Los dos estaban ahí parados, viéndome. Sí era Matt, mirándome fijamente con unos ojos intensos, esa mirada solo pensé ver en mis sueños, pero no, lo estoy viendo ahorita al frente de mi. El cambio un poco, se le ve que bajo un poco de peso, creció su barba pero lo demás sigue igual. Por qué volvió?! , que quiere?! , viene muchas preguntas en mi mente. -Hija!!- escucho una voz lejos, que me hace reaccionar y es papá. Yo sigo agarrada de la mano de Rodrigo, volteo y le miró, le trato de sonreír pero se me hace difícil y el me sonríe. Avanzamos hasta donde mi papá y Matt, le agarro fuerte la mano de Rodrigo. El ahí con una mirada intensa y seria, cruzamos nuestras miradas y mi corazón late más de lo normal, pero su mirada no expresa nada. -Hola Kate - escucho su voz, se acerca y deposita un beso en mi mejilla, yo sin moverme de mi lugar. -Hola, tu serás Rodrigo verdad? - Matt le pregunta, estrechando la mano. -Sí señor, soy Rodrigo - le dice recibiendo el saludo. -Escuche mucho de ti- le dice, seguro papá le habrá contado. -Si? Mmm.. Debe ser - le dice sonriendo y un poco avergonzado.
Derrepente aparece una señorita de lejos parece ser saliendo del baño y camina hacia nosotros y se coloca al costado de Matt. Aquella chica es hermosa, parece una modelo, es trigueña , cabello castaño, es casi perfecta a mi parecer. Ella le mira y le sonríe, Matt le agarra de la mano. Parece que entra a mi cuerpo un escalofrío al ver esa imagen, y recuerdo lo que me hizo y mi mente le maldice en todos los idiomas. -Ellos son Kate y Rodrigo - Matt nos presenta. -Encantada de conocerlos-- se nos acerca y nos saluda con una sonrisa cómoda. Yo trato de sonreír pero de verdad se me resulta difícil ante esta situación tan incomoda para mí.
Después de estar en la sala charlando, viene su novia de papá. Sí!, mi papá tiene pareja, se llama Lucía es cinco años menor que papá, lo que sospechaba era realidad se conocieron en el trabajo, parece que ella era nueva, parece ser que papá encontró a la persona adecuada porque se entienden bastante. Lucía también la consideré una de las personas que puedo confiar, ella es buena conmigo y me hace sentir cómoda, la aprecio bastante. Ella también tiene hijos, tiene dos, una mujer y un varón, me llevo bien con ellos, pero no los veo mucho solo en las ocasiones especiales. Estamos en la sala, yo estoy a lado de Rodrigo estamos hablando mientras que los cuatro conversan entre sí, esto me aburre y me incómoda pero parece que Rodrigo no, el se incluye y conversa con los cuatro y mientras que yo fingo prestar atención solo mirando y sonriendo, toda la noche no hable casi nada no sale palabras de mi boca. -Estas bien? - me pregunta Rodrigo. Yo le sonrió. -Sí, sino que estoy un poco cansada, solo eso. - le digo. El me agarra la mano. -Creo que deberíamos descansar, además ya es tarde. - dice y asiento, nos levantamos del sofá. -Papá, Rodrigo ya se va- le digo y papá se levanta. -bueno Rodrigo, ya nos veremos estos días, te quedas todavía no? - le pregunta -Si señor, me voy a quedar todavía. Bueno señor cuídese. - le dice -Igualmente - le dice papá. Se despide de todos, yo le acompaño hasta la puerta, y me despido con un beso corto. -Nos vemos amor, estamos hablando - me dice y yo siento. Le miró hasta que tome un taxi, y cuando desaperece su auto, entró a casa. Me incomoda que haya regresado, pero parece que a el no, seguro está acostumbrado hacer daño a las personas, cuando le dije que no lo quería ver, pero a él no le importa. No me quiero despedir así que camino hacia las escaleras. -Hija!! - escucho la voz de papá y yo sin ganas volteo, y sin darme cuenta cruzó mirada con Matt que parecía una eternidad, el como siempre sin ninguna expresión en su rostro, reaciono y volteo hacia papá. -Ven!, que conversar un rato. - me dice. No quiero ser maleducada pero estoy realmente cansada para aguantar unos minutos más. -Si no quieres, no te preocupes - dice Lucía, ella nota que estoy cansada y le estoy agradecida, y le sonrió. -Gracias Lucía. Hasta mañana a todos - digo y subo las escaleras para ir a mi cuarto. Cuando ya estoy en el segundo piso caminando hacia mi cuarto. -Kate- escucho una voz de lejos, volteo y es Matt. Se va acercando y yo nose si quedarme o seguir con mi camino. Cuando está frente a mí, su mirada era cómoda y siento que analiza cada parte de mi rostro, como si añorara algo. No puedo dejar que sienta algo por el, solo recuerda que te hizo mucho daño, que casi te hace perder la razón. -Sigues igual de hermosa--me dice, sin darme cuenta hace que acelere mi corazón. -Que Quiere? - le preguntó sonando fría y distante. -Te traje algo-- estira su mano para darme una bolsa de regalo. Y yo aún más molesta, parece el se olvido de las cosas que hizo. -Lo siento, pero yo no voy a recibir nada usted Señor- le digo molesta, me volteo y voy para mi habitación. Me molesta que siga así, para que diablos vino para sacarme encara que se olvidó de mi. Espero que se vaya rápido, o sino yo me voy hasta que el no esté acá.
De la nada me despierto y veo que son oscuras aún, derrepente me dan ganas de orinar, maldición el water de mi cuarto esta mal, oh no!!, justo cuando no quiero salir, pero mi vejiga ya no aguanta. En verano duermo con mi braga y brasier nada más, me pongo mi vestido de seda que es un poco transparente, pero no creo haya nadie afuera así que salgo y voy rápido hacia el baño, ahora si dios! mi vejiga se siente libre, sonrió salgo del baño y voy caminando hacia a mi habitación y derrepente aparece él ahí parado frente a mi, oh!! Maldición!!. Me sobresalto al verle.
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