19: Enseñando las reglas

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— Erase una vez...

— ...Truz — Me interrumpió Izan por quinta vez. 

— ¡A la mierda todo! — Grite frustrado mientras me cruzaba de brazos. Los demás empezaron a reír —Nunca más me ofreceré a contar una historia.

— ¡Tú sabes que fue con amor! — Este formo con sus manos un corazón, en cambio, yo le levante mi dedo medio. — ¡Mucho amor, ese amor homosexual!

— Vete a la mierda.

— No se donde queda tú casa... 

— ¡Ahora si...! — Empezamos a correr por las orillas del lago, descalzos. — ¡Izan!

— ¡Amor, amor gay~!

Me lance sobre él, caímos al agua.

— ¡No me hagas daño! — Rió — ¡Solo fue una broma!

— Como si pudiera golpearte — Le dije y me levante. Ofrecí mi mano y él la acepto.

— ¿Sabes? Conseguí unas cuantas botellas de cerveza.

— ¡Vamos!

Bebimos

Bebimos

Y bebimos.

.

.

Empecé a abrir mis ojos poco a poco, al despertar completamente pude verificar que no estaba en el lago...

— ¡Despertaron! — Anuncio el director frente a mi — ¡Buenos días campistas! Hoy... le vamos a enseñar a no romper las reglas.

Mierda. Mierda. Mierda.

Observe a mis lados: Izan, Kate y Maxinne estaban a mi derecha. Carrie y Sophie a mi izquierda. Estábamos amarrados a un tiro al blanco, estas cosas donde practica el taller de arquería. La mitad del campamento estaba detrás del director con tomates en su manos, mientras que la otra parte eran más chicas observando la escena.

— ¡Soy demasiado hermoso para ser embarrado con tomates podridos! — Chillo Izan.

¿Tomates podridos?

— ¡Salven a nuestro Izan! — Gritaron las chicas — ¡Salven nuestro Izan!

¡Salvenme a mi!

— ¡Izan te amo! — Seguían gritando — ¡Tambien amamos a Jesse!

¡¿Qué?! ¡Tengo admiradoras! ¡Sabia que algún día mi sensualidad las iba a dejar enamoradas! ¡Lo sabia!

— ¡Silencio! — Grito el director, nos observo con una sonrisa de lado — Nadie los salvara de su castigo. Cuando diga tres, todos atacaran.

— ¡Sí! 

— Uno...

— ¡Nooo! — Chillo Izan.

— Dos...

¡Mami ayúdame!

— ¡Tres...! — Y los tomates aprendieron a volar...

.

.

— Me cago en los tomates voladores — Escuche decir a Izan — Chicos, nunca, nunca más tomemos...

— Tú sabes que lo volveremos a hacer — Le dije.

— ¡Lo sé! Pero quería oír como era decirlo — Sonrió — El rojo queda perfecto con mi piel ¿No es cierto, chicas?

— Sí — Asintieron Kate, Maxinne y Carrie.

— ¿Sophie? 

— Tal vez — Dijo está para después tomar a su hermana por la muñeca — Quiero un baño.

Campamento Weel'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora