Son las 9 de la mañana del lunes día 3 de octubre y a pesar de estar en invierno hay mucho sol, por lo que no hace tanto frío como debería para la época y el país tan frío en el que están , es más parece que estuviesen en primavera.
Emily se despierta con los primeros rayos de sol que entran por la ventana y busca a Ian con la mano pero se da cuenta de que no está. Lo llamó, pero nadie contestó. Por ello se duchó, se vistió y bajó a desayunar.
Pasaba la mañana, Emily no sabía nada de Doyle estaba con Declan en la casa jugando, cocinando para darle una sorpresa a su padre con una gran y deliciosa comida.
Todo iba bien hasta que al medio día recibió la primera sorpresa, una llamada de su contacto, llamada que no esperaba y que no quería coger ya que no sabe qué hacer, tiene un dilema, se ha enamorado hasta las trancas de Ian, pero también quiere cumplir con su deber. Después de muchas llamadas ignoradas y de pensarlo mucho decide coger el teléfono y hablar con él. Después de hablar un largo tiempo cuelgan y ella se va a dar una vuelta.
Llega la hora de comer e Ian no aparece por lo que después de volver a llamarle varias veces, Emily y Declan comen solos.
Pasan horas y horas, e Ian por fin aparece y con él otra sorpresa.
Lauren: hola Ian.
Declan: hola papá.
Doyle: hola hijo, hola Lauren. Declan, campeón vete a tu cuarto a jugar.
Declan: está bien.
Lauren: (cuando Declan a desaparecido) ¿que pasa Ian?
Doyle: te quería pedir un favor.
Lauren: dime, con gusto te haré el favor.
Doyle: tengo una misión y he pensado que podrías participar y bueno te quería pedir también si me podrías conseguir unas armas.
Lauren: ...
Doyle: ...
Lauren: por su puesto, ¿qué tipo de arma?, ¿alguna en concreto?
Doyle: bueno, serían un cañón, dos bazocas, 50 rifles, 40 escopetas y 20 pistolas. Sé que son muchas.
Lauren: por su puesto. Lo único ¿te puedo preguntar algo?
Doyle: por supuesto.
Lauren: ¿cual es la misión en la que voy a participar?
Doyle: te lo diré dentro de unos días, pero es grande, muy grande.
Lauren: está bien.Después de esta conversación se acercan, se besan y abrazan. Suben y se ponen a jugar con Declan a diferentes juegos de mesa.
Iba pasando la tarde entre juegos, chistes, cosquillas, risas, charlas, pero en un momento dado llego la ultima sorpresa del día.
Declan: (mientras le hacía cosquillas) papá por favor ayúdame.
Doyle: ...
Declan: mamá por favor para (Lauren para asombrada y asustada, y mira a Ian).
Doyle: hijo, ¿porque le dices mamá, si no lo es?
Declan: pues porque aunque no lo sea, la quiero mucho y me gustaría que a partir de ahora fuese mi mamá. (Lauren e Ian se miran. Lauren le pide permiso con la mirada a Doyle, que se lo da).
Lauren: por su puesto que no me importa, a partir de ahora seré tu mamá.
Declan: ¿de verdad?.
Lauren: sí, de verdad. Te quiero mucho Declan, te quiero como a un hijo.
Declan: siiiii, te quiero mamá (le da un beso y mira a su padre). Papá, ¿te importa que le diga mamá?
Doyle: no no me importa campeón.
Declan: bieeeeen (salta y le da muchos besos a Emily).Siguió pasando la tarde, llegó la noche, cenaron y acostaron a Declan. Después ellos se fueron a la cama, lloraron, se abrazaron, hablaron de todo un poco, pero sobretodo de lo que había sucedido con el hijo de Ian.
Finalmente, así abrazados y dándose mimos, caricias, cayeron en los brazos de Morfeo, conscientes de que mañana sería otro día y de que las cosas cambiarían y estaban cambiando, y no sólo por lo de Declan.