.

- La verdad, no me hace ninguna gracia, pero tal y como están las cosas, prefiero llevar esto con la mayor discreción posible. -

- Está bien, sorprendeme. -

- Llevamos unos meses, que nos han llegado avisos de una chica, en traje de cuero negro, con botas y un antifaz con unas pequeñas orejitas negras. Dicen que entra a los sitios a robar y no hace absolutamente ningún ruido.-

- ¿ No hace nada de ruido ? ¿ Y qué es lo que roba ? -

- Suele robar joyas de gran valor y diamantes, la otra noche entró en el museo de arte de la ciudad y se llevó un diamante, no saltaron las alarmas, las cámaras grabaron como si no hubiera nada, en teoría ella no estuvo allí. -

Red ArrowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora