Simplemente eres tú

Capítulo 41

Peyton saca su cuaderno de un cajón y nos sentamos en la cama poniéndonos en posición de indios.

 De la libreta saca unas hojas suelta las cuales esparce por la cama, en ellas dibujos de vestidos, vistos por la parte delante y por la parte de atrás.

-Todos son preciosos-digo mirando cada dibujo.

-¿Que te parece si llamamos a Oli?-pregunta a lo cual yo asiento de acuerdo con su propuesta.

Cojo mi teléfono y llamo a Oli por videollamada.

-¡Hola!-exclama alegre alargando la última "a".

-Oli, te tengo una sorpresa-digo mientras le doy la vuelta a la cámara mostrándole los diseños que se extendían por la cama.

-¡Que bonitos!-exclama con sorpresa.

-Los ha hecho Peyton para que elijamos un diseño para los vestidos de dama de honor-le informo-así que amiga tenemos que tomar una decisión.

De esta manera y luego de unos minutos debatiendo elegimos el diseño acorde a los gustos de ambas y con el que sabemos que las dos estaremos muy cómodas.

-Una gran elección-nos dice Peyton antes de que Oli se despida de nosotras y finalicemos la llamada.

Bajamos nuevamente al salón, Peyton se sienta junto a Cole y yo miro a Caleb alzando una ceja.

-¿Dónde esta Axel?-le pregunto al notar su ausencia en el salón.

-Ha subido a su habitación hace un rato-responde para después volver la mirada al televisor.

Vuelvo a subir las escaleras, esta vez destino a la habitación de mi novio.

Abro la puerta sigilosamente, Axel esta tumbado boca a bajo en la cama, probablemente dormido.

Entro a la habitación de puntillas cerrando la puerta detrás de mi, me acerco a la cama y despacio me tumbo en ella, después subo parte de mi cuerpo sobre el de Axel, quedando con mis manos y mi pecho sobre su espalda, acerco mi boca a su oreja y susurro.

-Eres un dormilón-noto como su sonrisa aparece en sus labios e inevitablemente también sonrío.

Se gira y yo me levanto levemente facilitándole el movimiento, ahora estoy recostada sobre su pecho.

-Lo siento, pero es que mi novia me ha tenido algo abandonado-responde burlón.

-Lo siento mucho, es que tenia tantas ganas de volver a ver a Peyton...-digo sintiéndome culpable.

Tiene razón en que desde que llegamos no hemos pasado demasiado tiempo los dos solos.

 -No te preocupes, lo entiendo, solo bromeaba, es normal que quieras pasar tiempo con tu hermana, en tu lugar también haría lo mismo-escucharlo hace que mi corazón se apriete, me encantaría decirle que quizá esa posibilidad no esta ya tan lejana, pero me callo.

-¿Que te parece si hoy salimos los dos solos?-le propongo y el me regala una sonrisa a cambio.

-Me parece perfecto-responde dándome luego un beso-no quiero que te sientas culpable o algo por el estilo, Cole, Caleb y yo nos hemos divertido también, hemos jugado muchos videojuegos-explica haciendo que ría.

-No te gustan los videojuegos-añado riendo.

-Se me olvidaba ese detalle-responde arrugando la nariz.

Beso su nariz, luego su mejilla y por último sus labios.

-Prometo recompensártelo-digo muy cerca de sus labios.