Trío - Dieciséis.
Valentín.
—Cambia esa carita Valen.—Me susurró Dani cuando nos quedamos sólos en la cocina, ordenando todo lo que habíamos usado, lo miré a los ojos y me acarició despacio, haciéndome cerrar los ojos.
—¿Qué cara?—Pregunté subiendo una ceja, tomé su mano y la llevé a mi boca para darle un beso cortito, haciéndolo sonreír, se acercó hasta que nuestras caras quedaron cerca y mirando rápido para el patio, asegurándose de que nadie haya entrado, me dio un beso en la comisura de mis labios.
Lo tomé de la cintura y cuando me iba a acercar para chaparlo, se alejó riendo un poco, dejando un beso en mi nariz, enano choto, me tienta y después se separa de mi.
—Esa carita de orto que aunque me gusta mucho, no quiero que hoy me mires así.—Dijo haciéndome un puchero, cerré los ojos y largue un suspiro.—Te invité para que me sonrías y me alegres el día, no para que mires mal a mi novia, a mi papá y hasta a mi a veces, sé que no te gusta que no estemos juntitos, pero yo te necesito.—Susurró dejando otro beso, y mirándome otra vez a los ojos.
Largue un suspiro y asentí con la cabeza, tenía razón, tendría que estar sonriendole y aprovechando a tocar su culo cuando nadie nos ve, no con cara de culo y enojado.
—Es verdad bebé, perdón.—Hablé tomándolo de las mejillas y dándole un piquito en sus labios, haciéndolo sonreír.
—¿Te diste cuenta de que parezco un forro que le mete los cuernos a su novia con su mejor amigo?—Preguntó Daniel, reí mordiendo mi labio y giré mi cabeza para fijarme por la ventana si venía alguien o si estaban mirando, pero no.
Sonreí y bajé mis manos a su culo para apretarlo con fuerza, pegándole unos palmasos que lo hicieron jadear, me gimió cuando se dio cuenta de que me calenté y yo sonreí.
—Sos una zorrita que le gusta que le toquen el culo, ¿te gusta qué te toque el culo mi amor?—Pregunté empezando a caminar para adelante, le pegué en el culo cuando asintió desesperadamente en la cabeza y lo pegué contra la pared, dejando besos en sus labios, sintiéndome un adolescente que se tiene que esconder.
Y si, nos teníamos que esconder de su estúpido padre, que por cierto, quería cortarle las bolas.
—Me encanta Val, ¿hoy a la noche me vas a dar mi regalito de cumpleaños?—Preguntó con voz infantil, y sentí que se me paró con solo escuchar su tonito de voz, asentí con la cabeza y bajé una de mis manos a mi erección, apretandola bajo sus ojos negros.
—Si me dejas sí.
—Yo te dejo Valen.—Habló largando un suspiro entrecortado, sonreí y encerré su cara en mis manos, dejando besos cortos en sus labios, aunque quisiera chaparmelo hasta no dar más, no podía arriesgarme a que alguien entre y nos vea literalmente comiendonos la boca.
—¿Esta noche?—Pregunté mordiendo mi labio, asintió con sus ojitos brillosos y en ese momento empecé a hacer una lista de todas las cosas que quería hacerle, quería tocarlo, besarlo, colarle los dedos y dentro de todo eso, cogerlo tan duro que...—En mi casa.—Volví a hablar antes de que se me siga parando, pensar en todo lo que podía llegar a hacerle me volvía loco.
—No, acá, en la mía. Mis papás se van hoy a el campo.—Dijo tomando mis mejillas, rozó nuestros labios y sonrió, yo también lo hice, asentí con la cabeza dejando un beso en sus labios y suspire mirándolo a los ojos.
—No puedo aguantar.
Largó una risita mientras se separaba de mi y empezaba a caminar haciendo que yo mire su culo, se fue a la heladera y sacó tres cervezas, las destapó y llevó una a su boca para tomarla mientras me miraba a los ojos.
Sonreí y largue un suspiro, llevando mis manos a mi pelo.
—No me provoques Daniel.
—No te provoco.—Se hundió de hombros y río, volvió a llevarse la cerveza a la boca y pasó la lengua por el pico de la botella, mirándome fijamente a los ojos, otra vez.
Sentí que se me fue el aire y llevé mi mano a mi entrepierna para apretarla por arriba del pantalón, Dani sonrió y bajó sus ojos a dónde tenía la mano, mojó sus labios y lo mordió.
—¿Se te paró Valen?—Preguntó largando un suspiro, largue un gruñido y apreté un poco más mi erección.
—¿Vos querés qué me masturbe acá nomas?—Dije mordiendo mi labio, sonrió y empezó a caminar para mi lado, con las cervezas en la mano y mirándome con esos ojos negros que tanto me gustaban.
—Espera a la noche amor, y hacemos todo lo que quieras.—Me susurró en el oído, mordí mi labio y pasé un brazo por atrás de él, le apreté el culo y cuando dio un saltito de sorpresa, le pegué una palmada, haciéndolo jadear.
—¿Ves que te gusta que te toquen el culo?—Susurré yo también en su oído, asintió con la cabeza y hundió su cara en mi cuello dejando algunos besos que me estremecieron la piel, cerré los ojos y lo abracé.
Necesitaba tanto estar con él, quería que estemos sólos y abrazarlo, llenarlo de besos, hacer que se desnude y ande así por toda la casa, poder estar pegado a él sin que nadie nos impida nada.
—Sólo me gusta que vos me lo toques.—Dijo levantando su cabeza para mirarme, dejó un beso en mi mandíbula y sonrió.
—Te amo Ribba.
—Y yo te amo a vos Valen.
Nos sonreímos sin dejar de mirarnos a los ojos, estuvimos un tiempo largó así y cuando nos dimos cuenta de que habíamos tardado mucho, nos fuimos para afuera, Dani le entregó una cerveza a su papá y una a su mamá y se sentó en una reposera que estaba al lado de la mía.
Puse cara de culo cuando la novia de Daniel vino corriendo a sentarse arriba de él y se puso a sacarse fotos con el celular, miré a Daniel, pero él no lo hizo, me hizo sentir un poco mal, pero cuando vi que pasó una de sus manos hasta tocar la mía, sonreí, Daniel era el amor de mi vida, no hay con que darle.
Me miró a los ojos y movió sus dedos dejando caricias despacio, sin que nadie nos vea. Movió sus labios diciéndome algo y yo sonreí cuando entendí.
"Te amo" había soltado, sin que nadie se de cuenta, y no pude quitar mi sonrisa en el resto del día.
Yo también lo amaba.
Y mucho.
✨
Al final Daniel cedió y se dio cuenta de que Valentín lo re puede ahre.Espero que les guste! Lxs amo <3
-galileo