Capítulo 18

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Ambas chicas estaban sentadas en la sala del apartamento de _____. En silencio. Si un alfiler caía estaban seguras de que se oiría sin esfuerzo. Lauren no soportaba la presión, y no soportaba ver el rostro congestionado de la pelinegra. Pero no quería ni debía alterarse, primero porque no quería molestar a la más alta, y segundo porque iba contra su ética.

-¿Vas a decir algo? -preguntó calmada.

-No sé cómo empezar.

-Por el principio, _____ -tomó su mano, para demostrarle que ella estaría ahí, y que no la dejaría.

Suspiró. -Ten en cuenta que si algo no te gusta pues tienes todo el derecho de terminar todo aquí, ¿comprendes?

-No salgas con tus rodeos, Wickham -dijo amenazadora.

-Rubí está investigándote -soltó.

La más baja hizo un movimiento de cabeza sin entender. -¿Qué quieres decir con eso? ¿Estoy en peligro?

-Te lo dije, Lau...

-Ojos lindos, _____.

-Te lo dije, ojos lindos, mi vida es una mierda, y las personas a mi alrededor siempre están en peligro, ¿por qué crees que soy como un lobo solitario?

-Entiendo. Pero, ¿por qué me investiga? ¿Qué es lo que quiere? -aún en ese momento la pelinegra no podía dejar de repetir en su mente lo linda que era la muñeca de porcelana cuando estaba confundida. O enojada. O feliz. De todas las formas en que ella es.

-¿Recuerdas cuando te conté que mi madre me sacó de la casa? -la ojiverde asintió. -¿Por qué fue?

-Porque tu pareja era una chica -susurró.

-Bien, pues esa chica -tomó una severa bocanada de aire. -... era Rubí. -los ojos esmeralda de la más baja comenzaban a tener una sombra en ellos. Continuó sin darle tiempo a Lauren para hablar. -Su padre y su hermano tampoco apoyaban nuestra relación, pero no hicimos nada al respecto -suspiró. -El hermano de Rubí acudía a mi sólo para amenazarme y exigirme que me alejara de ella. Él secuestró a Normani para que yo dejara en paz a Rubí -los ojos de la ojiverde de abrieron de par en par. -Pero ella y yo éramos inseparables, éramos muy jóvenes. Así que ella misma se sacrificó y liberó a Normani como pudo. Y mi padre, al enterarse de todo lo que pasaba, tomó cartas en el asunto -cerró sus ojos, tratando de que la lagrimas no salieran de ellos. -Mandó a sus hombres a desaparecer a Tobías.

-¿Quieres decir...? -la expresión de terror. Mierda. Mierda. Y más mierda.

-Lo mataron, Lauren -gimió. -Y fue mi culpa, si yo me hubiera alejado de esa idiota nada de esto estaría pasando -llevó ambas manos a su cabeza, recostando sus codos en las rodillas.

-¿Y qué pasó luego? -la ojiverde posó su mano en la espalda de _____, dando suaves caricias.

-John, el padre de Rubí y Tobías, fue lo qué pasó -la ira volvió a su cuerpo. -Se llevó lejos a la que en ese entonces era mi pareja. Averiguó todo sobre mi, y fue ahí donde hizo que Rubí peleara en El Verdugo -hizo una pequeña pausa, recordando todo. -Ella estaba cambiada, todo en ella había cambiado, y de ser una persona querida para mi, pasó a ser mi mayor enemiga.

-Ella quiere venganza por lo que le pasó a su hermano -vociferó la más baja mirando a la pared, atando cabos.

-No ella, realmente -volvió su vista a la pelinegra. -Ella es solo un maldito títere de John. Él es que quiere destruirme, y lo hará si llega a ti, Lauren -la miró, y esos ojos esmeralda conteniendo las lágrimas hizo que su alma (o lo que quedaba de ella) se partiera.

Bring Me Home (Lauren Jauregui y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora