Y ahora que te amo...¿Qué?

Capítulo 15- No entiendo nada

Después de ir a la farmacia y tomarme los analgésicos fui directamente a mi casa. Subí el ascensor en silencio. Sentía que mi pómulo palpitaba y aun lo sentía demasiado hinchado.

Entré a mi departamento, todo estaba en silencio, probablemente ya se habían ido los tres. Quería bañarme, ponerme mi pijama y meterme debajo de las sábanas. Caminé por el pasillo y... que equivocada estaba. Al ver a la sala ahí estaban ellos. Sentados en el sillón sin mirarse.

-Isa...-me llamó James. Jai corrió a abrazarme pero lo aparté.

-No me toquen ¿quieren? y...váyanse. No quiero estar con ninguno de ustedes. -dije y seguí caminando por el pasillo. Me encerré en mi habitación y puse el seguro a la puerta.

Me senté en la cama y cerré mis ojos dando un largo suspiro. Estaba a punto de ir al baño cuando mi celular timbró: Papá.

-¿Hola? -dije al momento de descolgar

-El veredicto esta listo -Respondió sin titubear, nisiquiera parecía nervioso. Suspiré con una mano en el cabello.

-¿Cuando es la sesión?

-Mañana a las 8:00 am

-Tengo que ir papá.

-claro que irás, princesa.

-Oye, hablando de que mañana nos veremos no...no quiero que te alarmes, me...me caí y me golpee en la cara. Ya fui a la clínica pero...se ve mal, asi que tranquilo ¿de acuerdo?

-¿Como que te caíste? Ana Isabella, tienes que tener mas cuidado. Además nunca has sido muy descoordinada que digamos y no quiero pensar que estabas borracha

-¡Papá no! por Dios, claro que no. Pasó hace una hora o algo asi... -A veces mi papá era realmente exasperante.

-De acuerdo, te creo, te creo. -dijo y sonreí.

-Debo irme papá, tengo un sueño de los mil demonios y necesito estar bien para mañana -dije mientras me metía al baño para ponerme la pijama.

-esta bien, princesa. Nos vemos en la corte a las 7:30

-Ahí nos vemos, te amo papá

-Y yo te amo a ti, hasta mañana -dicho esto, corté la llamada. Me puse mi pijama y me prepare para desmaquillarme. Saqué el algodón y el desmaquillante del cajón.

Vertí un poco de la sustancia en el algodón y me lo llevé a mi ojo sano. Me quité todo el maquillaje sin problemas, ahora venía el verdadero martirio. Mi ojo derecho produjo una sensación dolorosa al hacer contacto con el algodón. Solté un quejido pero no rompí la distancia entre mi ojo y el algodón.
Después de algunos minutos quedé des maquillada por completo y con un dolor punzante en el pómulo.

Al llegar a mi cama me puse la pomada de nuevo y me acosté. Requería dormir ya que mañana sería un largo día. Estaba tan nerviosa...¿qué pasaría con mi hermana?

Escuché pasos en el pasillo. Voces...hay no. El trío maravilla aun no se iba. La cerradura emitió un ligero "click" y la perilla iba girando. Me tapé hasta la barbilla y cerré los ojos.

Sentí los pasos acercándose a mi. Una mano acaricio mi pómulo pero aguante el dolor.

-Lo lamento enana...lo lamento. -Era James -Siento haber hecho todo eso, fui tan estúpido que ahora solo te he afectado a ti -susurró

-Ya déjala en paz James -le susurró con dureza Jai. -Ten el valor para disculparte con ella cuando este despierta -esta vez puse mas atención en lo que hablaban y la verdad es que yo no entendía nada