Arlequín || Joker ||

18

El corazón se le detuvo unos instantes. La voz de Markus seguía resonando detrás de la puerta, no parecía que se fuera a ir pronto, de hecho, parecía que sabía que ella estaba ahí.

Otro golpe.

—Harley, abre, maldición, tengo que hablar contigo.

Arthur se acercó a la puerta, pero ella lo detuvo. Le hizo un gesto de silencio y le pidió que esperara en su habitación, que ella se encargaba. Tras unos segundos, él obedeció.

Cuando abrió la puerta, Markus dirigió su vista dentro del apartamento.

— ¿Qué pasa?—preguntó Harley parada en el marco, impidiéndole la entrada.

— ¿Qué pasa?—replicó, alterado, molesto—Harley, ¿Qué pasa contigo? Déjame pasar, tenemos que hablar.

— ¿Ahora?

— ¡Sí ahora!—exclamó, entrando bruscamente al departamento. Harley observó su habitación. La puerta cerrada, todo silencioso. «Bien, mantente así y no hagas nada, Arthur, por favor»— ¿Dejaste escapar a un interno a propósito?

La pregunta la tomó por sorpresa.

—Claro que no, ¿Quién dice eso?

—La policía—replicó él. Estaba empapado, tenía una campera de color negro, chorreaba agua y casi deja un charco en la sala si no fuese porque caminaba nervioso de un lado a otro— Harley, te van a sacar la licencia.

Aquellas palabras se clavaron en su mente como cuchillos. No podía creerlo. Luego de tanto trabajo, luego de tanto espera, la sacarían de Arkham y no solo eso, le quitarían su licencia. ¿Por qué? Lo de esa mañana no había sido más que un accidente. Arthur se había soltado solo del chaleco y la correas, ¿por qué culparla a ella solamente?

— ¿Quién te dijo?—preguntó con voz débil.

—La dirección. Mira, es casi unánime, el único que se opone soy yo. Creen que lo dejaste salir a propósito, y creen que...—de pronto, Markus guardó silencio y se apretó los labios.

— ¿Qué?—preguntó Harley con sus ojos fijos en los de él.

—Creen que conspiras con Fleck para ayudarlo a escapar, que de algún modo, te aliaste con él. Mira, sé que eso suena ridículo, pero no quieren a la fiscalía encima de ellos, por eso te culpan solo a ti.

— ¿Qué tiene que ver la fiscalía?

Harley tenía unas ganas inmensas de llorar. Amaba su trabajo. Y si la sacaban de Arkham, no solo ya no podría ver a Arthur, sino que también, le quitarían la licencia y ya no ejercería más la psiquiatría.

—Creen que lo hiciste para evitar el juicio, que eres cómplice. Harley, está decidido, te van a sacar de Arkham. Tal vez pueda evitar que te quiten la licencia, pero...lo siento.

Ella no se movió. Solo lo observaba como esperando que le dijera que todo eso era una broma de mal gusto, pero no fue así. La furia empezó a subirle por las venas, hasta llegar a su cabeza, donde miles de pensamientos se concentraban en un solo eco.

«No verás a Arthur»

« ¿Por qué lo dejaste escapar?»

«Nunca tendrías que haber ido a verlo esta mañana»

«Ya no lo veré, ya no lo veré»

Cerró los ojos. Las voces se calmaron. Solo una le seguía susurrando cosas. La de Guy. Nunca se callaba. Si estaba en su mente o era un fantasma, nunca se callaba.