21:37 marcaba el reloj cuando volvió a casa. Extrañado por el sepulcral silencio se dispuso a recorrer su hogar.
No era nada habitual que ningún ruido hiciera presencia. Eso solo indicaba que su esposa y sus retoños no estaban en casa.
Caminó por los pasillos y recorrió las habitaciones, nada.
Revisó su celular; "No hay leche, me llevo a los niños" "¿Necesitas algo?" "Te amo" se leía en la pantalla de inicio. Respiró con alivio y sonrió embobado mientras respondía los mensajes.
Se dispuso a recostarse en el sillón, disfrutando de ese efímero momento de soledad, pero una carpeta extraña sobre la mesa ratona desvió sus intenciones.
"Boletín trimestral oficial"
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¿Inglés? Yeong había reprobado inglés...
¿En que había fallado?
Se sentía medio responsable y algo dolido porque en ningún momento su pequeño le había comentado respecto a sus dudas. No era lo que se dice un "padre presente" pero creía que su hijo sabía que tenía su apoyo.
Definitivamente necesitaban más diálogo entre padre e hijo.
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Se lo veía venir, literatura de último año era una materia complicada. De todas formas más no podía pedir, Yang Mi nunca había reprobado una materia desde que comenzó la escuela, jamás, pero todo tenía su primera vez y no podía quejarse.
