El perfume ~una estúpida historia de amor~ {Warmi}

5. Evitándome

-Mimi tía, se ha ido celosa- rio Miriam mientras desayunábamos tranquilamente en mi casa

-Lo que quieras, pero que no me contesta- me quejé a lo que ella rio con mayor intensidad

-A ver, que me ha visto salir de tu habitación en pijama, que es muy fácil montarse la película- aclaró entre risas

-Pero es que no lo entiendo, que ella tiene novio, que no tiene sentido Miriam que no le van las tías- insistí reafirmándome en mi idea

-A ver ¿Qué le has escrito para que no te conteste?- preguntó tendiendo su mano para que le diese mi teléfono –"¿¿Ana??" "¿Por qué te has ido así?" "¿Ana?"- leyó dramáticamente conteniendo la risa –Unos mensajes muy profundos, no cabe duda- rio

-Trae- me quejé arrebatándole el móvil de las manos, en verdad tenía razón. ¿Pero qué hacía yo allí hablando de esto con una chica a la que había conocido hacía menos de 24h en un parque entre lágrimas?

-Ésta todavía se te indigna teniendo ella novio sabes- Miriam sonaba molesta

Yo bufé, al final era yo la que se terminaba arrastrando sin motivo, tampoco era nada nuevo, ya estaba acostumbrada

-Mimi- Ricky acababa de llegar a casa con mil bolsas en la mano

-Ricarda te voy a partir la boca- hablé alzando la voz– ¿Para qué cojones le das la dirección de casa a ¡Ana!?- pregunté molesta

-Para que os lieis de una jodida buena vez- habló obvio

-Pues te has lucido- rio Miriam de nuevo

-¿Qué ha pasado?- Ricky tomó asiento a nuestro lado y comenzamos a contarle todo bajo su mirada de curiosidad –Hostia, si se pone celosa es que algo quiere ¡Madre mía! ¡Es que encima te evita!- exclamó con emoción

-Que es imposible, no puede estar celosa, debe de ser otra cosa- insistí

Y bueno, puede que quizá sí que tuviesen razón, quizá Ana sí estaba celosa... Quizá tenía celos de Miriam porque había pasado la tarde con ella y no con Ana o... Quizá le molestó que rechazase sus planes y luego estuviese con una chica en casa.

No sé realmente que le había pasado para evitarme, pero sí sabía que no me gustaba la situación

¿Cómo coño se suponía que iba a hablar con ella ahora? No respondía a mis llamadas, no contestaba a mis mensajes, no tenía ni idea de donde vivía... Que gran mierda de situación.

-Mimi tía no te ralles más- la voz de Miriam me hizo volver a la realidad

Sí, me estaba rallando más de lo que debía pero es que no tenía ningún tipo de respuesta a lo que había sucedido.

Y fue ahí cuando vi "la luz". De un salto, así fue como me levanté de la mesa envalentonada hacia mi habitación, me vestí con lo primero que alcancé del armario y salí de casa bajo las insistentes preguntas de Miriam y Ricky

El Corte Inglés esa había sido la respuesta. Ana trabajaba allí y yo lo sabía, lo que no sabía eran sus turnos de trabajo y justamente, aquella mañana no era su turno. Suspiré agotada tras recorrerme el inmenso Corte inglés de Callao y decidí que no merecía la pena estar allí esperándola cuando yo no tenía culpa de nada, es que quién se había ido sin más había sido ella, quién tenía novio y no paraba de restregármelo era ella, joder que se suponía que era yo la que debía estar indignada y llorando por las esquinas. Que se suponía que debía ser ella la que me buscase para disculparse, pero claro, es que la que se había enamorado tontamente no era ella, era yo.

Por eso era yo la que se arrastraba, por eso era yo la que trataba de mantener la calma a pesar de estar haciéndome pedazos, era yo la que continuaba allí aun sabiendo que no podía acabar bien, era yo la que sonreía falsamente a su novio y me alegraba por su felicidad, era yo la que, a pesar de conocerla tan poco, la necesitaba tanto

Y sí, soy, fui y seré, la mayor estúpida de España, con la mayor estúpida historia de amor que empieza en una calle abarrotada con un perfume y una voz. ¿Cómo coño iba a salir todo bien habiendo empezado así?

¿Qué historia de amor empieza con una chica volviendo a casa y creyendo encontrar al amor de su vida al encontrar su perfume entre la multitud y escuchar su melodiosa voz entre el inmenso ruido de la ciudad? Eso no se ha visto nunca, ni en una historia de amor de película, ni en una de la vida real, era simplemente una estúpida estupidez que había acaparado mi total ilusión.

Quizá Ana ya no estaba hecha para mí. Quizá era tiempo de parar con lo quiera que tuviésemos.

Divagaba ensimismada en mis pensamientos cuando, en lo que puede interpretarse como un golpe de suerte, tropecé con alguien de forma brusca a las puertas del centro comercial.

-Hostia coño, mira por dónde vas, joder- La chica con la que acababa de chocarme no parecía la más agradable del mundo por sus palabras –Que hostia- continuó

-Tú también podías haber mirado- solté molesta mientras me recomponía

-¿Mimi?- Ahora sí que alcé la vista en cuestión de segundos

-¿Patri?- Como no, en un día como hoy no podía faltar un reencuentro con mi ex, aquella a la que hacía casi cinco años que no veía tras una trágica ruptura, tan trágica que me dejó tirada en un avión rumbo a Los Ángeles. No os imagináis su cara de terror al verme, pero no tenía tiempo para discutir con ella, ni tiempo ni ganas.

-Mi... Mimi ¿Qué tal?- titubeó visiblemente nerviosa -¿Qué tal por LA?- ¿En serio? ¿Iba a preguntarme por Los Ángeles, donde me dejó tirada?

-De puta madre, y ahora aparta que tengo prisa- No sé de donde salió mi enfado tan brusco, pero me terminé sintiendo muchísimo mejor

Y sí, la dejé allí y me marché a casa con mil sentimientos encontrados, pero no voy a mentir, la mayoría eran a causa de Ana

Sí, Ana, la misma a la que vi al llegar a mi edificio, ahí parada junto a puerta, apoyada en el portal con la mirada perdida en las calles de Madrid

¿Por qué? ¿Por qué ahora que había tomado la decisión de olvidarme de ella aparecía justo frente a mí?

-¿Ana?- murmuro al llegar junto a ella

Un abrazo asfixiante, eso es lo que recibo como respuesta. Tras unos segundos tratando de reaccionar, mis brazos la envuelven inconscientemente acariciando su espalda.

Yo seguía sin procesar lo que estaba pasando, estaba claramente perdida.

-Lo siento- susurró sobre mi hombro

Vale, ahora solo necesitaba darme una explicación a todo aquello 

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Perdón por estar desaparecida, pero estoy de vuelta, solo diré que Patri no está ahí por casualidad

¿Buena semana!