Capitulo 32

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Pasaron unos días después de aquello y finalmente llego el día en el que mi mejor amiga volvía de su viaje, aún no le había mencionado nada sobre lo que me contó Caleb de mis padres y es que conociéndola estoy segura de que se sentiría culpable pese a no tener culpa de absolutamente nada.

Corro escaleras abajo y cojo mi bolso colgándome este del hombro a la vez que cojo las llaves de casa y salgo por la puerta sin siquiera despedirme.

En este tiempo también había estado asistiendo a mis clases de conducir y dentro de poco me examinaria, pero por ahora tenia que continuar yendo a casa de Oli caminando o en este caso corriendo.

Llego justo a tiempo, pues de su coche negro y en compañía de sus padres Oli baja de la parte de atrás y cuando me ve corriendo desde lejos rápidamente me imita y también corre en mi dirección.

Debido a la velocidad de ambas y al salto de Oli sobre mi caemos al suelo, más bien yo caigo a él pues mi amiga por suerte o mas bien por desgracia para mí cae sobre mi, rodamos cual croqueta en el suelo y continuamos abrazándonos sin separarnos ni un segundo.

-¡Chicas vamos levantad del suelo!-grita la madre de Oli protectoramente, lo cual es entendible teniendo en cuenta que es pleno invierno y el suelo no es precisamente el desierto del Sáhara.

 -Es un placer volver a verte Savannah-dicen los padres de Oli al unísono a la vez que me reciben con los brazos abiertos y dispuestos para darme un abrazo.

Es sorprenderte decirlo o más bien el darme cuenta ahora mismo de ello y es que los padres de Oli siempre han sido más cariñosos y familiares que los míos propios.

Si hay algo que puedo llegar a envidiar de mi amiga aunque se trata de una envidia sana es de los padres que tiene, aunque al principio no les hizo gracia que su hija quisiera estudiar arte finalmente ambos lo aceptaron para no perder a su única hija y especialmente porque se dieron cuenta de que eso hacia feliz a su pequeña.

Todos juntos nos sentamos a comer y he de admitir que amo la comida del padre de Oli, porque si su padre era el mejor cocinero que he podido conocer.

-¿Entonces te apetece salir o descansar?-le pregunto a Oli una vez nos encontramos solas en su habitación.

-¿En serio acabas de hacer esa pregunta tan estúpida?-pregunta alzando una ceja incrédula.

-Genial, estoy deseando presentarte a Megan y Kiara-le digo tirándome sobre su cama mientras ella guarda la ropa de su maleta en el armario.

-Yo estoy impaciente por conocerlas, últimamente hablas mucho sobre ellas y eso solo significa que son buenas chicas-responde con voz alegre aunque su sonrisa no la acompañaba del todo.

-¿Que te preocupa?-le pregunto frunciendo el ceño.

-Es solo que se me hace raro, desde que somos pequeñas hemos sido tu y yo solas contra el mundo, incluso Luke se mantenía en muchas ocasiones a un lado-responde y me levanto inmediatamente de la cama para cogerla del brazo suavemente y sentarla en esta junto a mi.

-Oli, eso nunca cambiara, siempre seremos nosotras, nadie ha pasado por lo que nosotras, nunca nadie me ha apoyado como tú y el que conozcamos gente nueva es fantástico, hace que te sientas más vivo-le explico agarrando sus manos. 

Entiendo su miedo, hasta que yo llegue Oli tuvo que soportar malos comentarios y golpes de parte de los demás y todo esto ha provocado que desconfíe mucho de las personas, la única persona que pudo acercarse a ella y en la que realmente ha logrado confiar he sido yo, ella suele decir que soy su ángel guardian.

-Lo sé, pero sabes lo mucho que me cuesta todo esto, Luke tuvo que estar meses con nosotras para que le permitiera darme un abrazo-dice con tristeza.

-Te entiendo Oli, no te merecías nada de lo que te paso pero sabes que no dejaría que nadie volviese a hacerte daño, realmente ellas te van a encantar-la animo y ella me sonríe para seguidamente asentir.

En realidad ella lo sabía, durante su viaje tuvo la oportunidad de hablar con ellas por mensajes y alguna vez que me llamo por teléfono también hablo con ellas, simplemente le cuesta un poco pero sé que hoy todo ira sobre ruedas.

Cuando Oli termina de guardar las cosas con mi ayuda nos despedimos de sus padres y caminamos hacia mi lugar secreto, que ya no es tan secreto.

Una vez llegamos nos encontramos con las chicas sentadas bajo un árbol y nos acercamos a ellas.

-Bueno ya llego la desaparecida-saluda Kiara acercándose a mi y dándome un beso en la mejilla-Encantada de conocerte en persona Oli-saluda después a mi mejor amiga quien le sonríe.

Por suerte hable con ellas antes de la quedada y les informe de que lo mejor era que no le dieran besos o abrazos a Oli hasta que ella tomara la iniciativa.

Pero para sorpresa de las tres Oli se acerca y da un abrazo a Kiara y después a Megan.

-A mi también me encanta veros al fin-admite y ahora si puedo ver la felicidad invadir su rostro.

-¿Que os apetece hacer? No creo que quedarnos aqui sentadas sea muy buena idea a no ser que alguna quiera morir congelada entonces seria la mejor opción-dice Megan poco después de que estemos un rato hablando.

-Creo que a mi ya se me ha congelado un dedo-confiesa Oli mostrando sus manos rojas.

-¿Vamos a merendar a una cafeteria de por aqui?-ofrezco como idea y luego de una corta votación emprendemos camino hacia dicha cafeteria.

Nos sentamos en una mesa y cuando nos traen nuestro pedido comenzamos a hablar.

-¿Ya le has enseñado la canción a Oli?-pregunta Kiara y mi amiga la mira interrogante.

-Se refiere a la canción que presentare a la prueba de admisión a la universidad-le explico y ella sonríe en respuesta.

-¿Ya la has terminado?-pregunta alegremente a lo que asiento en respuesta.

-Si, aún nadie la ha escuchado-le informo y ella mira a las chicas y luego a mi.

-¿Enserio?-pregunta sorprendida por mi confesión.

-Muy enserio, la señorita aqui presente no nos ha querido enseñar ni un acorde, dice que tú seras la primera-dice Megan señalándome-asi que nos tiene en ascuas.

-Te lo prometí-le digo encogiendome de hombros y ella me da un abrazo sonriendo.

-Tengo que ir a recoger a mi hermana de la casa de una amiga-informa Megan mirando su reloj y levantándose de la silla.

-Os acompañamos-decimos Oli y yo al unísono.

Las cuatro caminamos fuera del local y Oli y yo seguimos a Megan y a Kiara hasta la casa de la amiga de la hermana de la primera.

La puerta de la casa se abre y una niña sale por ella corriendo.

-¡Meg!-grita corriendo hasta sus brazos.

Y cuando consigo ver su cara mi cuerpo de congela y y lo único que hago es aclararme la vista con las manos como si la niña fuese fruto de mi imaginación, pero no es asi, pues cuando termino la pequeña continua ahí pero esta vez frente a mi.

-Esta es mi hermanita Camille-me la presenta Megan y la pequeña me dedica una sonrisa.

Trago saliva y miro fijamente a la pequeña con una sonrisa cariñosa sin poder creer a quien tengo delante 

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Holaa!!

¿Que os ha parecido el capitulo?

Espero que os haya gustado ♥️

Nos leemos muuuchos besooss 😘.

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