La audacia de la aprendiz ante un reloj en estado crítico.

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Ernard suspiró. El día comenzó, lo que indicaba la preparación de la mercancía, el ajuste de precios, la limpieza y orden y, finalmente, la apertura del negocio. Nada podía arruinar este día tranqui-.

"Oyaji, buen día. Necesito una espada."

Aaaah, eso tenía que pasar...

"Hey, chico." Saluda con cierta resignación el hombre, notando como la niña a su lado le sonreía con dulzura desde la lejanía. Okay, eso pagaba el precio del inminente encuentro con él.

"Ya preparé el set nuevo, puedes verlo..." Murmura con aburrimiento, notando el escudo y recordando algo. Raphtalia pareció escuchar algo ya que sus orejas y cabeza se enfocaron hacia esa dirección. "Oh, chico. Una pregunta, ¿Ahora cuánto tarda en afilar tu escudo?"

"Unos 10 minutos. Pero tuve que gastar un dineral en más de 20 piedras de afilar para tenerla en su nivel máximo de absorción."

"Debió ser duro para tu billetera, ¿Eh? ¿La anterior la partió en cuántos encuentros?"

"Duró mucho. Casi más de 120 enfrentamientos. Prácticamente no usaba su lanza o arco, ya que confiaba en sus ataques directos. De hecho, es buena en boxeo y judo. Le enseñé bien...

Ambos estaban parados en la entrada viendo como un bandido era brutalmente arremetido por una llave que ella le hizo, apretando en brazo con tanta fuerza que se veía que se lo partiría mientras le pateaba la cara para que no tratara de luchar.

"... Demasiado bien creo..." Murmuró él con una mueca cuando escuchó como ella jaló, asegurando haberle roto algo por los gritos de agónico dolor.

"Entonces, ¿Comprarás o qué?"

"Oh, sí. Lo olvidaba. ¡Raph! ¡Nos vamos!" Llama el héroe mientras ella se levantaba y se mostraba tranquila.

"Regla número cinco-desu: Perdonar o no actos malvados... Aquí mi respuesta, vándalo. No perdono esto-desu." Declaró ella mientras lo señaló con desprecio, finalmente le devolvió la bolsa de monedas a una anciana, que le agradeció su heroísmo, y se acercó al par que hablaba en un callejón, rumbo a la tienda.

...

"¿Viaje-desu?" Consultó ella mientras sus orejas se sacudieron por la novedad.

"Sí. Hace unos días descubrí que mi escudo puede absorber minerales también, por lo que pensé en ir a obtenerlos por mi mismo para poder rendirles utilidad y diferentes calidades. Por eso le compré el set de herramientas a Oyaji." Explicó mientras acarició la cabeza de ella, encantado por la acción de sus orejas.

"Ya veo... ¿Dónde iremos-desu?" Se dejó hacer ella, disfrutando las caricias.

"Riyuuto. Una aldea algo alejada pero seguramente más consciente de nuestra situación. Tiene varias cuevas en la zona. El mercante que me compra las pieles de los monstruos me habló de ella."

"¿Deberemos atravesar el bosque-desu?"

"Sería un viaje corto así. Estos 3 deben subir de nivel si quieren ser de utilidad. Ya logré subir a Dio a nivel 4.

El sistema de mascotas era interesante. El escudo les proveía mejores resultados a diferencia de los compañeros de equipo. Estas debían estar seguras de estar con el acompañante, por lo que no fue difícil cuando comenzó a adiestrarlas al cazar conejos. Ante tal adiestramiento, las dejaba rondar por el área cazando a estas para comerlas o simplemente favorecer la cocina al atraparlas.

Voluntad de Escudero. [Rebornverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora