Por tres años consecutivos su nombre lideró las listas gracias a sus exitosos mixtapes y colaboraciones con diferentes artistas; además, con 26 años y una carrera próspera, se consideraba uno de los hombres solteros más codiciados del país, tanto po...
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Desde su silla, JiMin se veía más alto que él, imponente y externo a la situación que estaban protagonizando. Al estar a diferentes alturas pudo notar los ojos brillantes del chico a causa de las lágrimas contenidas por la desesperación y la vergüenza, pero quizás también por el deseo. Y aquellos carnosos labios que días atrás tuvo el placer de sentir sobre los suyos, se veían más rosados y atractivos de lo que recordaba.
Nota mental:no mirar a Park JiMin cuando se vea como un ser superior.
A veces debía de sincerarse consigo mismo. Aunque deseara odiar al nuevo número uno, tampoco había dejado de darle vueltas al asunto.
Después de pasar un fin de semana completo con su mejor amigo y pedirle, sin delatarse en exceso, ayuda con el menor; el resto de tiempo lo invirtió en buscarle sentido a aquel sorpresivo evento que tuvo lugar en la casa de Park. Aún percibía algo de rencor en su interior a causa de la lista, la misma que en un par de semanas perdería relevancia para el resto, pero que seguiría siendo símbolo del final e inicio de un nuevo camino en su vida. Sin embargo, la sensación de los labios de JiMin sobre los suyos era mayor a cualquier molestia referente a un puesto que a la larga volvería a cambiar.
—Me arrepentiré de esto, pero acércate —le tendió la mano esperando que el menor la aceptara—. Esta vez seré yo quien haga el trato.
JiMin asintió con la cabeza.
—Necesitamos ideas para la canción que nuestros equipos esperan como colaboración; así que, si logramos formar algo coherente en los próximos minutos, te diré si acepto la loca propuesta de permitir que me beses.
—Le pagaré 10000 wones si me deja hacerlo ahora.
—Deja de usar el dinero para comprarme, Park. Es solo una propuesta, así que no te ilusiones —frunció el ceño—. Espero que no hagas ninguna locura hasta que tengamos una idea —el menor suspiro resignado al tiempo que asentía y tomaba finalmente la mano del rapero.
YoonGi sintió la suave piel del menor situarse sobre la suya. Sus dedos por inercia buscaron entrelazarse con los ajenos, notando como su extremidad era capaz de abarcar por completo la de Park. Una parte de su cuerpo se sintió cómoda con aquel acto, porque lo arrastró para que tomara asiento con él en la diminuta silla, dejando el rostro de JiMin tan cerca al suyo que notó las sonrojadas mejillas del menor y cómo evitaba mirarlo a los ojos.
—¿Es un trato o seguirás perdiendo el tiempo?
Cuando tomó la cálida mano de JiMin y lo obligó a acercarse, se dijo a sí mismo que nada de lo que hacía estaba mal, quizás un poco acelerado, pero sus acciones eran racionales, siempre y cuando su corazón y mente lo consideraran así. Por lo que silenció cualquier posible duda que cargaba desde la semana pasada e ignoró lo que el menor causaba en él.
