Red Arrow

Capítulo 3 : Bruce Wayne

El telediario mañanero, empieza con la noticia de que el encapuchado en las últimas noches, ha frustrado las operaciones de cuatro mafias criminales y provocado la detención de Anthony Carrigan, uno de los mayores capos de la ciudad. La opinión de la gente estaba dividida, unos decían que era un criminal, otros que solo era un justiciero alborotador, que nunca conseguiría nada y unos pocos que era el héroe que la ciudad necesitaba para salir de este mal momento.

- ¡ ME CAGO EN LA PUTA ! - Se escucha un grito y como un vaso se rompe violentamente, al ser lanzado contra la pared por un hombre de aspecto algo gordo, calvo y con un traje de la mejor calidad.

- Ese hijo de perra está frustando lo que hemos preparado estos últimos meses en unos pocos días. ¿ Cómo es eso posible ? Un tío contra todas las mafias, y nadie lo ha cogido, ni siquiera la policía, ¿ Para que coño les pago a esos inútiles, si no saben hacer su puñetero trabajo ? - Por el tono de la voz se notaba muy enfadado.

- Vaya, parece que Bruce Wayne tiene miedo. - Dijo una voz femenina al lado.

- No, Alice, no le tengo ningún miedo a ese tío. Pero como le ponga las manos encima, le voy a rajar desde los huevos a la garganta. ¿ Tú no tenías que irte ? - Le dijo a la mujer, invitándola a que se fuera.

- Si claro, he quedado a comer con mi hija Enma cuando salga de clase.-

- ¿ Cómo va todo ahora que Blake a vuelto ? - Preguntó Bruce, haciendo como si se interesase por ella.

- Bueno, ha vuelto algo de felicidad a la casa después de mucho tiempo, aunque aún le cuesta un poco el hecho de haber vuelto. -  Le contestó un poco entrecortada.

- Es normal, espero que pronto todo vuelva a ser como antes. Nos vemos mañana señorita fiscal. - Bruce le recuerda a Alice con esa frase que ella está en ese puesto porque él la puso ahí.

- Hasta mañana Bruce. - Le dijo mientras se subía en el ascensor.

A la salida de empresas Wayne estaba Enma, esperando a su madre para irse a comer las dos juntas.

- ¡ Mamiii ! - Le dijo Enma con una sonrisa y dándole un beso en la mejilla.

- Hola cariño, ¿ Y tú hermano, no lo has visto en todo el día ? -

- No, lo oí llegar tarde a casa, se fue a dormir y no sé si se habrá levantado aún. -

- Bueno, dejémoslo que descanse y se despeje, tiene que ser complicado para él volver después de tanto tiempo. - Con expresión un poco apenada.

Ambas se fueron a comer a un restaurante chino y luego volvieron a casa. Al llegar, se percataron de que Blake no estaba en casa, lo cual a Enma le sorprendió un poco, ya que llegó bastante tarde.
De repente, sonó el móvil de Enma.

- Enma, ven mi casa que vamos a hacer tarde-noche de juegos y alcohol. Están aquí Erik y Ari, que le han dado el día libre. - Le propuso Marva a su mejor amiga.

- Si claro, estoy allí en diez minutos. - Le confirmo Enma muy emocionada.

Al poco rato, estaban los cuatro en la casa de Marva jugando a juegos de mesa y bebiendo alcohol, todos menos Arianna, que estaba bastante desganada.

- Cariño, ¿ Que te pasa ? Te veo un poco mal. - Le dijo Erik, preocupándose por su novia.

- Nada, el trabajo, estos últimos días están siendo un poco complicados. - Su forma de hablar y su expresión triste hacían ver que era algo más aparte de eso.

- Ari, llevo contigo el suficiente tiempo como para saber cuándo te ocurre algo por el trabajo y cuándo es algo más, y yo no tengo poderes de leer la mente. - Le insistió Erik.