Sonreí con satisfacción mientras veía el montón de librerías escritas por Odín, conseguí completo acceso a las bibliotecas de Odín como recompensa por capturar al Enano. Digamos que esperaba algo mejor... Pero me conformo, sin mencionar que ahora podré participar en las guerras...
Está de más decir que espero que Xandar sea el siguiente, los malditos tienen unas reservas de oro que no poseían en las películas, y en estas épocas es muy arriesgado tener tanto oro sin que los ojos de Odín no se fijen en ti.
Seh, Odín tiene ambos ojos y no tiene canas, además de que es un bastardo que anda en busca de poder y más poder, y vamos, yo disfrutaré a mi padre mientras dure.
Sin muchas ganas de hacer otra cosa crucé las puertas de oro mientras la suela de mis botas militares de magia oscura hacían un sonido de metal impactando contra mármol, el sonido hacía un eco que resonaba por toda la gran biblioteca.
Encontré libros que me ayudarían mucho con el control de la magia elemental, algunos libros de magia negra que Odín escribía de lo que aprendía de mí, porque cabe recalcar que yo soy el único usuario que se ha visto nacer con tales poderes.
Pero en fin, no buscaba libros de magia, buscaba libros de tecnología. Quería extender mis conocimientos, tal vez hacer un par de armas como los tentáculos del Doctor Octopus, o algo similar...
Y si convino mi magia de creación con mi magia negra... Seré el puto amo.
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Cabalgué en mi fiel mascota en el campo de batalla, el lugar era cenizas en lugar de tierra, típico de Muspelheim. Tras mi figura me seguían un grupo de cincuenta Enanos que me seguían con determinación de derrotar a los enemigos que empezaban a salir de algunos cráteres, en los aires un grupo de Valquirias en sus Pegasos blancos y sus espadas en alto mientras rugían con ferocidad mientras divisaban a algunos dragones que por ordenes mías tienen como misión distraer o vencer.
Los actuales enemigos son un planeta de los hijos de Surtur... Y sé qué pensarán, ¿Surtur? ¿El viejo decrepito que capturó a Thor? JA, no ese Surtur, en estos tiempos Surtur es un maldito monstruo destructor de planetas, incluso más temido que Odín.
La razón es que la Llama Eterna no ha sido creada, y ahora Surtur es uno con ella.
Actualmente atacamos a este planeta porque varios aliados cayeron por culpa de Surtur y los aliados restantes se rehúsan a pagar impuestos o simplemente están temerosos y dudando de la fuerza de Asgard.
Odín en un principio se negó a traerme, típico de él, afortunadamente lo convencí para llegar a un trato, yo venzo al ejército y él se encarga de Surtur. Fácil y nada peligroso.
Mis pensamientos terminaron cuando un dragón salió de un cráter en el suelo, vi que las Valquirias ya estaban demasiado ocupadas con otros dragones, así que rápidamente me dirigí a su posición, un solo dragón podría derrotar a muchos Enanos, mejor los asesino yo y que los demás Enanos se encarguen de los blancos pequeños, en parte por eso es que las Valquirias cubren a los Enanos.
Fenrir saltó para impulsarse y bloquear el avance de la bestia escupe fuego, este dejó de avanzar debido a la embestida que lo hizo rodar en el suelo, rápidamente aproveché la oportunidad para acabarlo mientras saltaba de la espalda de Fenrir y con un golpe directo a su cráneo hacía que el monstruo muera instantáneamente cuando su cráneo se partió en dos.
Varios de los pequeños pendejos que siguen a Surtur salieron y me rodearon, inspeccionando el estado de salud de mi pequeño me di cuenta rápidamente que Fenrir también estaba rodeado.
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El Nuevo Dios De La Muerte
Hayran KurguOdín:-¡¿Porqué no llora?!-exclamó viendo a la enfermera con ansiedad nada reprimida. Enfermera:-... Señor... Me temo que su hijo está muer-Esta no pudo continuar hablando cuándo un pilar de Magia Negra atravesó su estómago. Odín vio con consternació...