CapÍtulo 5

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Narra Derek...

El maldito despertador me avisó de que era mañana.

Me levanté, como de costumbre, para ir al colegio.

Entre quejidos y maldiciones por lo bajo me dirigí hacia el armario para elegir unos jeans grises, una camiseta blanca y mi clásica chaqueta de cuero negra.

En cuanto terminé de darme una ducha y vestirme bajé a desayunar y me encontré con mi nana.

-Hola, Nana- la saludé con una sonrisa pintada en los labios.

Solo a ella le sonrió.

La quiero como nadie puede hacerse una idea y es la única que sabe cómo soy en realidad.

No me interesa que los demás sepan de mi verdadero carácter y es por eso que prefiero ocultarlo bajo un muro de piedra y aparentar algo que he aprendido a ser por obligación.

-Hola mi niño ¿cómo has amanecido?- me preguntó con su típico tono cariñoso y maternal.

-Bien...aunque con sueño aún-

-¿Lo mismo de siempre?- me preguntó mirándome con candor y paseando su mano por mi espalda.

-Sí- le asentí.

Ella se dirigió hacia la encimera y empezó a prepararme el desayuno.

En pocos minutos dejó un vaso con chocolate y unas tostadas delante de mí.

-Que te aproveche mi niño y no te entretengas que no llegarás-

Noté como me dio un beso en la cabeza para después salir de la cocina e ir a hacer las faenas de casa.

No me demoré mucho en tomarme el desayuno.

Agarrando mi mochila salí pitando de casa dirección al instituto.

Llegué puntual y me fui directamente a clase.

Todavía no había llegado nadie por lo que me senté en el fondo del aula, como siempre.

Abriendo mi mochila busqué el iPad. Me coloqué los auriculares y me dispuse a escuchar un poco de música mientras los demás llegaban...



Mis compañeros empezaron a entrar, apresurados.

Detrás de ellos apareció el profesor de biología.

-Buenos días alumnos y alumnas. Como ya les vine avisando, les voy a explicar sobre el  trabajo de biología sobre el tema que estamos dando..y lo harán en grupos de tres personas- anunció sacando sus cosas de su maletín -Los grupos los haré yo mismo así que espero no oír ninguno tipo de queja por su parte de que no quieren estar con éste o con el otro. Los que yo designe serán con quienes van a estar-

Todos empezaron a quejarse salvo yo que guardaba el iPod en la mochila.

-Silencio, silencio...dije que nada de quejas...¿¿ES QUE NO ME OYEN?? DIJE SILENCIO- gritó con su potente voz.

La clase entera se calló.

Ni una mosca se oía.

El profesor agarró unas cuantas hojas en las manos, carraspeó aclarándose la garganta y empezó a nombrar:

-Rubén Álvarez, Paula Castillo y Benjamín Gutiérrez. Primer grupo-

Los nombrados refunfuñaron pero no pudieron quejarse.

-Tomás González, Facundo Figueroa y Lucas Martínez. Segundo grupo-

De nuevo oí como farfullaron los tres susodichos.

JUNTO A TI [STEREK] |LIBRO I|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora