Extra ¡Genya, Feliz Cumpleaños!

4K 313 84
                                    

Sentado en una banca, mantenía la vista fija en el suelo intentando calmar el mareo y las náuseas. Se había subido a tantas atracciones durante el día que perdió la cuenta y su estómago lo estaba resintiendo, pero, al menos su hermano lucía feliz.

-Te traje algo de agua - le extendió con amabilidad una botella fría.

La tomó y la puso contra su frente antes de disponerse a beber. La mirada del menor parecía preocupado, Sanemi no había vomitado aún, pero estaba pálido como un papel. Su cuerpo no estaba acostumbrado a tanta adrenalina de una sola vez, no tenía la misma energía que su joven hermano, pero eso no quitaba que estaba divirtiéndose; se sentía bien ver a Genya correr emocionado por todo el lugar, subiéndose a cada atracción que atravesaba su camino y sacando fotos a todo lo que le llamará la atención.

-¿Te sientes mejor, Nemi?

-Si, solo necesitaba descansar un momento - sonrió mientras le desordenaba con cariño el pelo - ¿que es lo que sigue?

Genya se sentó a su lado y comenzó a mirar el mapa que tenía del lugar, al reverso había un itinerario con los diferentes eventos que se llevarían a cabo durante el día.

-Aun nos quedan dos horas para el desfile - pensó - ¿entremos al castillo embrujado? - preguntó emocionado.

-Bueno... Al menos no me hará devolver lo que comí - suspiró y se puso en pie, extendiéndole la mano al menor, quien la tomó con gusto.

Caminaron juntos hasta el lugar y luego de esperar en la fila por unos minutos, fue su turno de entrar. Era un recorrido en pareja a través de pasillos oscuros cuya única fuente de luz era la linterna que les dieron en la entrada. Seguían el único camino disponible, Sanemi sostenía la linterna con Genya tomado de su brazo libre solo medio paso por detrás.

Gritos se escuchaban a lo lejos, no sabían si eran ambientales o de los que entraron un poco antes que ellos y a medida que avanzaban, el pasillo se hacía más angosto. De repente algo salió de la pared cerca de Genya, haciéndolo gritar y aferrarse con más fuerza a su hermano mayor, Sanemi golpeó al muñeco en reflejo mientras apartaba al menor del camino.

-Ups - exclamó al ver como destrozó la cara de la cosa culpable del espanto de Genya.

-Vamos, vamos - rió mientras empujaba al mayor por la espalda - si alguien pregunta diremos que ya estaba así.

Sanemi aguantó la risa y avanzó. De inmediato el ambiente tenso se hizo presente otra vez y Sanemi intentaba contener sus ganas de golpear algún otro muñeco cada vez que escuchaba a Genya gritar de miedo. Marionetas salían de las paredes, hologramas simulando fantasmas atravesaban su camino, manos se aferraban a sus costados de vez en cuando, instrumentos musicales que se tocaban solos y pasos ruidosos los seguían se cerca; los sustos eran cada vez más frecuentes y aterradores hasta que al fin vieron luz ajena a la de su linterna a la lejanía. En ese momento un ruido estridente se escuchó y voltearon a ver, revelando con la linterna a un sujeto con máscara y motosierra en mano que los amenazó y salió persiguiendo a toda velocidad. Genya aterrado, gritó a todo pulmón y tomó sin medir en lo absoluto su fuerza el brazo de Sanemi, obligándolo a correr rápido a la salida también. El recorrido terminó apenas atravesaron el túnel y estuvieron de nuevo donde iniciaron. Sanemi vio al menor respirar aliviado luego de recuperar el aliento, a la vez que relajaba de a poco su fuerza. Sus ojos debieron acostumbrarse poco a poco a la iluminación natural ya que el recorrido duró poco más de 20 minutos en casi pura oscuridad.

El brazo de Sanemi estaba un poco adolorido y pequeñas marcas rojas aparecieron en donde su hermano hizo presión antes.

-Lo siento - murmuró arrepentido mientras acariciaba las lesiones del mayor con cariño.

Tiempo Perdido [SaneGen] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora