I. Liliana Ross ✔

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Era domingo por la mañana. Un domingo dónde se supone deberían estar en sus casas, durmiendo, con sus familias o desayunando, pero no, tenían trabajo, por lo que estaban yendo hacia la oficina. No entendían qué sucedía; tan temprano un domingo, solo significaba que algo grave había pasado.

– ¿Ya están todos? –entró finalmente un hombre de traje y serio.

– Sí señor –dijo un mujer rubia y vestida con muchos colores.

– Bien. Puedes empezar entonces –ordenó Hotch.

García oprimió un botón en un pequeño control remoto que tenía entre las manos y apareció la imagen de una joven mujer, de unos veinte y tantos años, cabello castaño, piel morena y de grandes ojos color avellana.

– Ella es Liliana Ross, tiene veintisiete años. Seguramente aquí todos la conocemos, porque es la recepcionista de la entrada principal de este edificio. Razón por la que su desaparición se nos fue asignada como urgente. –Presionó otro botón y aparecieron múltiples fotos de un departamento– Alison Collins, su mejor amiga, fue por la mañana hasta su departamento para salir de compras, pero no respondía y cuando llamaba, el celular de Liliana sonaba dentro del lugar, por lo que decidió llamar a la policía y descubrir que no estaba.

– ¿No existe la posibilidad de que haya salido con prisa y olvidara el celular en casa? –preguntó el hombre mayor que se encontraba en esa habitación.

– Es una chica, por más apurada que estuviera no olvidaría su celular –le respondió una mujer, con el cabello negro y piel blanca.

– Ni sus llaves o billetera –la mujer mostró otras fotos con las cosas que nombró.

– ¿Y qué hay de alguien que quisiera hacerle daño? Un ex novio, tal vez –esta vez habló un joven moreno y alto.

– El único novio que tuvo ahora vive al otro lado del país. Y, anoche lo multaron por exceso de velocidad en San Francisco –la chica volvió la mirada y miró la foto de la chica en la pantalla–. Ella es una chica tranquila y que no le gusta resaltar, no entiendo cómo puede haber alguien que quiera hacerle daño.

– Sé que la chica trabaja aquí, pero, ¿por qué lo tenemos como prioridad? ¿No hay otros equipos que se encargan de las búsquedas? –habló una joven rubia.

– Sí. El problema es que creemos que Liliana es la tercera chica de una lista de desapariciones los últimos dos meses.

– ¿Desapariciones? ¿O sea que no hay cuerpos aún? –habló finalmente el chico joven del lugar.

La chica de pie solo negó.

– ¿Y por qué creen que los casos se conectan? –volvió a preguntar.

– Por esto –dijo, y al instante en la pantalla aparecieron las fotos de dos chicas más y con eso todos lo entendieron–. A la derecha está Susana Parker, de veinticinco años. Y a la izquierda está Ashley Olson, de veinticuatro años.

Las tres chicas en la pantalla eran casi idénticas, si no fuera porque una tenía un lunar bajo el ojo y la otro era un poco más rellenita que las otras dos, se podría decir que son la misma persona.

– Es evidente que no las escogieron al azar –habló Rossi.

– Muy bien, hay que empezar a trabajar –ordenó finalmente Hotchner.

Y con eso último todos empezaron a moverse para empezar con aquella investigación.

***

Llevaban dos días seguidos trabajando en el caso de las desapariciones, pero aún no tenían absolutamente nada, ni un rastro, pista o indicio sobre el culpable. Por lo que Hotch decidió que parte del equipo fuera a descansar a sus casas, porque sabía que este caso sería difícil y largo, así que necesitaba al equipo descansado y lúcido.

Mientras Spencer caminaba por las heladas calles no podía evitar pensar en esa chica. La saludaba todas las mañanas, pero nunca había hablado directamente con ella. Aún así, eso no quitaba el hecho de que la chica era muy tranquila, se notaba de lejos.

Me hubiese gustado conocerla más, pensó.

Sin darse cuenta ya había llegado a su departamento, por lo que dejó todos esos pensamientos a un lado y subió al elevador. En cuanto entró a su departamento se tiró en el sofá; habían sido dos días muy agitados, por lo que se quedó dormido rápidamente.

Más allá de los sueños | Spencer ReidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora